Apertura de AFA: Gloria a Dios en las alturas y a Martín en La Boca
|Boca volvió a ganar y lo hizo nuevamente de la mano de su eterno goleador Martín Palermo, quien clavó tres tantos en el 3-1 sobre Colón. Newell’s se impuso a River en el Coloso por 1-0 con gol del paranaense Iván Borghello. Banfield vapuleó por 4-0 a Independiente y se ubicó a dos unidades del único líder. All Boys dejó sin invicto al exitoso Estudiantes de La Plata al vencerlo por 2-1 y lo bajó de la punta.
El elenco conducido por Borghi se adueñó del protagonismo desde el inicio del partido, con un Viatri muy metido y participativo, con un Chávez inquieto y desequilibrante en el mano a mano, un Clemente Rodríguez rápido y punzante y un Battaglia firme en el medio. Ya a los 3 minutos, el Pochi la puso en el punto del penal y el 9 bis avisó con un derechazo que pasó muy cerca.
El dueño de casa no se quedó sólo en manejar la pelota, sino que generó chances claras por abajo, algo que había logrado ante Olimpo. A los 7, Chávez llegó exigido y perdió en el mano a mano con un Pozo que atoró muy rápido y a los 22, el mismo mediocampista se la tiró larga a Clemente, quien había quedado de punta, el carrilero la picó y el balón besó el poste izquierdo.
Boca manejaba el partido y Colón no podía hacer más de tres pases seguidos. Caruzzo también lo tuvo de cabeza a los 27, pero Pozo volvió a salvar a su equipo. Sin embargo, a los 41, Medel cerró hacia adentro, Moreno y Fabianesi le dio de punta y venció la estirada de Lucchetti. En la única que tuvo, el Sabalero golpeó y se colocó 1-0.
Pero cuando parecía que la frustración se había apoderado del elenco local y que se iba injustamente en desventaja al entretiempo, Caruzzo apareció sólo en la medialuna y habilitó muy bien a Palermo, quien esperó la salida del arquero y la picó con mucha categoría. El eterno goleador se encargó de poner las cosas en su lugar.
El Xeneize mantuvo la misma intensidad en el arranque del complemento y a los 4 volvió a golpear con el máximo artillero de la historia del club. Clemente tiró un excelente centro al segundo palo, el Titán la mató con el pecho y decretó el 2-1 con un firme derechazo. Colón se adelantó algunos metros con el resultado en contra, pero no complicó.
Boca perdió algo de frescura con el correr de los minutos, pero siguió siendo superior ante un rival sin ideas y demasiado preocupado por defender. A los 14, Chávez forzó una buena respuesta de Marcos Díaz, quien reemplazó al lesionado Pozo, y a los 24, Viatri fue derribado en el área por el arquero y Luis Álvarez cobró penal. Palermo se hizo cargo y la colgó en la popular.
El equipo santafesino terminó por entregarse a los 29, cuando Quiroga fue expulsado por doble amonestación tras una tonta infracción sobre Clemente. Boca, con Méndez, manejó sin inconvenientes la pelota y por momentos bailó a su rival. A los 37, Battaglia, de muy buen partido, probó desde afuera y encontró las manos de Díaz.
Faltaba la frutilla del postre y liquidar el partido. Y a los 39, tras un mano a mano que Viatri no pudo capitalizar, Clemente, otro que cumplió, la puso en el segundo palo, Lucas la bajó al medio y Palermo sentenció el resultado. De esta manera, el dueño de casa consiguió su segunda victoria consecutiva y se ubicó a cinco unidades del líder, San Lorenzo.
Newell´s tumbó a River con gol del “Memo” Borghello
Newell´s consiguió un importante triunfo en Rosario por 1-0 sobre River, que evitó que el conjunto Millonario permaneciera en la cima del Torneo Apertura y le sirvió, además, para acercarse a la lucha y consolidar su buen momento ante su gente.
