Apertura de AFA: Affranchino salvó a River
|River derrotó por 1 a 0 a Huracán con gol del paranaense Facundo Affranchino. Ariel Ortega fue expulsado por un codazo. Vélez venció por 2 a 1 a All Boys. Estudiantes superó a Quilmes por 2-0. Olimpo le ganó a Gimnasia por 1-0, en el partido que cerró la jornada de domingo por la 2ª fecha del Torneo Apertura.
Otro 1-0, aunque con sensaciones diferentes. River jugó 45 minutos muy buenos, en los que dominó a gusto a Huracán e hizo méritos para sumar los tres puntos. En el segundo, perdió la pelota y sufrió porque el local empujó con actitud. Otro triunfo y más alivio. El punto negro fue la expulsión de Ariel Ortega.
El débil derechazo de Zárate al minuto de juego, que a Carrizo se le escabulló por debajo de su cuerpo y se perdió cerca del palo derecho fue apenas un espejismo para la gente del Globo y sólo un susto para los Millonarios. A partir de los 120 segundos, todo fue de la visita, que se mostró precisa con la pelota al piso y picante de tres cuartos hacia arriba.
El elenco conducido por Cappa entendió rápidamente el partido, luego de tirar algunos pelotazos largos sin destino: presionó en el medio, tocó de primera, complicó con los cambios de frente y, sobre todo, aprovechó el sector derecho, donde el debutante Hereñú y Nieto demostraron toda su inexperiencia. Ferrari, Funes Mori y Buonanotte, al que todavía le falta mucho para volver a su mejor nivel, fueron una pesadilla.
A los 11 llegó el gol, justamente con una maniobra por ese costado. El Enano la tiró larga, el Mellizo tiró una excelente bicicleta, se fue por adentro y la puso atrás para la llegada de Affranchino, quien la empujó para el 1-0. Tres más tarde, Funes la bajó, Pereyra se sacó dos hombre y le reventó las manos a Monzón, quien achicó muy bien.
Fue todo de River en ese primer tiempo, que volvió a tener a sus ídolos en un muy buen nivel. Almeyda se multiplicó en la marca, estuvo siempre bien parado, recuperó pelotas clave y hasta fue salida clara por abajo. Ortega no se quedó sólo en pinceladas, sino que se asoció en el medio, habilitó y tuvo mucha movilidad. A los 23, tras un pase el Burro entre dos defensores, Ferrero la puso adentro y Affranchino se lo perdió abajo del arco.
Rivoira notó que el equipo estaba perdido y no tardo en hacer el primer cambio: a los 32 puso a Mariano Martínez y sacó al pibe Nieto. El local mejoró un poco y se acercó al arco rival con un tiro libre de Zárate, aunque siguió siendo inferior en todos los sectores. Matute Morales apareció muy poco, mientras que Montiglio fue bien controlado por Arano.
El técnico de Huracán terminó de emparchar el sector izquierdo en el inicio del complemento: lo mandó a Machín sobre ese sector y este cumplió con marcha y despliegue. Ya a los 4, Montiglio avisó con un derechazo a las manos de un seguro Carrizo. Y a los 18, Zárate probó nuevamente y el uno volvió controlar sin demasiados problemas.
El Globo mejoró, pero careció de explosión en los metros decisivos. River se quedó sin juego asociado, no pudo volver a adueñarse de la pelota y perdió la mitad de la cancha. Por eso, no generó ninguna chance de riesgo en el segundo periodo. Comenzó a depender exclusivamente de alguna maniobra personal y allí perdió. Buonanotte dejó en claro que le falta velocidad, Ortega ya no tuvo socios y Funes Mori no fue asistido como al principio.
El Millonario paso de dominador a dominado, aunque claro que no sufrió demasiado porque se defendió bien y porque su rival jamás encontró la fórmula para llegar con riesgo. Para colmo, a los 26, Ortega se fue expulsado directamente por un codazo. Cappa mandó a la cancha a Rojas y Ballón -también entró Caruso-, pero la pelota siguió siendo del dueño de casa.
