El Súper Clásico abre la Liga 2011/2012 con resultado puesto
|La Liga Nacional de Basquetbol recupera el partido más relevante desde lo emocional. Desde las 22.00 en un Islas Malvinas seguramente repleto, se juega la edición 78 (sin Súper 8 ni Copa Argentina) del clásico entre Peñarol y Quilmes. El actual monarca “recibe” a un rival que re-estrena su condición de A tras un nuevo paso por el TNA y que, por esas elecciones de los técnicos y/o posibilidades dirigenciales, armó un plantel que, a priori, estará luchando otra vez por no caer al 2° nivel. Dirigen Pablo Estévez y Fabricio Vito.
Más allá de la mesura de quienes por un lado respetan eso de “los partidos hay que jugarlos” o de quienes necesitan “manijear” el evento y por ello no desnudan a las claras chances de uno y otro viendo sus respectivas actualidades, resulta una imbecilidad creer que -al menos éste miércoles- puede haber marcada paridad.
Es el bicampeón ante su archirrival pero que, sorprendentemente, optó por cuidar el bolsillo e invirtió poco y sin garantías. Aún sin “Tato” Rodríguez, por ese corazón que lo deja afuera quizás definitivamente, y sin Marcos Mata -por su esguince de tobillo-, el “Milrrayita” es ,mucho más que el “Cervecero”.
Aun así, los abnegados simpatizantes quilmeños apuestan a la ilusión, tal vez alimentada por una prensa marplatense que necesita esa pugna ya mítica pese a saber que arrancan uno como clara banca (Peña) y otro visiblemente punto (Quilmes). Parece no importar que hay un presagio indisimulable de triunfo sin contratiempos para el team de Hernández.
Daniel Maffei sabe que su regla de presionar todo el campo al rival hoy se verá plenamente justificada en la idea del desgaste contra el único base que presenta su rival: Facundo Campazzo.
Serán Nicolás Lauría y el chico Franco Giorgetti los encargados de hacer olvidar la ausencia de Marcos Mata en el puesto del alero. Mientras que Pablo Barrios, Leo Gutiérrez, Martín Leiva y Alejandro Reinick le dan una supremacía inicial muy importante en el juego interior a Peñarol sobre Quilmes que deposita su fe en el triunvirato Johnsen – González – Morris.
El “Loro” podrá ir apreciando su Phillip Mac Hopson, clave en el ascenso de Quilmes, también puede ser referente pero jugando en la elite.
Al parecer, el “hijos nuestros” que cantan los reyes marplatenses ya parece no tener vueltas con el plantel armado por Maffei. Y la tristeza parece no tener fin para Quilmes en la predicción para lo que viene. En los últimos tiempos, el historial registra un 25-5 a favor de Peña así que anoten otra decepción pese al notable golpe psicológico de perder al “Tato”, así, como se lo pierde por una maldita afección coronaria, y a escasos días de debutar a Mata por una lesión más inoportuna que nunca.
La presentación formal
Con la presencia del Presidente de la Asociación de Clubes Eduardo Bazzi, el entrenador de Peñarol Sergio Hernández, el jugador más ganador de la LNB Leo Gutiérrez, el DT de Quilmes Daniel Maffei y el escolta de Quilmes Nicolás Ferreyra, se llevó a cabo la presentación del partido inaugural de la Liga Nacional 2011/2012 begin_of_the_skype_highlighting 2011/2012 end_of_the_skype_highlighting, que disputarán este miércoles los equipos marplatenses en el Polideportivo Islas Malvinas desde las 22hs, televisado por TyC Sports.
Eduardo Bazzi se encargó de dar la bienvenida a la gran cantidad de periodistas y autoridades presentes, agredeciendo esta nueva convocatoria y abriendo oficialmente lo que será la nueva temporada de la Liga Nacional que comenzará con el clásico de la ciudad de Mar del Plata.
Lo destacable de la tarde pasó por las palabras del Oveja Hernández quien, respecto al estado de salud de Tato Rodríguez, afirmó que “me cuesta imaginarme el equipo sin Tato en muchas cosas: en el juego, en la presencia de él (es nuestro capitán), en su entusiasmo. Su vida es el básquetbol y Peñarol”.
Refiriéndose estrictamente al juego de mañana, el entrenador milrayitas confesó que utilizarán su mayor experiencia en juego de equipo para poder tener chances de ganar el partido.
Quien también habló de lo que será el clásico de mañana fue el entrenador quilmeño Daniel Maffei aclarando que “hay muchas cosas por tener en cuenta. Pero en definitiva estamos en manos de los jugadores. Si tiran la pelotita y la meten, ganás. Si tiran la pelotita y no la meten, perdés. No es tan fácil defender al equipo rival más allá de los excelentes scoutings que se realizan. Nosotros trataremos de dar todo, de no dejar nada librado al azar. Seguramente el que decidirá será el que está allá arriba (en alusión a Dios)”.
Para concluir cabe destacar la vuelta a las canchas de Leo Gutiérrez que el último domingo jugó su primer amistoso con el equipo y que llega a este inicio de temporada en un porcentaje interesante pero no al cien por ciento. “La ansiedad de volver a jugar me la saqué el domingo contra Weber. Me siento bien, conforme como estoy aunque no al 100% físicamente porque no pude entrenar con normalidad y continuidad. Voy a estar bien”.