Aprueban el salvataje de Oil Combustibles, la empresa petrolera de Cristóbal López
|El juez en lo Comercial, Javier Cosentino responsable de llevar adelante el concurso preventivo de Oil Combustibles SA (OCSA), la principal empresa de Cristóbal López, abrió este miércoles el salvataje, proceso conocido como cramdown.
Ante la posibilidad de la quiebra del principal activo del Grupo Indalo, los administradores de Oil Combustibles SA ─Ignacio Rosner y Santiago Dellatorre─, presentaron hace una semana un pedido de apertura del salvataje, que implica un freno a que los acreedores se queden con una empresa que no puede pagar sus deudas.
Aunque esta figura no está contemplada para casos de supuesto fraude, los administradores solicitaron que el juez comercial lo habilite.
“La ausencia de presentación de tales conformidades no implica de manera indefectible e inmediata la quiebra para ciertos deudores concursados, sino el ingreso en el procedimiento de salvataje que tiene por objeto permitir la reorganización de la empresa sin liquidación manteniéndola en actividad en el mercado”, explicó el magistrado en su escrito de trece páginas.
En tal sentido, expuso que el salvataje “resulta de toda conveniencia en tanto se protegen las fuentes de trabajo, se continúa con la oferta de bienes y servicios atinentes al giro propio empresarial con todos los beneficios directos e indirectos que acarrea ello para la sociedad en general y para el Estado”.
Asimismo, Cosentino planteó que habilitar el cramdown resultará en “beneficio de los acreedores, quienes en mayor o menor medida suelen ver frustrado el cobro de sus créditos en la quiebra” y consideró que es “una aplicación más del principio de conservación de la empresa”.
Si bien aclaró que el salvataje es una norma de carácter imperativo para el Juez, éste “no puede apartarse de lo ordenado, y en todo caso la AFIP, que se ha expedido en torno a la necesidad de disponer la quiebra sin más, puede hacer efectiva su pretensión como acreedor postconcursal por la vía sumarísima” y pedir “la quiebra en el marco de la ley de concursos y quiebras, cauce legal adecuado a tales fines”.
El organismo recaudador, en su carácter de integrante del comité de acreedores, opinó “que debe velar por el interés general de la masa y ante la disyuntiva expuesta, no se advierte otra opción que la quiebra directa”.
Pero el juez Cosentino indicó que Oil Combustibles SA “se encuentra en condiciones de acceder al salvataje”. Y por ello, dispuso “la apertura de un registro en el expediente por siete días” para que, los interesados en la adquisición de las acciones que representan el capital social de la Oil, “se inscriban en los términos establecidos”.
De esta manera, “no se declarará la quiebra” sino que se procederá con el trámite legal aplicable que habilita el cramdown, entendiendo que Oil es una empresa de “importante magnitud, que se desempeña en el ámbito de una actividad sensible en términos de interés público como lo es la elaboración y comercialización de combustibles e hidrocarburos y derivados”.
Y por ello le extendió unos días más el plazo para que inversores aparezcan y conozcan en detalle a la empresa. Sin desconocer que Oil ya tiene una deuda post concursal de $ 1.540 millones y que el organismo recaudador “ha manifestado expresamente que no otorgará facilidades de pago especiales”. Cosentino planteó que aquellas deudas preoconcursales deberían cancelarse en un plan de 12 cuotas mensuales: el fisco le reclama a Oil $ 19.000 millones.
Con el salvataje en proceso, el magistrado ordenó extender la intervención de la empresa hasta que dicho procedimiento finalice. La empresa deberá presentar un detallado plan de gestión del negocio y un informe sobre la compañía.