Huracán dejó todo, presionó y mostró otra actitud, pero Ferrero, Maidana y Almeyda sacaron absolutamente todo. La más clara la tuvo Orlando, quien le pegó muy mal tras una muy mala salida de Carrizo. En definitiva, River aguantó tras un primer tiempo muy bueno y cosechó otro triunfo por la mínima.
Vélez volvió a demostrar su jerarquía y venció a All Boys
El Fortín redondeó otro muy buen partido, brilló en varios pasajes y superó por 2-1 al equipo de Floresta, que disfrutó de su estadio y hasta se ilusionó con el empate. Moralez, de tiro libre, y Martínez hicieron los goles de la visita, mientras que Sánchez descontó para el local.
El conjunto local tomó el control de la pelota en los minutos iniciales y complicó a un rival que comenzó dormido e impreciso en la mitad de la cancha. La movilidad de Pérez García y Grazzini colocaron al elenco de Floresta al borde del área visitante. A los 8, el primero habilitó a Juan Rodríguez y este le dio por arriba del travesaño. Y a los 13, el ex Racing la puso en el punto del penal y García, pese a su corta estatura, cabeceó muy cerca.
El equipo de Gareca se fue acomodando con el correr de los minutos y tanto Somoza como Zapata empezaron a tomar el control. Vélez decidió volcar el juego por la izquierda y por allí generó mucho peligro. A los 18, Silva quedó mano a mano con Cambiasso y el uno respondió muy bien con sus piernas. Y a los 36, Moralez aprovechó un tiro libre en el borde del área y dejó clavado al arquero local para el 1-0.
Vélez demostró en pocas jugadas toda su potencia ofensiva y su desequilibrio individual. El gol fue un baldazo de agua fría para el Albo. Para colmo, a los 44, Moralez recibió sobre la izquierda, encaró y habilitó a Juan Manuel Martínez, quien definió de zurda ante Cambiasso para el 2-0. Calidad individual, potencia y efectividad. Sobre el cierre, All Boys tuvo el descuento, pero Montoya le sacó una bola bárbara a Rodríguez.
El segundo periodo arrancó con un centro de Ereros y un cabezazo de Matos que se fue muy cerca, pero fue sólo una llegada para All Boys dentro del dominio de Vélez, que por momentos brilló y calzarse la pilcha de candidato al título. A los 11, Moralez metió otro exquisito pase y Martínez le acertó al poste izquierdo de Cambiasso. Y en la siguiente, Silva quedó mano a mano, tras una asistencia de Zapata, y la tiró muy lejos.
El dueño de casa metió mucha gente en ataque, pero la muralla de Vélez se hizo fuerte y no sufrió hasta el descuento. Y de contra contó con varias chances que no pudo aprovechar: a los 18, Silva la picó y el balón se fue por arriba y a los 29, el uruguayo la empaló desde la medialuna y el balón se estrelló contra el travesaño.
Parecía definido, porque el Fortín era más, tocaba por abajo, despertaba el ole de sus hinchas y disfrutaba de la magia de Moralez. Sin embargo, Montoya salió mal en un tiro libre, Matos la puso adentro sin mirar y el ingresado Fernando Sánchez puso el 1-2. Pero sobre el final, el arquero se reivindicó ante un derechazo del mismo mediocampista y salvó a su equipo.
Estudiantes mantuvo el puntaje ideal con una victoria trabajosa
El Pincha superó como local a Quilmes por 2-0, en el estadio del Cervecero, y es uno de los líderes del campeonato. Los goles llegaron en el cierre y los hicieron Braña (ST 36m) y el debutante Rodrigo López (ST 47m), de penal. La gran figura fue Trípodi, el arquero del equipo de Tocalli.
El equipo que dirige Alejandro Sabella encontró sus mayores inconvenientes en Emanuel Trípodi, la gran figura del encuentro, quien tuvo una tarea sensacional. El arquero del conjunto de Hugo Tocalli se interpuso a cada intento y recién fue abatido cuando parecía que iba a ser empate.
