Guillermo Alfieri intacto… Dio cátedra en la Cámara Baja
Diputados rindió un homenaje a la trayectoria del periodista Guillermo Alfieri quien, tras recibir una placa recordatoria instó “a seguir soñando, aunque sea contra la corriente” y reclamó por una coparticipación federal “porque resulta llamativo que no se cumpla la claúsula de la reforma constitucional de 1994”.
Alfieri recibió de manos del presidente de la Cámara Baja, Jorge Busti, una placa en homenaje a su trayectoria y aportes ciudadanos , ocasión en la que el ex gobernador ponderó la relación “transparente y cristalina” que tuvo con el periodista con quien “nos conocimos a comienzos de la democracia luego de un injusto cautiverio”.
“Yo puedo hablar con tranquilidad porque fue un crítico severo de nuestro gobierno” reseñó Busti. “Uno le tenía un profundo respeto porque lo hacía desde una gran honestidad intelectual. Teníamos distintas visiones de la realidad porque así se hace la democracia pero con un gran respeto” rememoró el diputado quien reconoció “revisar los temas pendientes a las 6 de la mañana, era un desafío, porque era un análisis meticuloso en cada renglón de la realidad provincial. Meticuloso y observador” reafirmó el legislador.
El prestigioso periodista distinguido Alfieri, puso de relieve la presencia “no solo de los representantes, sino de los representados” ya que los palcos se encontraban repletos con trabajadores de la construcción, del Instituto autárquico Provincial de la Vivienda (IAPV) y de la Asociación de Celíacos ansiosos por que se cristalice la aprobación de leyes convenientes a la ciudadanía. “Ojalá este acto sirva para que surja la mejor conciliación posible que contemple los intereses de las partes porque este es el ámbito adecuado para enfrentar los diferendos”, consignó Alfieri.
En lo más sobresaliente de su alocución, Alfieri reflexionó “El periodismo que exige constantemente encontrar respuestas a porqué pasa lo que pasa, cada acontecimiento tiene sus porqué, sus causas y sus precedentes. Por eso corresponde a un buen periodista, investigar, explorar y describir la historia. Nos remitimos al buen periodista para no aguar la fiesta. Los demás, como escribió Roberto Arlt, son empelados domesticables que la única prueba que superan es la de la docilidad con nota sobresaliente”.
En ese sentido, amplió el pensamiento: “La fuente principal de nuestro conocimiento periodístico son los otros. Los otros nos dan sus opiniones, sus emociones, sus anhelos que intentamos comprender y mostrar. Por eso coincidimos en que para ejercer el periodismo hay que ser ante todo un buen ser humano. Al que le interesen los otros, el que se enlaza con los intereses de so otros, el que tiene sus objetivos en que haya algún tipo de cambios en un sistema injusto. Hasta un legítimo conservador debería desconfiar de un periodista conservador”.
Seguido con sumo interés por un auditorio enmudecido y hasta con un clima de admiración por los conceptos esgrimidos, Alfieri trazó un paralelismo entre el periodismo y la política manifestando que “es imprescindible entender las causas del desprestigio de la política cuando se trata de politiquería arrastrando en la confusión del lenguaje a los políticos. A riesgo de que el malentendido es malicioso y lo fomentan los beneficiarios de un sistema que nos quieren dispersos con los lazos comunitarios dislocados, hundidos en el ritmo individualista”.
Con un discurso, rico en matices y consideraciones algunas anecdóticas y otras de plena actualidad, Alfieri no podía evadir su tradicional tono crítico y aseveró: “Entre los tantos debates que nos debemos representantes y representados, figura el de la Coparticipación Federal Impositiva distorsionada desde 1933 por un decreto de Necesidad y Urgencia. Es llamativo que no se cumpla con la claúsula transitoria de la reforma de 1994 que es una norma clave del federalismo. Por legado histórico Entre Ríos debería ser punta en esta discusión”.
En el tramo final de su disertación contó que “Acepté este acto porque, en una de esas, sirve para crear una hendija en la mirada unidireccional con la que se contempla el ombligo en Buenos Aires”.
Y concluyó con un remate que despertó un estentóreo y simultáneo aplauso: “recuerdo que al periodista Osvaldo Bayer le pusieron ante sus ojos una foto suya cundo tenía 18 años. A los 71 le preguntaron a Bayer qué le diría y dijo: Hice lo que pude, pero prometo seguir soñando. Solo agregaríamos, seguir soñando, aunque sea contra la corriente”.