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AMIA: cuatro de los sospechosos son candidatos a presidente en Irán

Cierran las inscripciones para las elecciones del 14 de junio en Irán y entre los aspirantes para suceder a Mahmoud Ahmadinejad figuran cuatro imputados en la causa AMIA. De los cuatro, sólo dos de ellos tiene pedido de captura de Interpol, por lo que podrían ser alcanzados por el acuerdo entre Irán y Argentina, que sin embargo duerme en el parlamento persa.

Tras cinco jornadas de registro, 686 iraníes se inscribieron en las elecciones presidenciales. El menor tiene 19 años y el mayor, 87. Y entre ellos hay cuatro nombres que figuran en la causa AMIA, dos de los cuales habrían cumplido roles fundamentales, de acuerdo a la hipótesis que maneja fiscal Alberto Nisman.

El primero de ellos es Mohsen Rezai, comandante de la organización militar más grande de su país, los Guardianes de la Revolución, y secretario del Consejo de Discernimiento al momento del ataque, del que se lo considera un organizador.

Según Nisman, el ataque a la AMIA se decidió en una reunión en la ciudad de Mahshad, en 1993. Uno de los participantes habría sido el entonces ministro de Información y Seguridad, Alí Fallahjan. Tenía a su cargo los servicios de inteligencia y también figura en las “circulares rojas” de Interpol, aunque ya estaba en ese listado por el asesinato del opositor Kazem Darabi en 1992, del que fue hallado responsable por un tribunal alemán.

Otro candidato es el ex canciller Alí Akbar Velayati, quien ocupó el cargo durante 16 años, hasta 1997. Se cree que decía que Argentina era “la segunda Israel”, con la que se habría aliado tras la Guerra del Golfo. Hoy es consejero del ayatolá Khamenei y está imputado en la causa AMIA como uno de los ideólogos del ataque.

Sin embargo, cuando Interpol consideró los pedidos de captura internacional presentados por Argentina no lo tuvo en cuenta. Argumentó que, por su posición diplomática, “podría causar un conflicto internacional”.

Hoy se cerró la lista con el poderoso ex presidente Akbar Hashemi Rafsanjani, cuya postulación no estaba confirmada, aunque

había deslizado esa posibilidad en un encuentro con estudiantes. Su inscripción le da esperanzas a los reformistas, casi huérfanos de liderazgo desde las históricas protestas de 2009.

No obstante, en Irán no basta la inscripción para competir, sino que necesitan el consentimiento del Consejo de los Guardianes, que pueden vetar postulaciones, como es probable que hagan con las 30 mujeres que están en carrera. En 2009, de 475 aspirantes sólo aprobaron a 4. Entre el 22 y el 23 de mayo se conocerán los nombres aprobados.