Argentino U15: ¡por Dios qué Semillero!
Atenas de Córdoba se coronó campeón del Campeonato Argentino de Clubes Masculino en Categoría U15 derrotando a Independiente de Neuquén por 66 a 51 en una final de poco goleo, de grandes defensas y auspicioso nivel técnico. Postales exclusivas.
Solo apreciamos la última jornada en el “Gigante” de calle 25 de Mayo, pero nos bastó para comprobar que hay cada nene en el básquet U15 argentino… ¡Por Dios!!! Si llegan a evolucionar sin presiones, con personal técnico y físico que sepa pulirlos en la exacta medida, y con la dosis indispensable de HUMILDAD, están llamados a ser la nueva Generación Dorada de aquí a un lustro y algo más.
Lo de Independiente en el primer tiempo de la finalísima fue fantástico, defendiendo con enorme dinámica, concentración y consistencia, aprovechando cada defecto de su rival para lastimar en el momento propicio.
Mucho tuvo que ver en el primer chico Maxi Duffard, un base de pequeña altura pero de grandiosa mente para liderar con astucia.
Como complementos, el selección nacional (aun lesionado en una de sus manos) Christian Boudet, y la sociedad de “La Bestia” (por su tamaño, obvio…) Leandro Villagrán y Lucas Barria. En tanto que, en el 2°, fue decisivo ofensivamente Lautaro Riego.
Por el elenco “Griego”, durante los 10 iniciales lo más destacable surgió de manos de Matías Cuevas, Martín Ruggeri y Leandro Guevara, como en el 2°, dentro de un trámite a puro nervios, ansiedad y por ende imprecisiones varias, Gonzalo Guevara fue lo más claro junto a Fabián Saiz.
Luego de la charla en el vestuario, llegó un Atenas más selectivo, equilibrado. Con otra conducta defensiva, pero sobre todo mucho más eficaz y cerebral. Leandro Guevara fue decisivo, con tributos de relieve a cargo de Gastón Bobillo y Matías Cuevas.
Independiente cayó rotundamente. Primero presa de su propia red. Ya la vehemencia, el vigor en defensa, se trasladó a un inestable ataque donde era evidente que la lesión de Boudet en mano derecha le restaba protagonismo a su máximo estandarte de proyección internacional, mientras que Maxi Duffard perdía paulatinamente el manejo de la sagacidad y/o de los tiempos ofensivos, agregando una impaciencia nociva desde afuera hacia adentro en cuanto a algunos pitazos controvertidos pero NO influyentes.
Los 10 puntos del “Rojo” eran prueba irrefutable que había cambiado notoriamente el destino del juego.
Repasemos… Primer cuarto 16-13 para los patagónicos. Segundo, 12-12. Tercero 21-10 para Atenas. Muy notorio el progreso de uno, y el bajón del otro.
La historia fue similar en los 10 finales aunque el “Verde” de La Docta anexó como arma letal a Esteban Giubergia, en alianza con Leandro Guevara y Agustín Mas Delfino.
Independiente ya no tuvo guía. Fue pura intención en singular y terminó de desarmarse la sobria y sólida estructura colectiva de la primera etapa.
La dupla Mauricio Ronzoni y Martín González llegó con elocuencia a la fibra íntima de sus chicos en el recreo largo.
Marcelo Remolina hizo todo lo posible por contagiar su energía a los gurises, pero o no lo entendieron o simplemente sucumbieron ante la mayor calidad de los cordobeses, sumándose un estado de tensión inconducente, repetimos, desde afuera hacia adentro.
De nada sirvió protestarle DE TODO a los jueces que, a nuestro criterio, tuvieron un arbitraje CORRECTO.
Y el final fue digno de ovación pues los pibes sureños se diplomaron de HIDALGOS, DIGNOS VENCIDOS. Fue una muestra de CABALLEROSIDAD FORMIDABLE, admitiendo el RESPETUOSO SALUDO de sus vencedores.