Poco le bastó al conjunto de Roberto Sensini en fútbol e ideas para alcanzar la ventaja. Porque fueron los de Núñez, con tozudez y topándose con la línea de fondo local y Sebastián Peratta una y otra vez, los que más peligro generaron, de la mano de Erik Lamela y pinceladas de Ariel Ortega. Y Rogelio Funes Mori fue el primero en avisar con un cabezazo desviado.
Pero a los 10 minutos, la primera aproximación seria rosarina desembocó en la apertura del marcador. Mauricio Sperdutti se escapó en velocidad por izquierda, mandó el centro y se elevó Iván Borghello para cabecear a la izquierda de Juan Pablo Carrizo. Enseguida, Funes Mori le dio serio trabajo a Peratta, pero luego el encuentro se trenzó entre las imprecisiones del mediocampo y el juego se hizo difuso.
Ya cerca del entretiempo, cuando su empuje no era suficiente para generar demasiada zozobra en el arco local, River desperdició otra chance con un disparo alto de Josepmir Ballón. Y no hubo lugar para más acciones antes del descanso.
El complemento arrancó tibio, con un Newell´s consciente de que las urgencias estaban del otro lado y al acecho ante un River que paulatinamente fue pensando más en la ofensiva con los ingresos de Mariano Pavone, quien se convirtió en un problema para el local, y Diego Buonanotte.
Sperdutti y Mauro Formica desperdiciaron sendos disparos y, en la más clara para la visita, Pavone exigió a Peratta y en el rebote Alexis Ferrero remató alto. Después, Carrizo se lució ante Sperdutti y otra vez Formica desperdició un tiro cruzado y sin puntería. Pero ni la necesidad del Millonario en los tramos finales, sumada al retroceso marcado de la Lepra, generó algo más que minutos de suspenso. A River siempre le costó entrar y quedó muy lejos del empate.
Así, el ocaso de la fecha se avecinaba con otro líder tumbado. Lo agredece San Lorenzo, que con este resultado supo que, al menos en esta jornada, ya nadie podrá alcanzarlo.
Banfield aplastó a Independiente y también se prendió
El sólido e implacable Banfield de los últimos torneos se aprovechó de este pobre e inexpresivo Independiente y con un inapelable 4-0 en su casa se prendió en la lucha por el campeonato. Mientras que el Taladro se ubicó a sólo dos unidades del único líder, San Lorenzo, el Rojo sufrió muchísimo y su entrenador, Garnero, quedó al borde del abismo.
El elenco conducido por Falcioni goleó muy rápido a un equipo que llegaba herido y a partir de allí se refugió y aprovechó cada salida para generar peligro. A los 3, Erviti tiró un centro muy largo al segundo palo y Zelaya cabeceó al gol entre los centrales de la visita -Ramírez la empujó sobre la línea, pero Maglio se lo dio al ex Rosario Central-. Fue el primer cachetazo.
El Rojo trató de responder inmediatamente con el control de la pelota, pero a Gracián se le hizo muy difícil quedar de frente a las jugadas debido a la férrea marca de Rosada, Patito Rodríguez pasó inadvertido, Velázquez y Mareque estuvieron bien controlados y Fredes tampoco pudo por la derecha. Vallés, quien reemplazó al lesionado Velázquez, tampoco fue solución por ese costado.
El Taladro se replegó, formó sus dos líneas de cuatro sin ruborizarse, la reboleó y cuando tuvo la ocasión, trató de llegar con peligro. A los 13, Ramírez probó de afuera y su disparo pasó muy cerca. Y siete más tarde, Zelaya reventó el travesaño con un tremendo zurdazo y Chirola Romero, quien había sustituido a Carrusca, definió frente a Gabbarini.
Independiente volvió a intentar por abajo, pero chocó una y otra vez. No encontró juego por el centro ni por los costados, y no pudo aprovechar la única que tuvo: Silvera la bajó en el área y Rodríguez, en su única participación, la tiró por arriba del travesaño. Con el pitazo de Maglio llegaron los silbidos para la visita. El local lo dominó sin inconvenientes.
