Bordet destacó que más de 380 mil entrerrianos se beneficiarán con el acueducto Gran Paraná
|“El desarrollo de la infraestructura para el agua potable es una de las políticas basales de cualquier estrategia de desarrollo y hace también a la equidad, por la decisión del presidente Alberto Fernández de priorizar esta obra para nuestra provincia”, sostuvo el gobernador Gustavo Bordet.
El Acueducto Metropolitano Gran Paraná, que viene siendo gestionado por el mandatario entrerriano, proveerá de agua potable a Colonia Avellaneda, San Benito y Oro Verde. La inversión de 1.800 millones de pesos beneficiará, en el futuro, a 380.000 entrerrianos.
La obra, anunciada durante la visita del presidente Alberto Fernández a la capital entrerriana, también prevé la conexión Sauce Montrull y el abastecimiento al próximo Centro Distribuidor en la zona Sur de Paraná.
Bordet remarcó que “el acceso al agua potable es una de las políticas troncales del plan de obras de infraestructura para la provincia”, y valoró “el apoyo permanente del Presidente para con las provincias y con Entre Ríos en particular”.
Asimismo, resaltó que la construcción del acueducto para el gran Paraná “mejorará la calidad de vida de miles de entrerrianos, ya que asegurará el acceso al principal alimento que consume un ser humano, que es el agua potable”.
Estas obras alcanzan a Paraná y el área metropolitana, y tienen como objeto la provisión de agua potable a las localidades de Colonia Avellaneda, San Benito, Oro Verde, la conexión a Sauce Montrull y el abastecimiento a un futuro Centro Distribuidor en la zona Sur de Paraná con miras a mejorar el nivel de servicio.
Para ello, se prevé ampliar la capacidad de bombeo de la actual toma de agua cruda de Planta Echeverría, mediante la incorporación de bombas de mayor capacidad y caudal de bombeo. De esta manera, se busca garantizar el abastecimiento de agua cruda tanto de dicha planta como para la planta Ramírez. En ese marco, se incorporará en este último caso un acueducto nexo entre el muelle y la cañería existente de abastecimiento que tiene actualmente.
Además, se prevé ejecutar una tercera línea de impulsión de agua cruda desde dicha toma a la planta potabilizadora Echeverría en diámetro 750 mm, con una extensión del orden de los 1.100 metros; ampliar la producción de agua potable en + 6.000 m3/h con un módulo de similares características al de la planta existente e instalaciones asociadas de insumos químicos y la conexión a la actual reserva de 10.000 m3.
A esto, se sumará una nueva estación de bombeo exclusiva para impulsar el agua al nuevo sistema Metropolitano y, con la ejecución de un acueducto “Metropolitano” con derivaciones a las localidades mencionadas, 21 kilómetros de cañerías con diámetros de 700, 600, 500, 400, 300 y 200 mm transportarán los volúmenes de agua con un horizonte de diseño a 30 años (2049). Es decir, un recorrido del noreste de la ciudad hasta el sureste con un ramal importante hacia el este.
Se prevé también un sistema telegestionado de operación y control centralizado desde Planta Echeverría, y cisternas de almacenamiento en las localidades más un sistema de impulsión a redes de distribución, de manera de suplantar la actual fuente de suministro subterráneo por agua potabilizada del río Paraná.