Botnia-UPM: se viene otro “Grito Blanco”
Tras el silencio autoimpuesto durante la campaña electoral, la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú anunció la realización de la novena edición del Grito Blanco, una movilización estudiantil para protestar por el funcionamiento de la planta de Botnia-UPM sobre el río Uruguay.
La primera edición del Grito Blanco se realizó en septiembre de 2005, en el marco de la dura lucha impulsada desde Gualeguaychú bajo el lema “no a las papeleras en la cuenca del río Uruguay”.
Durante la campaña electoral, desde la Asamblea se informó que se suspendían todas las acciones públicas para evitar interferencias en la lucha política partidaria.
El Grito Blanco se realizará en la plaza Urquiza, frente a la Municipalidad de Gualeguaychú, y participarán alumnos de Gualeguaychú y ciudades cercanas y también una delegación estudiantil de Buenos Aires.
El asambleísta Juan Veronesi anunció que en esta oportunidad, se realizará además una recorrida por las calles de la ciudad del sur entrerriano y luego se realizará el acto central en la plaza.
Se anunció además que en el acto, los estudiantes representarán las acciones que hicieron durante el año para la defensa del medio ambiente.
Veronesi dijo que además de la lucha contra la pastera que produce pasta de celulosa, se agregarán reclamos contra “el fracking y los agrotóxicos, que son problemas de nuestra provincia”.
Asambleístas consultados anticiparon que además se pedirá que la Cancillería argentina retome las acciones por la contaminación que provoca la planta de Botnia-UPM.
Asimismo, pedirán respuestas a una nota presentada en julio a la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), el organismo binacional que regula las actividades en el río que comparten la Argentina y el Uruguay y que además realiza el monitoreo en la pastera.
En esa nota, la Asamblea formuló un extenso y minucioso planteo técnico y científico sobre el funcionamiento de la pastera, además de pedir que se difundan de manera pública los monitoreos ambientales que se vienen realizando desde el 2010 y que nunca se dieron a conocer.
En la nota se recordó que “Botnia ha violado de manera serial el Tratado del Río Uruguay, que sigue contaminando de manera diaria y escandalosa a la región y en ese marco el monitoreo ha perdido la vitalidad que se supone debería haber tenido, además de que los gobiernos no están haciendo nada y miran para otro lado frente a este conflicto que ya lleva diez largos años”.