Apertura de AFA: Racing manda
Racing venció 2-1 a Boca en la Bombonera por segunda vez consecutiva, se llevó el primer clásico del torneo Apertura, sumó su segundo triunfo en el certamen y lidera con puntaje perfecto. Encima, golpeó la ilusión de uno de los grandes candidatos al título. Ganó porque tuvo reacción y fue inteligente para aprovechar al máximo las flaquezas de su adversario.
San Lorenzo desnudó todas sus limitaciones y debió sufrir demasiado para llevarse un punto ante Godoy Cruz en el Nuevo Gasómetro. El conjunto dirigido por Ramón Díaz exhibió carencias múltiples pero apeló a su corazón para empatar 2-2 con el Tomba, en un duelo correspondiente a la segunda fecha del Torneo Apertura 2010. Pese a la distancia entre el nivel de uno y otro, ambos protagonistas suman dos empates en igual cantidad de presentaciones.
Lanús y Newell´s empataron 1-1 en el Sur, en medio de un partido de escaso nivel técnico y de pocas emociones, y ambos quedaron en deuda en la segunda fecha del Torneo Apertura.
Arsenal se recuperó de la derrota en el debut ante Lanús y venció por 2-1 a Tigre en Victoria, en uno de los duelos válidos por la segunda fecha del Torneo Apertura 2010. Luciano Leguizamón fue la gran figura del parejo encuentro al marcar los dos tantos del elenco de Gustavo Alfaro. Por su parte, al Matador no le alcanzaron sus ganas para eludir la segunda derrota al hilo.
¿Plata tirada?
En La Boca no hubo silbidos ni insultos ensordecedores, pero las caripelas de los hinchas quedaron bastante expuestas, y los gestos no eran felices, obviamente.
El equipo que dirige Borghi arrancó mejor que el conjunto conducido por Russo porque controló la pelota y trató de ser prolijo para llegar al arco rival. En los primeros minutos, los mediocampistas locales hicieron un gran trabajo en recuperación, distribución y proyección. Y el Xeneize no tardó en abrir el marcador: a los nueve, luego de un desborde por derecha de Méndez que Palermo no pudo impactar, Viatri aprovechó un centro de Clemente Rodríguez desde la izquierda y metió un lindo cabezazo.
El dominio de Boca se fue diluyendo y cerca de los 20 minutos de la primera parte creció el protagonismo de la Academia, que levantó por sus hombres del medio. Cuando a los dos les costaba tener precisión con el balón y generar situaciones de riesgo, llegó el empate. Un tiro libre desde la derecha cayó en el área, Bieler tocó en el camino la pelota, ésta dio en el palo derecho y Yacob, en posición adelantada, la empujó con el pecho.
En el segundo tiempo, el Xeneize entró dormido y Racing no lo perdonó. A los cuatro minutos, Clemente Rodríguez se enredó con la pelota en el área cuando pretendía alejar el peligro y se la dejó servida a Cáceres, quien sacó un tremendo zurdazo que pegó en el travesaño y se metió. De inmediato, Borghi mandó a la cancha a Cañete e hizo salir a Méndez.
El segundo gol fue un golpe que Boca no supo digerir. No tuvo capacidad de reacción. No logró generar ni una sola situación para igualar. Le faltó fútbol, pero también le faltó amor propio para ir en búsqueda del empate. El Bichi puso a Mouche por Escudero y el punta metió algunos desbordes por izquierda, pero careció de fineza en los centros.
Racing fue muy inteligente: se plantó bien de mitad de cancha para atrás, salió rápido y contó con espacios para manejar el balón. Igual, en pocas oportunidades fue profundo y recién pudo haber liquidado el pleito a nueve minutos del final, cuando Castromán desperdició un mano a mano. Así y todo terminó sin pasar sobresaltos y se llevó tres puntos de oro.
San Lorenzo rescató un punto con gusto dulce ante Godoy Cruz
El Ciclón compensó sus graves carencias con entrega y empató 2-2 ante el Tomba en el Nuevo Gasómetro. Tula (PT 18m) abrió la cuenta para el equipo de Ramón Díaz, pero Ramírez (PT 41m y ST 37s) dio vuelta el marcador de manera merecida. Sin embargo, Rivero (ST 32m) puso el empate definitivo tras un error del arquero Ibáñez.
