¿Militancia imprudente o manos negras?
Si uno recorre distintas arterias céntricas de la ciudad se encuentra con un mamarracho de pintadas y carteles pegados maliciosamente, “promocionando” a candidatos de la UCR como Fabián Rogel y Sergio Varisco. Conociendo a ambos suena a incomprensible, asombroso, el adefesio plasmado en paredes, columnas, armarios de diversos servicios. Pero no se ve que nadie limpie semejante atropello. ¿Ningún policía vio tantos atentados juntos?
No somos amigos ni de Rogel ni de Varisco. Pero mantenemos con ellos tan cordial como respetuosa relación y algo los conocemos, por lo cual creemos que ellos mismos deben estar avergonzados con lo que presuntamente hicieron algunos de sus militantes, no obstante si esa hipótesis primaria fuese falsa nos extraña que no se hayan puesto el overoll para limpiar cuanto antes semejante disparate.
No importa si realizaron sus averiguaciones internas y las mismas dieron “negativo”. Aún más… Consideramos vital que si hubo un apercibimiento y sondeo de dirigentes políticos, militancia y habituales responsables de crear pasacalles, carteles o afiches, dando como resultado inocencia plena de cualquiera de las partes hipotéticamente involucradas, se debía rápidamente movilizar mancomunadamente esfuerzos y sacar toda esa propaganda agresivamente dispuesta.
Además, paralelamente, Rogel y Varisco deberían haber requerido mínimamente ante los medios y de modo ideal ante la Justicia una investigación por la posibilidad de un atentado con el objeto de desprestigiar a ambos.
Hasta el día de hoy no hemos visto, en los medios, aclaraciones, aunque en realidad -salvo ínfimas excepciones- tampoco observamos -en los tradicionales espacios colegas que seguimos- fuerte crítica periodística alguna hacia éstas pegatinas inescrupulosas.
Claro que, en la ocasión hablamos sobre Rogel y Varisco, pero otros candidatos como el propio Juan Domingo Zacarías nunca salieron a la palestra para o pedir disculpas o enfatizar que su gente no tuvo nada que ver con esas conductas, sea de pegadas, pintadas o distribución de volantes que tapizan las veredas y calles paranaenses.
Por eso insistimos en que no nos interesa si son culpables o no. De hecho, lo reiteramos, nos cuesta concebir que ellos den su aprobación a esas formas nocivas de promocionar sus valores y/o cualidades para dirigir una ciudad.
Lo que debería trascender es que cada uno de los candidatos -LOS NOMBRADOS Y LOS QUE EN ÉSTE ARTÍCULO NO SE CITAN- nos sorprendan y decidan poner fin a esas prácticas y rentar espacios pertinentes para afiches, o principalmente proceder a una propaganda mucho más inteligente sin ensuciar la propia ciudad que pretenden conducir.
Algo más… Como para que tome nota el gobierno. En próximo sondeo, daremos a conocer un muestreo favorable en torno a que la sociedad paranaense concibe que hay un crecimiento lento, pero progreso al fin, de las medidas policiales dispuestas para otorgar mayor seguridad a la población. Sin embargo, no podemos dejar de opinar que nos resulta extraña tanta libertad para dañar frentes que tienen algunas personas, ligadas o no a partidos políticos. Por ende, requerimos a través de éste humilde informe, enérgicas sanciones contra quienes, supuestamente amparados bajo los colores de tal o cual estructura partidaria, atentan contra la higiene de la Comuna capitalina sea con una intención propagandística groseramente errónea o con la búsqueda artera de desprestigiarse entre contrincantes con miras a las próximas elecciones.