Árbitro de básquet reaccionó contra un espectador en Villaguay
|Durante el juego entre Asociación Deportiva Estudiantil Villaguay y San José de Colón, por el Torneo Interasociativo en el cual participan representativos de las localidades precitadas, más San Salvador, San José y Tala, el juez Juan Maldonado cometió un exabrupto absolutamente innecesario, respondiendo a una presunta agresión verbal de un aficionado ubicado en una de las cabeceras del estadio.
En el video dado a conocer por colegas del Interior, el árbitro en cuestión, que es profesor de Educación Física, y uno de los máximos referentes del referato villaguayense, como ha sido avalado por la FeBER en calidad de capacitador en diferentes clínicas con el respaldo federativo, se acerca a dialogar con alguien del público y en pocos segundos le expresa algo y le aplica una especie de cachetada o leve puñetazo en el mentón, provocando el estupor del agredido y de parte de la concurrencia ubicada en ese sector.
Lamentablemente, no logramos recabar mayor data respecto a las derivaciones del preocupante suceso durante el mismo encuentro, aunque sí cabe resaltar que el jefe de la Departamental Villaguay de Policía, Crio., Daniel Fabián Randissi, que no hubo denuncia alguna ni existió intervención policial.
Reflexión
Hace cuánto que hablamos sobre la inconducta de los árbitros de nuestra provincia, esencialmente de los jueces que conducen partidos de la APB en todas sus categorías???
La respuesta es: el Archivo está a disposición… Son innumerables los artículos dedicados a propender a que en el seno del Colegio de Árbitros se rectifique la postura de estar permanentemente ubicando de dónde procede o proviene tal o cual grito ofensivo hacia la investidura de quienes administran justicia.
Es una nueva modalidad que nos encantaría saber quién la introdujo. Es una postura de permanente desafío, en vez de encargarse de concentrarse en el partido, y lo que es más, ser más celosos respecto al comportamiento inconveniente de chicos de U13 hasta U19, o ni hablar de todos los reproches airados que reciben de parte de los entrenadores.
Por ello hemos rotulado de increíble, cómo se manejan tantos técnicos del básquet APB que desde el salto despotrican con los árbitros, los insultan con notable elocuencia, y luego ponen cosas lindas en Facebook. Inaudito…
Sin embargo, los sopla-pitos están siempre listos, como boy scouts para mirar de reojo y a veces con posicionamientos desafiantes, al sector de espectadores desde donde surge un reclamo, quizás, lo admitimos, manifestado de manera ácida.
Los jueces deben estar preparados mentalmente para no equivocarse en sus fallos y penar lo ilícito. Sin ir más lejos… hay técnicos que, amén de estar demandando todo el match, cuando ataca el equipo rival se meten casi hasta mitad de cancha como procurando entorpecer las ofensivas, moviendo los brazos alocadamente, gritando… a ellos NO SE LES DICE NADA. Y son varios… Muy visiblemente identificados.
No está mal que PREVENGAN y sepan dialogar con dirigentes responsables para calmar a espectadores muy ofuscados, o está bárbaro que acepten dialogar con aficionados de modo constructivo. Lo que resulta ESPANTOSO es adoptar la postura de inspeccionar desde el primer minuto que papá, mamá, familiar “x”, o simpatizante que obló su entrada, y por ende LE PAGÓ POR SUS SERVICIOS, le enrostran algo en lo cual se concibe hubo una equivocación u omisión.
Ya basta de árbitros “patoteros”. Que se dediquen a mirar y a escuchar más lo que sucede dentro del rectángulo y se abstraigan de lo que sucede afuera, sin descuidar el aspecto PREVENTIVO.
¿Qué ocurrió con Maldonado? Solo hay suposiciones. No habló el agredido. No habló el agresor. No hubo siquiera exposición policial. Daría la sensación que solo fue tomado por ambas partes como una “calentura” del momento.
Seremos enfáticos… También coincidimos en la visión que cualquiera puede incurrir en un acto inconsciente. Somos seres humanos. Vivimos a lo largo del día un sinfín de coyunturas, y por ahí explotamos de manera impropia o incongruente.
Lo que pesa es el antecedente. Maldonado YA debería haber salido a la palestra y explicar lo acontecido.
No fue un feroz golpe que causó severo daño. Digamos que fue un “golpecito” como pretendiendo decir: “tranquilízate o te echo…”. Sí, fue una incongruencia. Real. Innegable. Maldonado debió dar el ejemplo. Pero no podemos destruir a alguien que, seguramente por su capacidad técnica y su calidad humana, ha demostrado condiciones para formar nuevos árbitros y capacitarlos o perfecionarlos.
Fue un error delicado, pero SALVABLE. Sería estupendo recibir en nuestra Redacción en las próximas horas un manifiesto de él. Como sería oportuno que algún dirigente de la FeBER emitiese una comunicación en la cual se exprese el pesar por el adverso episodio.
No hay nada por dramatizar. Sí por tratar, y actuar, A TIEMPO.