El partido parecía definido, pero en realidad quedó sentenciado en el comienzo del complemento: a los 5, Zelaya mató un centro con mucha calidad, la punteó ante la salida de Gabbarini, la pelota dio en el palo y le quedó a Ramírez, quien decretó el 3-0 sin oposición. Para colmo, un minuto más tarde, Vallés se fue expulsado por doble amonestación.
Ya con Martínez por Gracián y Mareque en la conducción, el Rojo volvió a buscar, aunque con puro amor propio, el poco que le quedaba en pie. Silvera probó desde muy lejos a los 17 y Bologna, en una de sus pocas intervenciones, la sacó al córner. Además, a los 32, el Cuqui no logró conectar de cabeza un buen centro desde la derecha.
Banfield tenía muchos espacios para concretar la goleada, aunque parecía que le quería perdonar la vida a un Independiente sin alma, sin ideas, sin fútbol, sin nada. Y ante las facilidades que brindaba la visita, llegó el cuarto: a los 37, Zelaya recibió dentro del área un bochazo muy largo, dejó pasar a los defensores y definió con muchísima tranquilidad. Fue 4-0 para el Taladro, que le hizo precio al Rojo.
All Boys logró un gran triunfo ante el “Pincha” y lo bajó de la punta
Con goles de Eduardo Domínguez y Sebastián Grazzini, el “Albo” se impuso a Estudiantes por 2 a 1, y sumó tres puntos importantísimos en su lucha por la permanencia. Braña había conseguido la igualdad transitoria
Tan austero como laborioso, All Boys dejó sin invicto al exitoso Estudiantes de La Plata al vencerlo por 2-1 y lo bajó de la punta . El público “albo”, que con la contribución “pincha” en las tribunas prácticamente llenó el pequeño estadio de Floresta, festejó como un título esta victoria que, además, lo alejó de la zona de promoción.
Eduardo Domínguez abrió el marcador a los 28 minutos del primer tiempo, igualó Rodrigo Braña, en el minuto adicionado de la etapa inicial, y Sebastián Grazzini, la figura del partido, concretó la victoria a los 4 del segundo picándole la pelota al arquero Agustín Orión.
Fue un primer tiempo desprolijo y trabado, con mucha marca, que se mantendría con el correr de los minutos, sobre todo por el andamiaje colectivo en la defensa de All Boys que terminó con seis amonestados.
Estudiantes lo tuvo a los 5 cuando Auzqui intentó picársela sobre Cambiasso pero el arquero se quedó con la pelota. Parejo estaba cuando un corner ejecutado por Grazzini desde la izquierda, fue cabeceada al medio por Carlos Sánchez y estirándose, Domínguez, empujó con la punta del pie izquierdo.
Estudiantes buscó, pero All Boys se abroqueló y salió de contra y lo tuvo Grazzini picándola pero se fue por arriba del travesaño. El ex Racing solo debía esperar para tener una nueva chance.
All Boys se iba al descanso con la victoria parcial pero al minuto adicionado, Mercado escapó por la banda derecha, tiró un centro y Braña, a la carrera, cabeceó desde la puerta del área chica, colocando el empate.
Estudiantes en el segundo salió a ganar el partido y antes del minuto lo tuvo Pereyra a partir de una gran maniobra individual aunque se le fue larga en la definición y tampoco pudo Braña, cuyo pelotazo dio de lleno en la cara del guardavallas. A los 4 Marcos Rojo se equivocó en la salida y se la sirvió a Grazzini que encaró libre hacia el arco y esta vez sí la picó perfecta ante la salida de Orión, marcado el segundo.
Para colmo Juan Sebastián Verón se retiró lesionado, y por más el técnico Alejandro Sabella metió a la “Gata” Fernández por Mercado, All Boys se unió para defender y allí estuvieron los once para formar una barrera casi infranqueable, al punto que Estudiantes solo pudo llegar dos veces por intermedio de disparos de Desábato. Y al final hubo festejo de los grandes en la pequeña casa del humilde All Boys.