Adorni le pegó a Sergio Massa y sugirió que el Gobierno llevará a la Justicia a Malena Galmarini
El Gobierno denunció que se detectaron “gastos innecesarios” en la empresa AySA por un monto de 4.800 millones de dólares. Con varias alusiones tácitas a Sergio Massa, el vocero presidencial Manuel Adorni, sostuvo que la compañía estatal -una de las que las gestión de Javier Milei quiere privatizar- fue utilizada como una “plataforma de campaña”. Además, dejó abierta la posibilidad de llevar a la Justicia a la ex presidenta de la firma, Malena Galmarini.
Los fondos, según sostuvo el portavoz Manuel Adorni, fueron asignados al financiamiento de eventos deportivos y sociales en municipios gobernados por signos políticos afines a la gestión anterior, a cargo de Galmarini, esposa del ex ministro de Economía, Sergio Massa, quien compitió en la carrera presidencial del año pasado contra Milei y Patricia Bullrich.
“Se detectaron gastos innecesarios por más de 4 mil 800 millones de dolares durante la gestión anterior”, anunció el vocero y consideró que “lejos de dedicarse a brindar un servicio de calidad, la empresa funcionó como una plataforma de campaña para los funcionarios de turno”.
AySA es una de las ocho empresas incluidas en la lista de compañías sujetas a privatización prevista en la Ley Bases sancionada en julio, junto a Enarsa e Intercargo, Belgrano Cargas, Trenes Argentinos (Sofse) y Corredores Viales, Nucleoeléctrica Argentina (NASA) y Yacimientos Carboníferos Río Turbio.
Al enumerar los gastos detectados, Adorni afirmó que “hubo 200 millones de dólares destinados a obras, el 25% se asignaron a Tigre y Malvinas Argentinas, saquen sus propias conclusiones de por qué esto fue así”.
“AySA también financió eventos deportivos y sociales en los distritos que políticamente estaban alineados con los funcionarios de la gestión anterior, como por ejemplo el Triatlón IronMan y el Challenger de Tigre, un torneo de tenis ATP, que casualmente se hacían en ese distrito”, puntualizó.
También mencionó eventos como el Carnaval de San Fernando, “donde hubo un festival de gasto público, horas extras en personal, camiones cisterna que fueron desviados de sus principales actividades y que se usaron para ser parte de estos coloridos carnavales”. Y agregó: “En total se gastaron 1,3 millones de dólares entre 2022 y 2023 en sponsoreo de AySA en estos eventos, en un país empobrecido, esto es bueno remarcarlo”.
Ante la pregunta de si el Gobierno, al haber detectado irregularidades en el manejo de los fondos asignados a AySA, va a avanzar en una denuncia contra Malena Galmarini, Adorni dejó la puerta abierta: “Todo lo que ocurre con la presunción de corrupción o del mal uso de los fondos públicos que tenga los elementos para judicializarlo, se judicializa”.
En ese contexto, Adorni indicó que la empresa estatal “tampoco ahorró en la compra de inmuebles y vehículos” y precisó que durante la pandemia adquirió “un edificio sobre la calle Tucumán por 31 millones 600 mil dólares” y gastó “9 millones 600 mil dólares” en reparaciones.
“Lo irónico es que esta obra nunca se terminó, nunca se finalizó. Y lo que es más irónico aún, o extraño, es que estaba previsto que en ese edificio se construyan varios pisos extras dedicados al uso exclusivo de la presidente de AySA”, disparó.
Respecto de la compra de vehículos oficiales, el funcionario nacional puntualizó: “Además en septiembre del 2023 se compraron las famosas camionetas Renault Kangoo. Eran 613 camionetas que se adquirieron por 25 millones 700 mil dólares o sea 42 mil dólares por cada camioneta Kangoo, el triple de su valor real a la fecha de compra”.
Motosierra a full
El vocero presidencial explicó cuándo será el fin del cepo cambiario y planteó que “el último día de gobierno será con motosierra en mano” porque deben “ir profundo en las áreas”.
En ese marco, citó la visión del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, quien habló de “deep motosierra”, y sostuvo que “todos los meses hay baja de personal” en la administración pública.
“Sturzenegger dijo que teníamos que desmalezar primero lo que se veía a simple vista y después ir de manera más profunda en cada una de las áreas. Hay capas geológicas de cuestiones que no funcionan en el Estado, o mal, o de manera deficiente, y el contribuyente no tiene por qué hacerse cargo”, argumentó Adorni.
Y anticipó: “El último día de gobierno, sea en tres años y medio o en siete años y medio, será con motosierra en mano. Parte de la campaña fue explicar como había un estado que era un elefante que bancan entre todos los contribuyentes y que en un país pobre no tenía mucho sentido discutir si tenía que estar o no. No tiene que estar, tiene que ser mucho más eficiente”.
Además, afirmó que “hay todo un círculo virtuoso en el achicamiento del Estado” y detalló: “En los últimos 20 años duplicaste el Estado y sin embargo multiplicaste por 3 la pobreza. Entonces, el Estado grande no tiene una correlación con que la gente esté mejor”.
En cuanto al fin del cepo cambiario, el portavoz precisó: “Pasos en falso no se van a dar. Levantar el cepo se va a dar cuando sea algo que no traumatice a nadie”.
“Cuando se levante el cepo vamos a haber hecho tanto antes que va a ser casi una noticia menor. El levantamiento final del cepo se va a dar cuando estén las condiciones para que así sea”, agregó.
Por último, el vocero presidencial sostuvo: “No damos tiempos, ya dijimos que lo vamos a terminar de levantar en el corto plazo. No es que evita una crisis o deja de evitarla. Cuando estén las condiciones dadas… El presidente ya explicó que tiene que suceder que la inflación inducida sea igual a la inflación medida vamos a levantar el cepo. Ahí será cuando le demos el tiro final al denominado cepo”.