El Tomba arribó al Nuevo Gasómetro envuelto en confianza y con el antecedente de haber ganado en sus últimas dos visitas al Bajo Flores. El dinámico equipo que diagramó Omar Asad le plantó dura lucha al local en el arranque y demostró que tenía más aceitado el 3-4-1-2. San Lorenzo no la pasó nada bien y a los 16 tuvo su primer tirón de orejas: David Ramírez le ganó la espalda al doble cinco y tocó para Rodrigo Salinas, que sacó un peligroso remate cruzado.
Pero el rumbo del Ciclón cambió a los 18, cuando Cristian Tula abrió el marcador con un cabezazo furibundo que dejó sin respuesta a Nelson Ibáñez. El gol tuvo un efecto directo en cada protagonista. Por un lado, San Lorenzo se ordenó mejor, controló las bandas con José San Román y Diego Placente, y halló vuelo de la mano del pequeño Sebastián González. En cambio, Godoy Cruz mutó en un manojo de nervios, se llenó de imprecisiones y caminó por la cornisa.
El gran pecado del elenco de Ramón Díaz fue no haber podido dar el golpe de nocaut. Tuvo la chance el juvenil González en dos oportunidades, pero le faltó la efectividad de un goleador. Y a los 41 resucitó el visitante mediante una combinación genial de su tridente ofensivo. Salinas arrastró marcas y cedió la pelota para César Carranza, que abrió para la izquierda hacia el Mago Ramírez y éste definió con la zurda ante la salida de Damián Albil.
Luego del mazazo sufrido en el final del primer periodo, San Lorenzo recibió otra trompada a los 35 segundos del complemento. Carranza la robó en el mediocampo y volvió a encontrar a Ramírez por izquierda. El ex Ferro y Olimpo, la gran figura del partido, volvió a cruzársela al arquero y puso el 2-1. El visitante justificó su ventaja con un gran trabajo de Nicolás Olmedo en el mediocampo y San Lorenzo quedó al borde de la cornisa.
La línea defensiva del Ciclón tambaleó ante cada incursión ofensiva del tándem Carranza-Ramírez y la gente empezaba a alarmarse en las tribunas. En la desesperación reinante, Ramón confió en Diego Rivero y en el uruguayo Sebastián Balsas para hacer reaccionar a su equipo. Pero lo único que generó fue un concierto de centros sin destino. El camino hacia la derrota era ineludible, aunque el curso del encuentro volvió a cambiar a los 32. Rivero amagó con mandar un centro pero probó al arco y confundió a Ibáñez, que no pudo controlar la pelota. Pura euforia y desahogo azulgrana.
El aliento del público del Ciclón empujó a su equipo hacia la épica victoria. Pero no hubo resto para consumar dicha hazaña. Quedó claro que a este San Lorenzo le sobran las carencias y aún no puede sacarle jugo al nuevo esquema. Por su parte, Godoy Cruz dejó el Bajo Flores con un gusto amargo porque estuvo a punto de saborear su tercer triunfo consecutivo en el Pedro Bidegain.
Lanús y Newell´s hicieron tablas en el Sur
El Granate y la Lepra no jugaron bien y empataron 1-1, con goles de Salcedo (PT 14m) y Sperdutti (PT 39m). Fueron expulsados Aguirre y el propio Sperdutti.
El local comenzó mejor plantado en los primeros minutos y rápido consiguió la ventaja. Pizarro tocó para Lugo, quien con un preciso centro le puso le pelota en la cabeza a Santiago Salcedo, para que el paraguayo fuera el verdugo de su primer equipo en la Argentina. Había pasado poco, pero el resultado no parecía injusto porque Newell´s no hacía pie atrás y el Grana lastimaba con la movilidad de Regueiro y el buen pie de sus mediocampistas.
