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Argentino U13: Buenos Aires, un indiscutible campeón

ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- La selección entrerriana de basquetbol U13 se consagró subcampeona nacional en el Campeonato Argentino que acaba de concluir en La Rioja. Provincia de Buenos Aires hizo prevalecer su funcionamiento de equipo y se impuso por 90 a 84. Otra vez el team FEBER fue exageradamente dependiente de su máxima figura: Hans Feder Ponce, quien completó planilla con 40 puntos y 14 rebotes en 29 minutos. Los porteños ocuparon el tercer escalón del podio tras una clara victoria por 90 a 54 ante los cordobeses.

 

Entre Ríos cerró un certamen argentino sin el título pero con la seguridad que dejó todo por lograrlo. Simplemente, su rival jugó un poquito mejor, pasándose con otra fluidez la bola entre todos sus componentes, exhibiendo una tenue diferencia a favor en cuanto a porcentuales.

 

Fue un partido durísimo en el cual hubo un valor EXCLUYENTE: Hans Feder Ponce, quien cumplió un papel EXTRAORDINARIO con 40 puntos en 29 minutos, con 17/28 de Dos (61 %) y 6/10 en Libres (60 %), más 14 rebotes y 5 pérdidas.

Pero como la palabra lo indica: EXCLUYENTE, nos remitimos al Talón de Aquiles del equipo. La NOTORIA dependencia de Entre Ríos en el pibe del Quique Club, que SIN DUDAS, tiene un POTENCIAL formidable.

 

Por su propio TALENTO, y por su ENORME actitud, indiscutiblemente se erigió en el CENTRO, en el PUNTO CENTRAL desde donde partieron todas las acciones del combinado FEBER. Y en cada uno de los juegos, basta repasar las estadísticas, Hans fue el estandarte ABSOLUTO.

 

Así lo pergeñó su técnico, y así lo compartieron sus compañeros. Hans Feder Ponce NO DECIDIÓ que todo pase por sus manos o que la mecánica del equipo dependiese tanto de él. No se lo puede culpar al chico de lo que OTRO pudo elaborar de manera diferente.

 

Y sin embargo, pese a ello que NO COMPARTIMOS, Entre Ríos cosechó nada menos que un SEGUNDO LUGAR y con una producción honrosa en el ÚNICO revés que sufrió a lo largo de 7 contiendas.

 

O sea… a los hechos me remito… Así son las cosas en el básquet de hoy. Con Hans sucede algo parecido en su equipo de Paraná, del cual es la bandera, goleador del certamen Asociativo y la Liguilla. Éste es el básquet de hoy para algunos entrenadores. El dogma es PRIMERO LOS RESULTADOS… EL ÉXITO.

 

Y si se debe sacrificar el futuro de otros chicos por obtener un rédito competitivo o por “FABRICAR NUEVOS CRACKS”, al parecer bien vale esa “ofrenda”. Claro que… otros técnicos no concuerdan con esa teoría.

 

Sin ir más lejos, el CAMPEÓN. Provincia de Buenos Aires tuvo como MVP a Nicolás Paternosto con 25 puntos, 11/15 (73 %) y 3/5 en Libres (60 %), pero otros compañeros tuvieron en lapsos decisivos enorme influencia, el caso de Joaquín Arraiz, 15 puntos, 7/10 (70 %) y 8 rebotes, Renzo Moretto, 13 puntos, 6/7 (86 %), Alex Adrián, 11 puntos, 5/7 (71 % de Dos) y 1/1 en Libres (100 %) más 4 rebotes,  o Agustín Salomón, con 7 puntos y 7 rebotes, siendo DETERMINANTE en la clausura.

Además, contribuyó a la causa bonaerense Juan González Iriarte (9 puntos y 5 rebotes).

 

Hans Feder Ponce también tuvo socios positivos, pero o de Dos o en Libres tuvieron promedios muy inferiores a los de su oponente.

Nahuel García, el virtuoso líder de Olimpia, brindó 14 puntos en 30 minutos con un destacadísimo 6/8 (75 % de Dos) y 4 rebotes, pero redondeó un 22 % en Libres (2/9).

Martín Otero, el pibe de La Unión, se anotó con 11 puntos en 24 minutos, aunque con un 45 % de Dos (5/11), muy similar a lo de Ezequiel Respaud, uno de los mejores guardias de la Liguilla y probable refuerzo de Quique en la Liga Nacional, quien brindó 10 puntos en 30 minutos, pero con un 5/14 de Dos, o sea un 36 %.