No hay duda que con esta gurisada, el básquet argentino tiene un futuro FENOMENO. Ojalá que los padres le quiten presión, los entrenadores comprendan qué edad tienen y no les exijan tanto, en especial, por allí con ciertos tonos de voz y/o hasta improperios que lamentamos escuchar, como anhelamos que desde la CABB, Asociaciones, y Federaciones CUIDEN, PROTEJAN, más a éste hermoso Semillero.
No hablemos solo de selecciones. Apostemos más a los Planes de Detección de Talentos y Altura, como a su vez, cuidemos al resto, al que tal vez no es tan dotado pero AMA este deporte y SUFRE mucho cuando entrenadores y directivos, o hasta los padres de los más virtuosos, se ofenden, se ponen mal cuando los menos hábiles cometen errores o carecen de la pericia de los “Cracks”. Hay mucho por hacer. Lo bueno es que HAY MATERIAL, HAY FUTURO, y es extraordinario.
El 3°
Por otra parte, GEVP de Capital Federal logró subirse al podio tras triunfar en tiempo suplementario ante Rivadavia de Mendoza en el juego por el tercer puesto. El resultado final fue 76 a 60 (habían igualado en 65 en el tiempo regular).
La figura del encuentro fue el porteño Juan Martínez, autor de 24 puntos y 9 rebotes; bien secundado por Gonzalo La Fuente (12 y 11) y Martín Estivill (12 y 15). Mientras que, en el conjunto mendocino se lucieron Stefano Arancibia (21 puntos y 5 rebotes), Renzo Gómez (17 puntos y 4 recuperos) y Diego Maranesi (9 puntos, 13 rebotes y 3 robos).
Repaso de cada jornada
El sábado se disputaron las semifinales en el “Butta”. Atenas, a primera hora, superó a Gimnasia y Esgrima por 74 a 49. Los cordobeses se hicieron fuertes desde el goleo de Leandro Guevara (25 puntos) y los aportes de Matías Cuevas (10 puntos y 12 rebotes) y Gastón Bobillo (9 y 11); para vencer (74-49) con contundencia a los porteños, que tuvieron como goleador a Nahuel Paccioti con 16 unidades.
Independiente de Neuquén superó a Centro Deportivo Rivadavia de Mendoza. El primer tiempo favoreció con claridad a los mendocinos, que se fueron al descanso largo ganando 46 a 29. Sin embargo, a la vuelta del entretiempo, las cosas cambiarían.
Los del Sur, liderados por Christian Boudet (totalizó 27 puntos y 10 rebotes), metieron un parcial de 20 a 5 en el tercer cuarto para ponerse a tiro y dejar todo por definir en el último cuarto que resolvieron también favorablemente por 20 a 10, globalizando un 69 a 61 que clasificó a Independiente de Neuquén a la final.
El viernes
El viernes por la noche se cerró la 1ª etapa del Hexagonal. Atenas de Córdoba (2 PG y 0 PP) finalizó invicto y se adjudicó el primer lugar de la Zona A. Por su parte, quien lo acompañará a la siguiente etapa es Rivadavia (1 PG y 1 PP). Mientras que, Normal Banda de Santiago del Estero (0 PG y 2 PP) se despide sin haber triunfado pero habiendo dado todo en el campo de juego.
Independiente de Neuquén (2 PG y 0 PP) fue el monarca del Grupo B accediendo a la semifinal sin sufrir derrotas. El segundo lugar lo ocupó GEVP de Capital Federal (1 PG y 0 PP), cuya victoria clave la consiguió ante el local Echagüe de Paraná (0 PG y 2 PP).
El tablero de la doble jornada
Zona A
Atenas de Córdoba 80 – 51 Rivadavia de Mendoza
Normal Banda 78 – 83 Rivadavia de Mendoza
Normal Banda 79 – 83 Atenas de Córdoba
Zona B
Echagüe de Paraná 70 – 79 GEVP de Capital Federal
Independiente de Neuquén 56 – 52 GEVP de Capital Federal
Independiente de Neuquén 63 – 59 Echagüe de Paraná.-