El equipo de Sensini, con Formica en bajo nivel, apostaba a algún centro para Taborda y cuando todo indicaba quese iría en desventaja al entretiempo, la taba se dio vuelta en un puñado de minutos. A los 39, Mauricio Sperdutti empató el juego con un hermoso tiro libre al ángulo derecho de Marchesín y justo antes del descanso Aguirre se fue expulsado por una dura infracción contra Velázquez. Newell´s pasaba de perdedor a hacer tablas, pero ahora con un hombre más en el campo.
En el complemento, el visitante arrancó mejor, pero rápidamente una mala decisión arbitral lo dejó con diez jugadores. Loustau le sacó la segunda amarilla a Sperdutti porque entendió que realizó una reiteración de faltas y privó a los rosarinos de su mejor exponente.
Sin embargo, aunque sin mucha claridad, la Lepra estuvo más cerca del segundo, pero Erramuspe tuvo un cierre providencial que evitó la conquista de Taborda y en la jugada siguiente Schiavi no pudo cabecear bien desde una posición favorable.
Lanús tardó encender motores, pero lo hizo cuando ingresó Sebastián Blanco, a falta de 20 minutos. Con él todo en el Sur tiene otro color y en dos o tres intervenciones la gente Granate volvió a tomar conciencia de todo lo que pierde cuando no lo tiene en cancha.
Sobre el final pudo ser para cualquiera de los dos y no fue para ninguno. Marchesín tuvo dos atajadas brillantes –ante Alayes y Vella- y Castillejos se perdió un gol imposible abajo del arco, que a fin de año, sin dudas, ocupará un lugar en los especiales que prepara el canal.
Arsenal venció a Tigre con un Leguizamón endiablado
El equipo de Alfaro derrotó por 2-1 al Matador, en Victoria, con dos tantos del delantero entrerriano (PT 11m y 15m). En tanto, Denis Stracqualursi descontó para el anfitrión. En un duelo equilibrado, los de Sarandí aprovecharon las desatenciones defensivas de su rival y cosecharon su primer triunfo.
Ricardo Caruso Lombardi, entrenador de Tigre, optó por guardar el 4-4-2 empleado ante River y apostó por el ingreso del enganche Diego Morales para mejorar la producción de juego. Por su parte, el Arse sí conservó su esquema basado en el orden y en la firmeza defensiva a pesar de la caída en la presentación. Pero todas las cuestiones vinculadas a la táctica quedaron relativizadas ante la notable tarea de Leguizamón.
El encuentro estaba parejo y ambos protagonistas se peleaban para llevarse el premio al peor manejo de pelota. Hasta que a los 11 minutos, el ex delantero de Gimnasia rompió la modorra: aprovechó un mal despeje defensivo de Tigre y puso el primero con un derechazo cruzado. Y a los 15, el mismo Leguizamón le ganó a Mariano Echeverría en un contragolpe y, luego de engañar a Daniel Islas con dos amagos, la picó a un costado para poner el segundo.
La ventaja le dio mucha comodidad al Arse para hacer lo que mejor sabe: regalar la iniciativa con el fin de lastimar en cada réplica. El doble cinco integrado por Jorge Ortiz y Cristian Leiva anuló por completo a Morales y ensució cada avance del Matador, que apenas pudo inquietar con dos remates ocasionales de Pablo Caballero. Tampoco lograron ser alternativas potables los volantes externos, Martín Galmarini y Ramiro Leone.
El prólogo del complemento tuvo varias emociones. A los 3, Leguizamón maniobró ante la pasividad de Echeverría y le sirvió el gol a Mauro Obolo, pero el remate del ex Vélez terminó muy arriba del travesaño. Tigre respondió con un disparo del lateral Gastón Díaz, luego de un buen desborde de Morales por derecha. Y a los 20, nuevamente Obolo derrochó un preciso centro de Leguizamón y estiró la agonía del anfitrión.
A pesar de los escasos méritos realizados, Tigre encontró el descuento con el que tanto soñaba a los 25. Llegó un centro desde la derecha de Fernando Telechea, Leone metió la pelota en el corazón del área chica y Denis Stracqualursi apareció solo para gritar su primer tanto con la casaca del Matador. El equipo de Caruso Lombardi sintió ese gol como un fuerte respaldo y fue a la carga con más ganas que ideas, pero no pudo encontrar un empate que hubiera sido más justo.