Los puntales de la gestión de Alberto Fernández en la Antártida argentina
|El Gobierno nacional diseñó desde 2019 una política de acciones en busca de “afianzar los derechos argentinos de soberanía en la Antártida” argentina, como parte de una estrategia nacional.
La centralidad de la gestión del presidente Alberto Fernández pasó por la ejecución de las campañas antárticas de verano, entre octubre y abril de 2019-2020, 2020-2021, 2021-2022 y 2022-2023 (esta última en curso), indicaron a Télam fuentes de la Cancillería.
Asimismo, se conformó el Centro Interinstitucional en Temas Estratégicos Antárticos y Subantárticos (Citeas) en Ushuaia, integrado por el Instituto Antártico Argentino dependiente de la Cancillería (IAA), el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet)y la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur (Untdf), entre otros organismos.
El objetivo es la generación de conocimientos básicos y aplicados en temas estratégicos de la región antártica y subantártica, aportando información científica para la toma de decisiones de políticas públicas, el desarrollo de tecnologías para el manejo de los recursos naturales y servicios, y el resguardo de su patrimonio cultural y natural.
También, la creación de la subsede de la Secretaría de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur de la Cancillería en Ushuaia para optimizar las funciones y los servicios que cumple el Estado argentino en relación con la soberanía sobre Malvinas.
Otro puntal es la creación de “Laboratorios Antárticos Multidisciplinarios” para ampliar las capacidades de infraestructura de los laboratorios administrados por el Instituto Antártico Argentino en las bases antárticas Orcadas, Esperanza y San Martín y los Refugios Vega y Cerro Nevado, con una inversión de 200 millones de pesos implementada en el marco del programa “Construir Ciencia” del Ministerio de Ciencia en coordinación con la Cancillería y el Ministerio de Defensa (en curso).
Igualmente, la presentación de la Cancillería ante la Secretaría del Tratado Antártico de la Evaluación Medioambiental Global correspondiente a los trabajos de reacondicionamiento de la Base Petrel, que deberá ser evaluada por las Partes del Tratado Antártico y de su Protocolo sobre Protección del Medio Ambiente durante su reunión de fines de mayo de 2023.
Se suma a ello el desarrollo del ciclo “Cultura es Soberanía” del Ministerio de Cultura con una agenda artística con diversas actividades destinadas a la población que reside en la Antártida mediante presentaciones teatrales, musicales, de danza y de cine para “promover el bienestar” de quienes cumplen funciones en la Antártida.
También, el establecimiento de un espacio cultural de la Biblioteca Nacional en la Base Carlini que proveerá material de lectura para esparcimiento, como parte de la política de federalización de esa institución.
Otra medida será el incremento del servicio de telecomunicaciones satelitales de Arsat a las bases antárticas nacionales, que se suma al ya existente en las bases Carlini, Marambio, Esperanza y Orcadas.
Y, finalmente, la ejecución de un programa de telemedicina para quienes trabajan en las bases antárticas argentinas.
En sintonía, el Gobierno nacional trabaja en la elaboración de una “estrategia nacional antártica (solo existen planes anuales antárticos) que permitan proyectar en el tiempo una acción coherente, eficaz y productiva de la presencia antártica de Argentina de acuerdo a los nuevos desafíos y realidades geopolíticas internacionales”, sintetiza un documento de la Cancillería.
También “se propondrá la redacción de una nueva Ley Antártica (la vigente es de 1969) que refleje jurídicamente estas decisiones y prioridades”.