 

Son números irrefutables de un partido en el cual hubo un solo cuarto en el cual Provincia tomó claro margen a favor (26-15) para luego manejarlo en toda la contienda, y VAYA COINCIDENCIA, fue el chico en el cual Hans Feder Ponce, NO ESTUVO.

 

Por Twitter leí anoche que algunos colegas de Capital Federal ya lo mencionaban como una FUTURA ESTRELLA, sin conocer siquiera de dónde procede, qué competencia interna tiene, y más detalles que hacen a lo que se debe analizar reflexiva, meticulosamente para elaborar algún tipo de diagnóstico.

 

Y hete aquí la URGENCIA que tiene nuestro básquet en CREAR ÍDOLOS de la noche a la mañana. Ahí está el GRAVE DILEMA para los entrenadores de Formativas. No importa que enseñen a picar, a pasar, a lanzar, a correr, a comportarse, a ser buenos compañeros, a respetar, etc, etc… NO IMPORTA LA FORMACIÓN. Lo que sí importan son los RESULTADOS, los LAUROS, y la generación de CRACKS.

 

Y debería preocupar precisamente a esos periodistas de Capital Federal que son los ÚNICOS colegas en el país que VIVEN DEL BASQUET. A éstos comunicadores que EVIDENTEMENTE no tienen idea de lo que sucede con el baloncesto formativo en la Argentina, les avisamos que deberían dejar un rato la NBA y la selección, para seguir mas asiduamente a la Liga en TODAS sus categorías y comprobar que cada vez CUESTA MAS VER CLUBES CON BUENAS CANTERAS.

 

Y que sí SALEN por allí uno o dos chicos por provincia a la par que largan decenas aburridos, decepcionados, desencantados. O ni que hablar la cantidad de chicos grandotes que a diario se suman al vóley o hasta al fútbol donde sí se explota sus tallas no forzándoselos en el básquet a solo agarrar rebotes y pasarla, o a seguir “hasta el baño” al gigante del equipo contrario.

 

Y éste particular criterio que envolvió a la selección entrerriana ya desde la preselección en la que quedaron sin siquiera citar no menos de tres chicos muy altos que apreciáramos en la Liguilla “por estar verdes” (según lo que se dijo por allí) o se cortó a uno de los tres más lungos (por idéntica razón), llevando a solo dos “Torres” y una de ellas participando casi no más de un cuarto, o de los otros cinco jugadores con menos cantidad de minutos dos con promedio de 12 minutos por juego en Liguilla y Provincial se desempeñaron de “Internos”, mientras que, otros dos, con no más de 5 minutos por encuentro, y solo 3 partidos de presencia, habitualmente juegan de 2, 3 o 4 según cómo y/o cuando se los necesite en sus equipos asociativos.

 

Por consiguiente, paradójico TACTO hubo del entrenador en llevar solo dos jugadores de alta talla, y que haya llevado a La Rioja tantos elementos de similares características para que no tengan tanta intervención, como si el resultado, la performance, el puesto SEA CUESTIÓN DE ESTADO en una categoría donde debería PREVALECER el sentido de experimentación.

 

Es obvio, redundante, que deberíamos estar felices por el distinguido subcampeonato, Y LO ESTAMOS, solo que recorriendo las estadísticas finales del torneo, observamos que el campeón NO TUVO ningún jugador EMBLEMA sino que VARIOS se destacaron.

 

Repasemos… Los mejores de cada rubro fueron integrantes de los elencos del 2° al 6° puesto. A ver… detallemos… En Puntos, el máximo anotador fue Jonatan Basualdo, de Santa Fe, escoltado por el cordobés Máximo Tatanchelo y justamente Hans Feder Ponce (ER). ¿Saben en qué posición quedaron sus compañeros más incisivos?: Respaud 19°, Otero 25° y Catalín 27°.

 

¿Y Provincia?: tuvo a Nicolás Paternosto (15°), Joaquín Arraiz (16°), Juan González Iriarte (17°), los tres muy juntos y casi con idéntico promedio.

 

En Rebotes, el santafesino Jonatan Basualdo fue el máximo rebotero, seguido por Hans Feder Ponce y el porteño Axel Ferrer. Otro entrerriano en los puestos superiores fue Martín Otero (11°).

 

¿Y Provincia?: Joaquín Arraiz (6°) y Alex Adrian (10°).

 

En Asistencias, un rubro CLAVE, para un certamen donde no se vio GRANDES PASADORES, el mejor fue el misionero Nahuel Vogel, escoltado por el bonaerense CAMPEÓN Agustín Salomón y el cordobés Franco Baralle.

¿El mejor entrerriano?: Hans Feder Ponce (12°), quedando 25° Nahuel García.

