Un colegio cordobés prohibió las faldas en los uniformes de las alumnas por “exhibiciones indeseables”

Un colegio de Villa Carlos Paz prohibió las polleras como uniforme y se generó una polémica que derivó en una convocatoria del Ministerio de Educación provincial a una mesa para analizar la decisión en el marco de los acuerdos escolares de convivencia. El Instituto Parroquial Bernando D´Elía inhabilitó el uso de faldas por “exhibiciones indeseables”; los padres de las alumnas apuntaron que esa decisión no está incluido en el reglamento.

Con días marcados por altas temperaturas, el Instituto de Villa Carlos Paz hizo hincapié en la necesidad del “uso responsable del uniforme” y sostuvo que el “mal uso” excede “alguna travesura esporádica”. Las autoridades del colegio consideraron que hay una “persistencia en el uso de una pollera sin el largo establecido”, lo que deja “muslos a la vista” o con dobleces en la cintura que llevan a que las mochilas se enganchen en la espalda hasta subir las faldas a “exhibiciones indeseables”.

Resolvieron así prohibir el uso de faltas y proponer como alternativa para las mujeres el uso de bermudas.

Alertados de esta situación, los padres de las estudiantes realizaron una nota en la que plantearon a las autoridades que “tengan a bien considerar dejar sin efecto la prohibición para que las alumnas de la Institución puedan concurrir a clases vistiendo pollera, teniendo en cuenta la proximidad a la época estival y el ascenso de la temperatura”.

“Al momento de matricular a nuestros hijos para el ciclo lectivo 2024 se nos entregó material oficial de carácter informativo, dónde se nos daba a conocer el uniforme reglamentario, incorporando al mismo por gestión del Centro de Estudiantes – en forma optativa- pollera de gabardina de verano color gris topo”, indicaron.

Y resaltaron: “La decisión de prohibir el uso de tal prenda, no ha sido notificada a los padres o tutores en forma oficial, causando desconcierto y más aún sin tener certeza sobre el real alcance de la medida”. En ese marco, reclamaron una convocatoria para discutir el acuerdo de convivencia escolar, “conscientes de los derechos y obligaciones” que asumieron.

Desde la escuela sostuvieron que la “sanción” no alcanza para la “concientización”. En su propio comunicado admitieron que resolvieron “una medida extrema basada en la necesidad de sostener una normativa”. “En lugar de medir polleras cada día, que evidente e insistentemente no cumplen con lo pautado, [el colegio] ha decidido restringir el uso de polleras desde el mes de abril próximo pasado, planteando esta decisión a cada curso por separado”. La determinación, aseguraron, “fue y es definitiva”.

Tras la polémica y los reclamos de los padres, desde el Ministerio de Educación cordobés indicaron en un comunicado que se abrió una “instancia de diálogo que permita escuchar a todos los actores de la comunidad educativa”. La autoridad educativa será supervisada por la Dirección General de Institutos Privados de Enseñanza (DGIPE) y por los equipos Profesionales de Acompañamiento Educativo (Epae).