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Incidentes en la marcha de los jubilados al Congreso: dos detenidos, dos policías heridos y un periodista y camarógrafo agredidos

Acompañados por agrupaciones de izquierda y gremios de salud, jubilados protestaban como cada semana en el Congreso por los haberes y pensiones, pero este miércoles hubo incidentes. Dos personas fueron detenidas. También hubo demorados en los alrededores de la marcha. A su vez, dos policías resultaron heridos cuando intervinieron en el operativo antipiquete. Una mujer sufrió una fractura de tobillo y otro agente, una quebradura de muñeca. Además, un periodista de La Nación+ y su camarógrafo fueron agredidos. 

Tras la primera detención, manifestantes cortaron el tránsito en el cruce de la avenida Rivadavia y Combate de los Pozos, en la esquina del Congreso y del edificio anexo, lo que sumó tensión a la situación. Denunciaban que una jubilada había sido herida.

De la manifestación participaban grupos con pancartas que reclamaban “jubilaciones dignas” y banderas con la leyenda “el PAMI es de los jubilados”.

A la tensión que ya se vivía este miércoles por la tarde en las inmediaciones del Congreso, durante la protesta semanal de los jubilados en las que hubo detenciones e incidentes, se sumó la agresión a un camarógrafo y a un periodista que se encontraban cubriendo la marcha. La situación se vio en vivo y fue captada por varios canales de televisión.

Nicolás Edwin es cronista de la señal LN+. Estaba, como tantas otras veces, realizando la cobertura rutinaria de la manifestación. En medio de la gente, y mientras buscaba testimonios, un joven de remera gris lo increpó: “Son cómplices ustedes, son cómplices”.

Aunque inicialmente no se pudo ver la escena, la cámara rápidamente le puso un rostro a la voz que se escuchó desde fuera de plano: el manifestante de bigotes tomó el micrófono del periodista y avanzó en una agresión. “¿Esto vienen a cubrir, cómo le pegan a los jubilados?”, lanzó y atacó al camarógrafo.

Edwin intentaba recuperar su herramienta de trabajo, pero el agresor no lo soltaba. Cuando el periodista finalmente logró agarrar el micrófono, el manifestante reaccionó con un fuck you a la cámara.

Mientras aún lo enfocaban, golpeó varias veces la cámara. Y ante la reacción de los movileros intentó justificarse acusando al camarógrafo de haberlo golpeado con su equipo. Entonces, volvió a golpear el lente. La escena fue tan insistente que otros equipos periodísticos se acercaron a cubrir la escena en solidaridad con los colegas.

Mientras el manifestante aún increpaba al periodista y a su camarógrafo, se sumó al ataque una mujer que también intentó agarrar el micrófono de LN+. Esta vez, le rompió el antipop, la esponja cobertora que mejora el sonido del aparato y bloquea la interferencia del viento.

La nueva agresora estaba con una niña y continuó insultando a los periodistas que cubrían la marcha. Más gente se fue sumando y la tensión escaló. En medio de las agresiones, otros manifestantes intercedieron para calmar la situación, aunque pidieron a los movileros que se alejaran del lugar donde trabajaban.

Con insultos y gestos obscenos de fondo, el cronista siguió intentando, micrófono roto en mano y un poco más alejado, conseguir un testimonio. Finalmente dio con un hombre dispuesto a hablar sobre la marcha. “Les agradezco a ustedes que han venido y disculpen que hay algunos que no los entienden a ustedes, y nosotros los entendemos porque están siempre con nosotros”, dijo el jubilado.

“Este es el tercer año en la calle y nunca me pasó algo así”, expresó, más tarde, el periodista.

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