Tensión, gases y desalojo de Prefectura en un frigorífico del Puerto de Mar del Plata

Una protesta de un grupo de trabajadores de una cooperativa en la puerta de un frigoríficio ubicado en el puerto marplatense generó el primer desalojo de Prefectura activando el Protocolo Antipiquetes en la ciudad. La protesta había comenzado el jueves y siguió esta mañana en la puerta del frigorífico La Bella, en Figueroa Alcorta al 1000, entre Guanahani y San Salvador. Allí, varias decenas de trabajadores exigían que se cumpla con un aumento que les correspondía por un acuerdo paritario.

Ante el reclamo, en medio de las negociaciones con los dueños de la empresa, que estaban dentro de las oficinas del frigorífico, Prefectura, que tiene jurisdicción en esa zona, llegó para activar el Protocolo Antipiquetes ya que los demandantes se encontraban obstruyendo la salida de los camiones en el portón del lugar.

Ante la amenaza de desalojar por la fuerza, los trabajadores pidieron tiempo para negociar, pero pocos minutos después los efectivos avanzaron arrojando gases lacrimógenos, lo que generó que una mujer se desmayara y luego su hija, que vio toda la escena, también se descompensó y necesitó ser asistida por sus compañeros, ya que no hubo asistencia de una ambulancia por varios minutos, hasta que finalmente la atendieron.

“Dieron un aumento del 11,3% el lunes. Está todo legalizado. Nos iban a dar el aumento, dijeron que sí, pero después vino el dueño y dijeron que nos daban solo el 1% de aumento. Se reclamó, se paró legalmente con el sindicato. Y nos trajeron a Gendarmería. Estamos todos afuera, todas nuestras herramientas están adentro, no nos dejan pasar, llevaron el pescado a otro lado a trabajar. Hay poca gente, que ya se fue, trabajando”, dijo Claudia, una de las trabajadores que participaba del reclamo.

La mujer, que es filetera, dijo que en el medio del desalojo había “gente hablando con el patrón, hay dos fileteros que están llegando a un arreglo. Vinieron ellos y ya empezaron, con gas pimienta, a reprimir. Son toda gente trabajadora, gente grande, que lo único que pide es el aumento que ya nos corresponde, es nuestro por ley. Somos ochenta personas, somos fileteros, envasadoras, despinadoras, peones, camaristas”.

“Los trabajadores que están bajo relación de dependencia hasta ahora no tenemos ningún inconveniente, no le vamos a permitir que no apliquen el aumento como corresponde, como lo firmamos año tras año. Nosotros los trabajadores reclamamos que se nos pague como corresponde. Acordamos sentarnos nuevamente ahora, después de que se retire Prefectura y va a salir el camión, mientras los trabajadores se van a quedar acá, a la espera de una respuesta”, comentó Cristina Ledesma, secetaria general del Soip.