Minibásquet: ¿por qué los chicos no conocen puntos mínimos del reglamento?
|ESPECIAL (por Sergio Fabián Caminos *).- Les escribo en observancia al saludable y valiosísimo espacio que Uds. tributan en su página web, sin dudas el sitio que más apoyo le está tributando al Mini de Paraná en cuanto a consideraciones aquí vertidas, todas ellas que invitan a la reflexión por su elocuente especialización en la materia. La inquietud de mis líneas reside quizás en redundar sobre algunos sugestivos puntos por Uds. tocados en sus interesantes y didácticas Columnas de Opinión. Me pregunto en especial: ¿Que pasa que nuestros chicos, no saben las cuestiones mínimas reglamentarias?
En Escuelita, puede pasar, (¿puede suceder…?), pero llegar a Premini, sin saber, los que son los limites de la cancha, no saber cómo pararse para el salto inicial o durante el juego, como tienen que ubicarse para los tiros libres, la distancia que se debe dejar para que el otro equipo saque en el lateral o sobre línea final, cuando es “camina” o “contrario”. Esto se verifica cuando un árbitro sanciona determinados fallos los chicos lo miran con cara de no entender que fue lo que hicieron mal.
Sin ir más lejos, los foules que hacen los chicos, muchas veces son, más por desconocimiento que por querer hacerlo. Por suerte no han sucedido problemas graves.
Son tantas las cosas por mejorar, pero… ¿esperamos a algún “iluminado”?… ¿o ponemos a gente capacitada a manejar las cuestiones de la enseñanza de nuestros hijos?
Todos creen saber de básquet, sin haberlo jugado jamás. Todos dicen saber, sin haberse preparado. Muchos critican sin saber.
No se si en todos los clubes pasa, que las subcomisiones de básquet esté formada por padres, que nunca jugaron al básquet, y son quienes eligen a los entrenadores. ¿Están capacitados estos padres en elegir a los entrenadores?
¿Es suficiente que los entrenadores sean buenas personas, o no quita que un buen entrenador sea también una buena persona?
Actualmente los entrenadores de inferiores asumen la total responsabilidad de enseñar a nuestros hijos y no aceptan ninguna ayuda u opinión, pero llegado el tiempo, no se hacen responsables de la falta de técnica, con la que los chicos llegan a divisiones superiores, sin entender, que sus sueldos salen de los bolsillos de los papás, que hacen un gran esfuerzo para que su hijo APRENDA A JUGAR AL BASQUET.
Son muchos los papás que quieren que sus hijos se diviertan, sí es cierto, nadie quiere que su hijo no sea feliz, pero… ¿alguien se puso a PENSAR, que es mas DIVERTIDO, si mientras me DIVIERTO, también APRENDO?
Puede ser que algunos papás sean más exigentes que otros, pero son los chicos los que se frustran cuando juegan contra otro equipo, que los supera, en TECNICA Y PREPARACION.
Los que alguna vez jugamos este HERMOSO DEPORTE vemos a nuestros hijos durante un partido, y nos alarmamos sobre la falta de aprendizaje de los niños en cuanto a muchas de las cosas simples y que no demandan demasiada preparación.
Hoy las penitencias, en el caso que algún chico este molestando, es sentarlo. Pensando que eso es lo que mas le molesta. Cuando nosotros molestábamos, Carlitos Scoco nos mandaba a hacer tribunas al costado de la pileta de natación de Echagüe. En una charla rápida con él. Dijo: “la verdad que no entiendo la falta de entrenamiento y enseñanza de técnicas que tienen los chicos hoy en día”
Muchos de aquellos chicos, ahora grandes y viejos, vemos como nuestros hijos cometen errores en el juego, porque nadie les ha enseñado adecuadamente y ver como se cansan por la falta de una preparación física específica para la edad, cuestión que cualquier medico deportólogo puede asesorar, ¿PERO ALGUNA VEZ HUBO UN ESTUDIO AL RESPECTO?
Por algo será que no han salido de Paraná desde hace mucho tiempo jugadores de nivel nacional, si bien puede ser que exista algún caso aislado, pero es más por merito propio o por condiciones extraordinarias de algún pibe, que por las políticas adoptadas a impulsar y mejorar éste EXCELENTE DEPORTE, considerado, después del futbol, uno de los más vistos en el mundo.
El básquetbol en edades pequeñas debe contribuir a la educación integral de nuestros jugadores, de tal forma, que la preparación física debe acompañar al proceso de enseñanza de FUNDAMENTOS buscando que los niños sepan dosificar sus energías, conociendo los espacios del campo, y aprendiendo cuáles son sus propias limitaciones o potenciales en lo físico para no sufrir exageradas desigualdades en encuentros con otros equipos.
PREPARACION INTEGRAL es la CLAVE y en esto también debemos involucrar -EN FORMA TRASCENDENTE- las reglas pues conociéndolas los chicos sabrán de otros límites, los normativos, y así comprenderán cómo y por qué suceden interrupciones en los juego y cuáles son las faltas técnicas que deben evitar para no entregar la posesión de la pelota al otro elenco. Es BÁSICO. No es tan complicado.
En esta etapa nos preocupará esencialmente el bienestar físico y psíquico de nuestros niños, que se diviertan, que adquieran hábitos de disciplina, esfuerzo, cooperación, trabajando –reitero- de forma INTEGRADA en lo técnico, en lo físico y hasta en lo psicofísico, para que de esta forma el niño sepa que es un deporte divertido, donde hay que encestar para conseguir puntos y esto se puede hacer de muchas y divertidas maneras siempre y cuando el entrenador tenga la idoneidad y actitud suficiente, para ello la elección del mismo debe ser A CONCIENCIA y de forma CONSULTA con todos los padres, no por INTERESES particulares solapados.
(*) Padre de jugadores del AEC.-