Arribó al país el primer avión que compró Milei para vigilar el mar argentino y detectar submarinos
Dos días después de lo previsto, el primero de los cuatro P-3C Orion que se compraron para la Armada Argentina aterrizó este lunes a la tarde en la Base Aeronaval Almirante Zar, una de las principales del país y donde se concentran medios de exploración y vigilancia marítima. La aeronave arribó la pista militar chubutense alrededor de las 18.20.
Los Orion comprados por la administración de Javier Milei a Noruega pero de la estadounidense Lockheed, serán utilizados para la vigilancia marítima en la llamada Zona Económica Exclusiva (ZEE), donde actualmente Argentina no tiene equipo aéreo para control de sus fronteras. Llegarán en condiciones de detectar submarinos. Servirán también para la búsqueda y rescate, un servicio muy habitual en el Atlántico Sur, incluso a extranjeros.
Como el ministro Luis Petri evalúa viajar a Alemania en estos días para participar de otra reunión del Grupo de Contacto por Ucrania, no será hasta su regreso que se realice la ceremonia de recepción de la aeronave que será pintada con los colores argentinos. El acto será después del 10 de septiembre y estarán invitados, en principio, el jefe del Estado Mayor Conjunto, Xavier Isaac, el de la Armada, Carlos Allievi, entre otros. También autoridades noruegas y estadounidenses.
El total del contrato firmado por los cuatro aviones el 17 de octubre de 2023 por las autoridades anteriores era por algo más 60 millones de dólares por las cuatro aeronaves. Pero la primera cuota que se debió haber pagado el 17 noviembre de ese año, nunca se efectuó.
Tras una larga y compleja negociación entre Petri y su secretario de Relaciones Internacionales, Juan Battaleme, finalmente la gestión Milei acordó en Noruega el pago de la primera cuota el 2 de abril pasado, y antes de fin de año se abonarán otros U$S 36 millones del total.
El financiamiento saldrá como se estipuló inicialmente del llamado Fondo Nacional para las Defensa (Fondef). La primer aeronave arribó este lunes al país en un plan de llegada que se completará en 2025 -si se pagan las cuotas, claro- , con todos los sensores y equipos de comunicaciones que utilizaban cuando operaban en Noruega.
Aunque en su entrevista televisiva con LN+ el domingo a la noche, el presidente Milei calificó como histórico el equipamiento militar de la Argentina bajo su gestión, por ahora es un plan. Importante, pero un plan.
Este empezó con la compra de 25 aviones de combate F16 de los Estados Unidos a Dinamarca -el primero, que servirá para entrenamiento debería llegar recién a fin de año, la incorporación de los aviones P3 C Orion contribuye a recuperar una de las varias capacidades que la Armada.
Esta aduce equipamiento pendiente: al menos un submarino, ya que desde la tragedia del Ara San Juan en 2017 no cuenta con uno; buques multipropósito, fragatas y helicópteros livianos entre otros. Todas las fuerzas están iguales, sin contar la baja calidad de los salarios.
De la estadounidense Lockheed, esta aeronave hizo su primer vuelo en 1958 y es utilizada para patrulla marítima, guerra anticuperficia y antisubmarina.
De acuerdo a información suministrada el año pasado por el Ministerio de Defensa, una de las cuatro aeronaves adquiridas por Argentina a Norwegian Defense Materiel Agency (NDMA) pertenece a la versión P3-N (SAR y Sostén Logístico Móvil), mientras que las otras tres son la versión P3-C de exploración, “con un potencial de vuelo en promedio de 17.000 horas de vuelo”. Ello permitirá un uso de al menos menos 15 años, aseguraron.
Argentina ya tuvo unos P3 Orion, pero en su versión B, que ya no están en uso. Y tampoco se pudieron utilizar jamás los cinco Super Etendard Modernizé comprados a Francia en 2017 porque les falta un elemento de los asientos en los que Gran Bretaña debería dar su consentimiento.
Tiene un radio de acción de 1.500 millas náuticas (lo que equivale a 2.780 km), más una autonomía de 12 horas de vuelo, lo que le permite cubrir el litoral marítimo argentino, la plataforma continental y la Antártida Argentina, permitiendo la permanencia en una zona o área determinada por períodos prolongados.
Además la aeronave tiene capacidad para operar en todo tipo de clima y permite la operación desde cualquier base y aeropuerto del litoral marítimo. Ello facilita su presencia en una área determinada en un período de tiempo relativamente corto, fundamental para una búsqueda SAR, lo que se conoce como Search & Rescue, o Búsqueda y Rescate.
Cuenta con diferentes sensores de búsqueda, como radares y sistemas de cámaras, asociados a los correspondientes sistemas de comunicaciones permitiendo la recolección, procesamiento y transmisión de datos en tiempo real.