El presidente de la Cámara Argentina de Comercio critica agudamente las inspecciones de militantes
|“La verdad que nos preocupa que lleguen militantes a nuestros negocios”, dijo esta mañana el presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Mario Grinman, al referirse al control de precios que impulsa el gobierno nacional. En similar sintonía, y con el mismo tono crítico contra la medida, se había expresado ayer la titular de la federación que agrupa a los supermercados chinos.
“No corresponde, carecen de la formación necesaria y de la objetividad necesaria para realizar controles. Puede llegar a suceder alguna situación compleja”, advirtió Grinman en diálogo con radio Mitre.
El empresario fue crítico con la medida, sobre todo por el hecho de que sean organizaciones sociales las que se ocupen de chequear si se cumplen los precios estipulados. “No nos molestan los controles realizados por las autoridades competentes”, dijo Grinman.
“Es una sensación de déjà vu. Los congelamientos de precios son herramientas que no funcionaron, no solo en la Argentina, sino en ningún lugar del mundo”, prosiguió el líder empresarial. “Es como si alguien tiene fiebre y para disimularla pone el termómetro en la heladera”, agregó.
“Lo que congeló la nueva disposición son los precios de salida, pero no los de inicio. Entonces, en la cadena pasando por 20 o 30 proveedores es altamente probable que cuando llegue encuentre productos a precio mayor de reposición del que aparece a la lista. Nadie va a comprar un producto a 100 para vender a 90, ese altruismo no existe”, dijo Grinman.
Ayer, Yolanda Durán, presidenta de la Cámara de supermercados chinos, había contado que “el fin de semana pasaron por todos los mercaditos de proximidad de distintas municipalidades a amedrentar con 10 o 12 inspectores en espacios de 200 m², tomando notas de los precios”. “Estamos asustados. No puede ser que nos manden a los militantes a los supermercados”, dijo la referente.