¿Otros campeones bien ubicados en la estadística precitada?: Renzo Moretto (5°) y Juan González Iriarte (14°).

 

En Porcentaje de Dos, el más eficaz resultó el santafesino Franco Correa, acompañado por el cordobés Rodrigo Zallio y el bonaerense Alejo Orquin.

Hans Feder terminó 15°. ¿Otros entrerrianos?: Martín Otero (24°), y Nahuel García (32°).

¿Otros bonaerenses?: Nicolás Brugniere (6°), Alex Adrián (11°) y Renzo Moretto (16°).

 

Aunque volvamos a lo de los minutos en cancha… El campeón tuvo DIEZ jugadores con parecida cantidad de minutos, separándose el que más presencia logró Joaquín Arraiz -149 minutos- ante los 110 de Santiago Quinteros. Y solo DOS con inferior participación. O sea, REPETIMOS, DIEZ jugadores con más de 110 minutos. ¿Está claro? FUE UN EQUIPO.

 

Entre Ríos dividió sus minutos así: Hans Feder 191, Justo Catalín 188, Nahuel García 183, Ezequiel Respaud 176 y Martín Otero 163. En un segundo plano quedaron Cristian Genre Bert (107) y Fabián Tolosa (105).

En un tercer grupo se ubicaron: Bautista Dellazuana (95 minutos), Facundo García Lasco (88) y Matías Caire (84).

Finalmente, Agustín Cáceres jugó en 5 partidos con promedio de 5 minutos por encuentro, y el paranaense Adriel irigoitía solo entró en tres cotejos con promedio similar.

 

Conclusión… El básquet provincial debe saludar con HONORES a estos gurises que dejaron todo y casi logran la corona. Una performance digna de elogiar más allá de las discriminaciones estadísticas enunciadas. El subcampeonato ESTIMULA, MOTIVA, siempre y cuando se siga trabajando aunque PULIENDO los detalles descriptos a través de un CAMBIO DE MENTALIDAD.

 

Los doce chicos que viajaron a La Rioja merecen un INMENSO aplauso, pero desde la propia FEBER deberían analizar de aquí en más si solo se buscan RESULTADOS y CONQUISTAS, por sobre el FUTURO o trabajo a largo plazo.

En Entre Ríos, desde el cuerpo técnico, como lo anunciamos en la previa, hubo una apuesta al VIRTUOSISMO y a la EXPLOSIÓN, y evidentemente el TALENTO en lo singular, en lo individual, estuvo.

Cada uno de los pibes dieron su grano de arena, su cuota, su dosis de VIRTUD y despliegue psicofísico.

 

La incógnita que nos queda es cuán atrás se pudo haber quedado PROYECTANDO con dos o tres lungos más que sumen experiencia y se inyecten de autoestima o motivación extra para los años próximos.

El análisis que acá exponemos debería dar como resultante que el cuerpo técnico otorgó gran cantidad de minutos a quienes consideraba desde el vamos como irremplazables. Desde antes de definir en aquella última concentración de preseleccionados a los 12. Y, si bien faltó un INDISCUTIBLE valor como Nachito Guzmán, solo fallamos en nuestro pálpito con el protagonismo de alto vuelo que cobró Martín Otero. Sinceramente, creímos que Matute Caire iba a tener mayor competencia pues lo conocemos muy bien. De hecho, recordemos a quienes no leyeron y/o no sabían, que antes de conocerse la situación de salud del pibe de Paracao, Dellazuana y Otero se jugaban el puesto 12.

 

Por añadidura… Si 7 jugadores tuvieron TODA la confianza de su coach, hubo tres que globalizaron una reducida cantidad de tiempo y dos que prácticamente no fueron tenidos en cuenta, MÍNIMAMENTE, el entrenador PUDO HABER APOSTADO A LA ALTURA llevando dos “Torres” más pese a que “estaban muy Verdes”.

 

Pero bueno… Así fueron las cosas y en realidad, lo ocurrido en La Rioja es un fiel, cabal TESTIMONIO de cómo procede el 90 % de los técnicos en la Provincia de Entre Ríos, de Premini a U15 (Formativas). Primero los resultados, primero los logros, primero la generación de “cracks” y luego la formación integral de los gurises. Una pena, pero lamentablemente, no parece haber solución al respecto, lo vemos a diario en entrenamientos, lo vemos cada fin de semana en juegos.

 

Así que, más allá de la conducta de técnicos o dirigentes que permiten ello, FELICITACIONES CHICOS. Ustedes sí que se merecen un APLAUSO FANTASTICO. Ustedes y quienes se quedaron con las ganas de representar a la provincia y tranquilamente, por lo visto, pudieron estar.