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Alberto Fernández enterró la reforma laboral que ambicionaban empresarios allegados a la oposición

El Coloquio de IDEA le acercó al Gobierno una lista de propuestas que consideran ellos contribuirán a generar más puestos de trabajo y que expuso durante tres días. Alberto Fernández dio una contundente respuesta al rechazar de cuajo la flexibilización. Esto quedó bien claro entre una audiencia que se mostró más efusiva en torno a las consignas de candidatos a diputados de la derecha neoliberal que disertaron en uno de los últimos paneles.

Los postulados de esta usina de pensamiento del establishment se pueden resumir en tres pilares. Primero pidieron un régimen laboral de emergencia, que integra la reducción temporal de cargas patronales para aumentos de nómina de personal y la eliminación de los pasivos laborales de las compañías.

En segundo plano, calificaron como necesarias “mejoras tácticas” para el sistema actual, que apunten a reducir el costo de indemnizaciones en Pymes y la federalización de la conciliación laboral obligatoria.

El tercer punto, fue resumido como “cambios institucionales para adaptarse a las nuevas demandas del mercado laboral” y pone énfasis en la asignación estímulo a cargo del Estado para personas que realicen capacitaciones en empresas, para que luego un porcentaje de ellas sea luego contratado por esa planta.

“Hasta aquí no existen evidencias que demuestren que generalizar la flexibilización de despidos genere efectos positivos en el empleo”, respondió Alberto Fernández en el cierre de un Coloquio que se extendió por tres días en la Ciudad de Buenos Aires, a diferencia de la costumbre pre pandémica, donde se trasladaba a Mar del Plata. Ante esto, detalló cómo realmente funcionan los sistemas laborales de los países nórdicos, que son citados sólo en parte como ejemplos.

Unos minutos antes, la candidata a diputada del Frente de Todos Victoria Tolosa Paz se había mostrado sólida ante un público no tan amistoso. Les explicó que “el Estado debe ser solidario con quienes invierten, liberando cargas patronales, como ya hacemos hoy”, en referencia al programa Te Sumo y su propuesta de llevar al Congreso un proyecto para convertirlo en ley, con más beneficios.

Sin embargo, los representantes de las más grandes compañías en el país pretendían un paso más. “Después de estos discursos, a los empresarios les quedó claro que no va a hacerse la reforma laboral que pedían”, sinceró a El Destape un consultor político invitado tras el discurso del Presidente.

Fuente: Ezequiel Orlando – El Destape Web.-

 

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