Nación destacó acciones de Urribarri en favor de los pequeños productores
La secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar de la Nación, Carla Campos Bilbao, valoró la intervención del gobernador Sergio Urribarri ante el Ministerio de Agricultura, para resolver demandas de los pequeños productores entrerrianos. “En Entre Ríos, en los últimos años, se ha incluido cada vez más a los productores chicos a las cadenas productivas lo que ha revertido los índices de desocupación en la provincia”, expresó la funcionaria.
La funcionaria nacional brindó precisiones de la Corriente Agraria Nacional y Popular (Canpo), que días atrás lanzó la presidenta Cristina Fernández y donde estuvo presente el mandatario entrerriano.
En ese marco, Campos Bilbao se refirió a las gestiones realizadas por el gobernador Urribarri ante el Ministerio de Agricultura de la Nación y señaló que “él nos pidió en los últimos años inversiones para equipamiento e infraestructura pública, para demandas históricas de los productores de la Federación Agraria, como el caso de la planta de jugos de Villa de Rosario que hace 15 años venían demandando los productores de esa entidad”.
Precisó que el actual gobierno nacional destinó fondos para que el gobernador Urribarri pueda hacer frente a este desafío y demanda de los productores, de tal manera que el Estado junto con la comunidad, a través de distintos instrumentos, vayan interviniendo sobre distintas situaciones. En tal sentido dijo: “Acompañamos desde lo técnico al ministro de la Producción, Roberto Schunk, militante activo de lo que son las demandas de los pequeños productores”.
Bilbao manifestó que la sociedad tiene derecho a saber cuáles son las decisiones de intervención económica para resolver con hechos concretos obras, líneas de créditos, apoyo a cooperativas; “algo que el gobierno de Sergio Urribarri está haciendo junto con el ministro Julián Domínguez y por indicación de nuestra Presidenta, quien tiene como prioridad la atención de los pequeños productores y de los que más débiles están en las cadenas de producción y que, a partir de las diversas crisis financieras internacionales, han quedado fuera de los sistemas de producción”.
Reversión de los índices de desocupación
Asimismo, puso de relieve que en la provincia de Entre Ríos, en los últimos años “hemos incluido cada vez más a los pequeños productores a las cadenas productivas. Esto es un avance muy importante porque es una de las provincias que en su momento había tenido uno de los índices de desocupación más altos. Y el gobernador Urribarri lo viene revirtiendo con distintas estrategias, y desde el Ministerio de Agricultura lo venimos acompañando”.
Atención a demandas de pequeños productores
Canpo es una corriente que se basa en un nuevo concepto de ruralismo, ya que trabaja mancomunadamente con las provincias para atender las demandas de los pequeños productores, incluyéndolos en su regionalidad e identidad productiva; “pone al hombre como centro de toda actividad económica”, explicó Carla Campos Bilbao.
Respecto de la implementación de Canpo en Entre Ríos, dijo que “el día del lanzamiento contamos con la presencia y el apoyo del gobernador Sergio Urribarri con quien venimos trabajando a partir no sólo del Consejo Federal sino también de las propuestas y de las inquietudes que él trajo al Ministerio”. Y añadió: “Cada una de las estrategias de intervención tienen que ver con demandas claras de los pequeños productores, la mayoría de ellos vinculados a Federación Agraria”.
Aclaró que Canpo “se ha puesto más en evidencia y en los medios a partir de que días pasados la Presidenta se refirió a una gran cantidad de referentes técnicos y de la ruralidad argentina, pero es un trabajo que la Argentina viene realizando desde el año 2003 hasta aquí”.
Nueva ruralidad
Sostuvo que después de la crisis profunda social y económica sufrida en el 2001, en donde en cada uno de los rincones del país las economías regionales, los pequeños productores y la agricultura familiar fueron los que garantizaron los abastecimientos básicos para todos los argentinos; se vienen consolidando redes territoriales y organizaciones para sostener la autoproducción y aportar al resto del mundo la posibilidad de exportación de alimentos. Esto se dio en un escenario mundial de escasez de alimentos y aumento de precios, a partir de la crisis que sufrió la Argentina en el 2001. El fortalecimiento del proyecto nacional evidenciado desde el 2003, “fue reafirmado desde la política el miércoles pasado. Fue una alegría que la Presidenta se haya dirigido a toda la población contando con una nueva ruralidad y con un campo presente, organizado y fuerte, a partir de las medidas que está tomando para reinvertir en cada una de las economías regionales; concretamente, para garantizar lo que nuestro proyecto busca y lo que la Argentina necesita que es trabajo genuino”, consideró la funcionaria nacional.
