Grupos de neofascistas franceses atacaron a manifestantes
|Patrullas de escuadrones neofascistas salieron a las calles en Francia con bates de béisbol, saludos romanos y gritos de “Francia para los franceses”, en contra de los manifestantes que protestan tras la muerte de Nahel, un adolescente de familia iraquí, asesinado el martes pasado a manos de un policía francés.
En algunas ciudades del país, desde Lyon hasta Angers, se informó de bandas de jóvenes neofascistas que tomaron las calles en los últimos días amenazando a los manifestantes -muchos de origen árabe- que participaban en las protestas que desencadenaron enfrentamientos con la policía y algunas vandalizaciones edilicias.
Un grupo fue visto en la noche del pasado domingo en Lyon pero fue inmediatamente rechazado por la policía que dispersó el inicio de la marcha con gases lacrimógenos.
Según la prefectura, los jóvenes “intentaron un operativo frente al ayuntamiento”, informó la agencia de noticias Ansa.
El medio local, Le Progrés, informó que “el grupo de derecha Les Remparts, que llegó desde la ciudad vieja, fue dispersado con gases lacrimógenos”.
Varios videos en las redes sociales muestran a jóvenes gritando consignas como “Estamos en casa” y “‘Francia para los franceses”.
En los últimos días, según un diputado del partido de izquierda La France Insoumise, Thomas Porte, se registraron manifestaciones similares en Chambéry y Angers.
En Angers, en particular, la oficina del fiscal abrió una investigación sobre un grupo que fue captado en video durante una acalorada discusión con los manifestantes sobre la muerte de Nahel.
Según BFM-TV, la investigación por “portar un arma de fuego” atañe, en particular, a jóvenes ultraderechistas filmados la tarde del viernes en el centro de la ciudad equipados con bates de béisbol.
Las chispas saltaron por la tarde, cuando la marcha contra la violencia policial pasó por la rue Cornet, frente a un lugar de reunión de la asociación de extrema derecha Alvarium.
La asociación fue disuelta por las autoridades, pero sus miembros continúan reuniéndose en el club y protagonizaron violentos enfrentamientos con manifestantes encapuchados durante tres o cuatro minutos el viernes.
Videos testimoniales que circulan en las redes sociales muestran a un hombre golpeado y dejado en el suelo.
Por el momento no hay denuncias pero los investigadores siguen analizando los videos.
Los disturbios
En los últimos días, Angers se vio gravemente afectada por la violencia, especialmente en la noche del viernes al sábado, con incendios frente a la comisaría del distrito de Monplaisir, así como frente al ayuntamiento y un centro para el desarrollo de pequeñas y medianas empresas.
Numerosos autos también fueron quemados. Once personas fueron detenidas y un policía resultó herido.
Los disturbios estallaron el martes pasado por la noche tras el crimen de Nahel M, un adolescente de 17 años a quien un policía disparó a quemarropa durante un control de tránsito en un suburbio de París, escena que fue captada por una cámara.
Hasta el pasado domingo, la violencia dejó 3.200 detenidos, más de 700 agentes heridos, unos 5.000 vehículos incendiados, 10.000 basureros quemados y casi 1.000 edificios dañados, detalló el Ministerio del Interior.
El policía de 38 años que le disparó a Nahel M. se encuentra detenido desde el martes, acusado de homicidio voluntario.
El asesinato de Nahel reabre el debate sobre el racismo sistémico que se registra en sectores de la sociedad francesa.
Jean Messiha, un exvocero del político ultraderechista Éric Zemmour, creó un fondo para atraer donaciones en apoyo a la familia del policía que mató a quemarropa al joven hijo de inmigrantes.
Hasta este lunes, se contabilizaban unas 50.600 donaciones y el fondo llevaba recaudados más de un millón de euros (casi 1,1 millones de dólares).
En el sitio Leetchi, otro fondo en apoyo a la familia del policía recaudaba por su parte casi 60.000 euros (65.000 dólares).
La creación y el éxito de estos fondos provocó la indignación de la oposición de izquierda.
Otro fondo, en este caso en apoyo a la familia de Nahel, la víctima, contaba con casi 200.000 euros (unos 218.000 dólares).