“Rediman la condición política” aconsejó Karlic a Zacarías
|El Lic. Juan Domingo Zacarías fue el único legislador presente durante los oficios eucarísticos enmarcados en la celebración de la Fiesta Patronal de Paraná, en honor a Nuestra Señora del Rosario. Concluida la ceremonia, el diputado provincial saludó al Cardenal Estanislao Esteban Karlic quien fraternalmente le transmitió una reflexión inherente al rol que debería tener la clase política argentina.
“La política es un servicio social y ustedes deben fomentar el bien común, evitando un estilo de hacer política dominante, redescubriendo la significación espiritual del valor del trabajo para el hombre. El trabajo dignifica al hombre. Lo dignifica porque lo realiza, vive la verdad, la dignidad de su condición humana. Aboguen por desentrañar ese espíritu solidario, sean capaces de educar, la vida se transmite por contactos y por testimonios. Por eso vayan con ideas, no con habilidades pragmáticas para ganar elecciones”, aconsejó con un gesto cordial.
“Rediman la condición política, sean redentores de la política, para demostrar como la política es un servicio formidable. Pío XI decía que es una de las expresiones más altas de la caridad, es uno de los ejercicios exquisitos de la fraternidad. Rediman y no se dejen maltratar, cuando digan un político esta buscando plata y poder, no señor, esta buscando servir, rediman eso y aquí se puede aunque deben dar el ejemplo, cabal testimonio de lo que debería ser una sana vocación por el prójimo”, dijo Karlic ante la atenta mirada del diputado Juan Domingo Zacarías.
En el breve aunque muy emotivo encuentro, el legislador rescató la permanente preocupación de la Iglesia Católica sobre temas que hacen a la erradicación de la pobreza y a la promoción del desarrollo integral y se comprometió a reafirmar su actividad legislativa y futura gestión política en defensa de la vida de cada persona en todas sus etapas, desde la concepción hasta la muerte natural; el respeto de la dignidad de la familia; la búsqueda de la reconciliación, el diálogo y la prudencia como herramientas permanentes para consolidar y defender las instituciones del sistema democrático procurando el bien común.
Luego de estrecharse en un conmovedor abrazo, Zacarías deseó con lágrimas en los ojos “Dios todopoderoso siga iluminando su camino cardenal, tanto en la fe como en el permanente compromiso como servidor de Dios ante el hombre y con la humildad que siempre lo ha destacado”.