Alberto Fernández: “Quien intentó llevar adelante un magnicidio no es un monstruo escapado de alguna tierra lejana, ni viene de otra galaxia, ni nació marcado para ser asesino”
|En su reaparición pública después de la cadena nacional que protagonizó tras el ataque contra Cristina Kirchner, el presidente Alberto Fernández volvió a relacionar el accionar de Fernando Sabag Montiel con los que denominó como discursos de odio. “Quien intentó llevar adelante un magnicidio no es un monstruo escapado de alguna tierra lejana, ni viene de otra galaxia, ni nació marcado para ser asesino. Es uno de nosotros. Un joven, un miembro de nuestra nación, nuestra comunidad, nuestro país”, advirtió.
Fernández abundó en la caracterización de Sabag Montiel: “Un día se ubicó fuera de los márgenes de la democracia, lleno de odio, de violencia, de rencor, y rompió nuestro acuerdo de convivencia, nuestro pacto democrático”. Y agregó: “No les demos más espacio a los cultores del odio, a los que se valen de la libertad de opinar para difamar y desalentar al pueblo, a los que se encumbran en la democracia solo para desprestigiarla con discursos que no dejan de repudiarla, a los que siembran la violencia con el solo objeto de enfrentarnos”.
“La Argentina está lastimada”, sostuvo Fernández sobre el intento de asesinato que sufrió la expresidenta. Y agregó: “La memoria democrática no recuerda una imagen tan tremenda como aquella que vimos cuando alguien martilló una pistola a escasos centímetros de la cabeza de nuestra vicepresidenta”. Según enumeró, “hoy tenemos dos certezas que nos deparan algo de alivio: Cristina está viva y quien empuñó el arma asesina está detenido, siendo investigado por la justicia”.
Fernández, que habló en la celebración del Día de la Construcción, contó que “desde hace muchos años observa cómo el discurso del odio y las expresiones violentas fueron volviéndose moneda corriente” entre los argentinos. Fue en ese momento que dio algunos ejemplos. “Alguien expresa en un almuerzo televisado que una ex presidenta es ´el cáncer´ de la Argentina y todos siguen comiendo como si nada grave se hubiera dicho”, dijo en primer lugar.
“Unas decenas de personas cuelgan bolsas mortuorias de las rejas de la Casa de Gobierno. A cada una de ellas le ponen nombre y apellido para que la intimidación surta efecto. Algunos medios de comunicación corren presurosos para difundir la escena y hasta lograr los testimonios de los autores del ´montaje´, extraño modo de llamar a la barbarie”, continuó en su enumeración de hechos.
En tercer lugar, Fernández habló del alegato que presentó en fiscal Diego Luciani, quien pidió una condena de 12 años para la vicepresidenta en la causa Vialidad.
“Un fiscal acusa a una expresidenta. Más allá de la liviandad jurídica que exhibe, solo es una acusación y por lo tanto la ´acusada´ merece ser considerada inocente porque ninguna sentencia judicial la ha condenado. Sin embargo, ello basta para que dirigentes opositores alcen discursos impiadosos en redes sociales y en medios de comunicación y para que un diputado se monte en el hecho reclamando la pena de muerte para la acusada. Así construyen las ´condenas sociales´”, graficó el mandatario, quien también criticó a la prensa por la publicación del incremento de su patrimonio. Información que calificó como “aviesamente falsa”. Y añadió: “Pero eso no importa porque el objetivo no es informar si no solo generar indignación en quien lo lee”.
Fue en este punto que el Presidente planteó varios interrogantes. “¿Cómo fue que ocurrió que los argentinos acabamos por naturalizar tanta infamia? ¿Cómo fue que sucedió que la decrepitud de los discursos antidemocráticos acabara cooptando los espacios mediáticos y las redes sociales? ¿Cómo fue que un diputado nacional convoque al enfrentamiento de un pueblo afirmando “son ellos o nosotros”?”, se preguntó.