Milei agendó dos viajes internacionales para enero, incluyendo la asunción de Trump en EEUU
El presidente Javier Milei retomará su agenda internacional con dos viajes estratégicos en las próximas semanas. La primera parada será el 20 de enero en Washington, donde asistirá a la asunción de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos. El Gobierno busca aprovechar esta oportunidad para impulsar un tratado de libre comercio con su principal aliado y accionista clave del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Posteriormente, Milei se trasladará a Suiza para participar en el Foro Económico Mundial de Davos, que se llevará a cabo entre el 20 y el 24 de enero. Este evento anual reúne a 125 líderes mundiales y más de 1.000 CEOs para debatir sobre los desafíos globales. “Está previsto que viaje el Presidente, aunque todavía no hay detalles sobre la agenda ni la comitiva oficial”, indicaron fuentes gubernamentales.
El encuentro en Davos representa una oportunidad para que Milei interactúe con los líderes de los países del G7 y el G20. En su participación anterior, Milei, acompañado por su hermana Karina Milei, Luis Caputo y otros funcionarios, generó impacto al advertir sobre el supuesto riesgo socialista en Occidente, ganándose el respaldo del empresario Elon Musk, actual asesor de Trump.
En esta ocasión, se espera que el mandatario mantenga una reunión clave con Kristalina Georgieva, titular del FMI, para avanzar en las negociaciones de un nuevo programa financiero. El organismo confirmó recientemente que Argentina solicitó formalmente un nuevo acuerdo, y Caputo adelantó que el entendimiento podría cerrarse durante el primer cuatrimestre de 2025.
El Gobierno busca un financiamiento de entre US$ 15.000 y US$ 20.000 millones proveniente del FMI, el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), la CAF, un préstamo repo con bancos privados y otros fondos internacionales. El objetivo es reforzar las reservas netas, que actualmente son negativas en alrededor de US$ 4.600 millones, eliminar el cepo cambiario y refinanciar los vencimientos de deuda en 2025.
Sin embargo, existen desafíos importantes. Por un lado, el FMI es reticente a aumentar su exposición con Argentina, que ya adeuda US$ 44.000 millones del préstamo original de US$ 57.000 millones obtenido durante la gestión de Mauricio Macri. Una alternativa en discusión es un acuerdo con desembolsos graduales durante 2 o 3 años y un período de devolución de 5 a 10 años.
Otro obstáculo es el régimen cambiario y monetario. Milei ratificó recientemente a Forbes su intención de reducir el ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial al 1% mensual, con el objetivo de contener la inflación, antes de avanzar hacia una “flotación limpia” y liberar el cepo cambiario. Sin embargo, esta estrategia genera desconfianza en Washington, especialmente tras las recientes intervenciones del Banco Central para controlar el dólar.
Además, la política cambiaria fue criticada por Mauricio Clever-Carone, referente regional elegido por Trump, quien afirmó que el Gobierno argentino sigue “enfocado en reforzar el peso en lugar de avanzar en la liberalización económica prometida durante la campaña”.
El éxito de esta gira internacional será clave para determinar el rumbo económico de Argentina en los próximos meses y su relación con los organismos financieros internacionales.