El hombre como centro de la economía
La base de Canpo es “poner al hombre como centro de toda actividad económica, sin que esto sea excluyente de otras estrategias dentro de este modelo que le permite a la Argentina generar divisas para después reinvertir en otras áreas como infraestructura, salud y educación”, sostuvo Bilbao.
Centrar al hombre como el gran beneficiario y el gran articulador de esta actividad económica “es el eje central de lo que hemos venido trabajando no solo en este espacio de reflexión política sino que por sobre todas las cosas son los lineamientos estratégicos y políticos que la Presidenta de la Nación nos definió en el Ministerio de Agricultura y que Julián Domínguez está llevando adelante”.
Se apunta al hombre como centro de la producción y su capacidad de organizarse como mecanismo más genuino, para que la distribución de la renta de su producción sea equilibrada en cada uno de sus eslabones.
El programa también incluye conceptos como: consolidación territorial, identidad de la producción agropecuaria vinculada con el productor, preservación del recurso tierra y del recurso suelo como un bien nacional, respeto de las tradiciones y de las culturas de la producción que garantizan no solo los alimentos sino también su inocuidad y su relación con la historia cultural en la alimentación de cada uno de los pueblos de nuestro país. “Pero por sobre todo poner en valor el trabajo que en algunos casos es hasta artesanal, el trabajo, la mano de obra y la dignidad del trabajador rural en lo que hace a la producción agropecuaria”, afirmó.
Los niveles de rentabilidad que muchas producciones de alimentos están generando en nuestro país ponen de manifiesto el desequilibrio de la distribución de la renta en la cadena, y “también ese es uno de nuestros objetivos de trabajo: que esa distribución de la renta quede no solo en manos de los trabajadores sino también de los productores para equilibrar un poco el ingreso”.
“Es necesario refundar y dar un nuevo nivel de institucionalidad a estos nuevos actores que están apareciendo en la producción agropecuaria de hoy. Aclaremos que el modelo anterior que predominaba y aún sigue estando, está vinculado a los pooles de siembra y a los grupos financieros vinculados a la producción. En lo que hace a la producción de alimentos y desarrollo agropecuario es necesario consolidar e incentivar cualquier forma de asociativismo y de vinculación entre productores para poder diseñar a la carta, de acuerdo a cada una de las regiones del país y de cada una de las producciones, instrumentos no sólo de financiamiento y créditos sino también de riesgo y seguros agropecuarios, y otras instancias de comercialización”, acotó la secretaria.
“Este momento de la nueva ruralización se define con los nuevos actores y las nuevas instituciones que se deben ir creando a partir de una nueva realidad. Más que imponer nuevos modelos, nosotros trabajamos con lo que va surgiendo en cada territorio y generando instituciones y herramientas para que cada una de las regiones puedan ir resolviendo sus propias problemáticas”, manifestó Campos Bilbao.
Articulación con las provincias
También detalló que actualmente en territorio argentino hay alrededor de 2.500 técnicos trabajando desde Ushuaia, el cono Urbano bonaerense hasta Cuyo. “A partir de la estrategia que definió el ministro Julián Domínguez al inicio de su gestión, vinculada a convocar al Consejo Federal Agropecuario, integramos estos equipos técnicos a los equipos técnicos provinciales, tarea que no fue fácil porque históricamente los programas se ejecutaban en cada provincia de manera aislada, bastante distante de la responsabilidad política territorial. Este ha sido un vuelco profundo y rotundo que ha marcado y pedido la Presidenta de la Nación, en su concepto claro y correcto de federalizar cada una de las políticas nacionales”, dijo la secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar.
Por último resaltó que hoy, además de los técnicos del terreno, hay un sinnúmero de actores vinculados a las provincias “que nos permiten ser el Ministerio que más conectividad está teniendo con el territorio”.