El guardameta le detuvo un remate certero en el arranque a Gastón Fernández y un rato más tarde le volvió a negar el grito a la Gata. También le ahogó el festejo a Leandro Benítez y vio como Juan Sebastián Verón y Leandro González estuvieron cerca con remates de media distancia.
En el complemento, Estudiantes no mostró una superioridad tan clara como en la etapa inicial. El Pincha tuvo muchos problemas en la creación de juego y pudo volver a ser protagonismo con el ingreso de Hernán Rodrigo López, quien debutó en su nuevo club y fue clave para su equipo.
El delantero lo tuvo con un cabezazo que volvió a hacer lucir a Trípodi y luego encabezó la contra que a los 36 minutos terminó con el gol de Rodrigo Braña, ex Quilmes (no lo festejó). El uruguayo pudo haber definido, pero vio mejor ubicado al Chapu y se la cedió para que sólo tuviera que tocarla.
La única clara para el Cervecero fue de Juan Morales, cuando las cosas todavía estaban en cero, en un mano a mano en el que incluso supo eludir a Agustín Orión y demoró demasiado. Sobre el final casi lo empata el ingresado Bernardo Romeo, con un frentazo a las manos del arquero.
En la última jugada del partido, Federico Beligoy sancionó una falta dentro del área por infracción de Ariel Broggi (fue expulsado por doble amonestación). El encargado de ejecutar el penal fue López, quien cerró su presentación en el Pincha con una buena actuación y un gol.
De esa manera, Estudiantes sumó su segundo triunfo en igual cantidad de encuentros jugados (en el debut había superado a Newell´s). Por el lado de Quilmes, que tiene una unidad por el empate de la semana pasada contra Colón, todavía saben que falta mucho para el final de la película.
Olimpo se hizo fuerte en Bahía Blanca y derrotó a Gimnasia
El equipo que dirige De Felippe superó como local al Lobo por 1-0, con gol de Mosset (PT 22m). El encuentro estuvo detenido en el complemento durante casi media hora por un corte de luz. Los bahienses sumaron sus primeros tres puntos en el campeonato, en su lucha por mantener la categoría.
En un primer tiempo equilibrado, el equipo que dirige Diego Cocca tuvo las primeras situaciones de riesgo. La inicial fue un cabezazo de Ariel Agüero que Laureano Tombolini desvió al corner, luego llegó con un frentazo de Alvaro Navarro que salió cerca y un remate de Walter Jiménez desviado.
A los 22 minutos, y de un tiro de esquina que Gastón Sessa cedió con una buena atajada a David Vega -la pelota de todas formas se iba a afuera-, llegó el gol. El balón quedó en el punto del penal y Marcelo Mosset lo aprovechó con una media vuelta certera que terminó junto al palo izquierdo.
Antes del final de la primera etapa, los de Omar De Felippe tuvieron una chance inmejorable para ampliar la diferencia. Un centro desde la izquierda encontró en una posición inmejorable a Alejandro Delorte, quien no pudo conectar de lleno el cabezazo y desperdició la oportunidad.
El complemento comenzó con problemas: a los 12 minutos se cortó la luz y el encuentro estuvo detenido durante casi media hora. Cuando finalmente se logró restablecer el suministro eléctrico, y luego del calentamiento de los jugadores en la helada noche de Bahía Blanca, las acciones continuaron.
Las chances más claras para el Lobo las tuvo Juan Neira, con un centro que se cerró y dio en el travesaño y una acción individual que retuvo Tombolini. También acercó peligro con un remate de Jorge Córdoba que sacó el arquero y un disparo de Lucas Castro que salió cerca.
El local pudo haber liquidado la historia con tres intervenciones de Martín Roll, quien se encontró en dos oportunidades con la resistencia de Sessa y en la restante intentó un taco que se fue pegado al palo derecho. De todas formas, la victoria quedó en manos de los de Bahía Blanca.
El triunfo le permitió a Olimpo salir de la zona de descenso directo (están All Boys y Quilmes) e incluso de Promoción, donde apareció Gimnasia (el otro es River). El recorrido será largo, quedan 36 jornadas, pero el sueño de mantener la categoría está en marcha y dio un paso importante.