Agroindustria presento Mercado Futuro de Leche
Los tamberos recibieron hoy la noticia del lanzamiento de un Mercado Lácteo de Futuro, a través de plantaformas a emplear como el Matba y el Rofex, como de la ambiciosa propuesta de las autoridades de Agroindustria de reordenar la actividad comercial sectorial, hecho que a juicio de la producción no da solución a los $ 2 de déficit que enfrenta la relación costo-precio, la presión impositiva y las altas tasas que ofrece el mercado financiero.
Las bondades que ofrecería la posibilidad de fijar un precio a futuro para la leche fueron promovidas hoy por el secretario de Agroindustria, Luis Etchevehere, en sendas reuniones, primero con los miembros de la Mesa de Competitividad de la Leche, y luego ante la prensa en la cartera agroindustrial.
“Junto a la Comisión Nacional de Valores, el Mercado a Término de Buenos Aires y el Rofex, presentamos el Mercado Futuro de Leche, una herramienta que le permite a los productores y a la industria garantizar previsibilidad para poder proyectar y financiarse en todos los eslabones de la cadena láctea”, expresó Etchevehere en el marco de sus exposiciones.
Algunos tamberos consideran que es una buena herramienta para tener en cuenta a futuro, sin embargo otros, con la vista puesta en los $ 2 que pierden para alimentar a sus vacas lecheras y luego vender su leche, entienden que habría que acelerar desde el ámbito gubernamental la toma de decisiones en otros segmentos y atender los cuestionamientos que actualmente mantiene el sector.
“Esto va a ser difícil que funcione”, le replicó un tambero a uno de sus pares en el transcurso de la presentación encarada por el secretario Etchevehere.
De cara a la próxima reunión que deberá preparar los privados para un encuentro con el presidente Mauricio Macri durante diciembre, dentro de la agenda programada de la Mesa de Competitividad de la Cadena Láctea, los tamberos no hacen otra cosa que repetir la misma canción desde hace meses y meses: “engordamos vacas en dólares y recibimos pesos por la producción”.
Para los establecimientos productores de leche, todo es incertidumbre, ya que hoy deben afrontar tasas de financiamiento de entre el 60 y 70%, una fuerte presión impositiva nacional, provincial y municipal, y la falta de precio para la leche cruda; y mientras tanto, desde Agroindustria, le mencionan cada vez que pueden los alcances de herramientas como el Siglea para conocer los precios actuales pagados por las usinas.
Representantes de las fábricas lácteas, exportadores y también de asociaciones de tamberos escucharon hoy el anuncio de la conformación de un mercado de futuro de boca del propio Luis Etchevehere, quien estuvo secundado por Alejandro Sammartino (director de Lechería), Guillermo Bernaudo (secretario de Agricultura), y Santiago del Solar (jefe de Gabinete de Agroindustria). También asistieron Marcos Hermansson (Matba), Andrés Ponte (Rofex) y Marcos Ayerra (CNV).
Cada contrato de futuro de leche cruda será de 5.000 litros. Se listará en pesos y en dólares, se liquidará por diferencia de precio (sin entrega física), contra el precio del mes anterior informado por la cartera agroindustrial. Esto permitirá a los productores asegurar un precio por la proporción de su producción que ellos decidan. A su vez, negociando en los mercados de futuros de granos se pueden asegurar relaciones de compra de kilos de maíz y soja por litro de leche.
Dada la volatilidad del precio de la leche cruda y su alta participación en el costo de otros productos (como la leche en polvo, por ejemplo), resultaba muy difícil para una industria hacer contratos a un año. Los futuros permitirán tener certezas en este aspecto, de la misma forma que ocurre en otras cadenas productivas.
Agroindustria cuenta hoy con un indicador que surge del precio promedio ponderado liquidado mes a mes, de un volumen del orden de los 800 millones de litros, que comprende más de 8.300 liquidaciones electrónicas con una facturación de más de 6.700 millones de pesos mensuales.
Desde el punto de vista del comercio, una cadena de supermercados podría comprar futuros de leche cruda y acordar con quien les fabrica las marcas blancas un costo industrial para los meses siguientes. De esta manera podría proyectar el precio al que venderá el producto con meses de anticipación.