Los trabajadores de Paraná Metal vuelven a la ruta
Los empleados de la autopartista decidieron este mediodía retomar y acentuar los cortes de rutas en la zona aledaña a esa fábrica ante el fracaso de las tratativas para una solución del conflicto laboral por la preservación de puestos de trabajo.
La decisión fue comunicada por la seccional Villa Constitución de la UOM en razón de la ausencia de la parte empresaria a una reunión en el Ministerio de Trabajo de la Nación, en principio prevista para la firma de un preacuerdo que se había alcanzado en la víspera. Voceros de la UOM detallaron que “transcurridas mas de dos horas de espera en la sede de la cartera de Trabajo, los empresarios de Paraná Metal no se presentaron para la firma del preacuerdo alcanzado ayer para superar el conflicto”.
Al respecto agregaron que “ante esta actitud irresponsable de los directivos, que implica una burla a la buena fe de los trabajadores y los funcionarios del Ministerio, se resuelve mantener y profundizar los cortes de la ruta provincial 21 (ex nacional 9) y los caminos alternativos paralelos a la Autopista Buenos Aires-Rosario”. También advirtieron que los cortes se extenderán a “otras rutas de la zona”.
Los directivos de Paraná Metal, cuyo principal directivo es Cristóbal López, no se presentaron a la reunión en Trabajo, para la cual sí se presentaron dirigentes de la UOM Villa Constitución, delegados de la Comisión Interna y la viceministra de Trabajo de Santa Fe, Nora Ramírez.
En las horas previas a dicha reunión los trabajadores de la autopartista flexibilizaron los cortes de las colectoras, la ruta provincial 21 y caminos alternativos, pero mantuvieron el bloqueo de la autopista Buenos Aires-Rosario, a la espera de la firma de la carta de intención que podría destrabar el conflicto que lleva un mes y medio de tratativas en el Ministerio de Trabajo.
El acuerdo procurado para levantar la protesta implicaría un sistema de suspensiones rotativas que incluirían a las dos terceras partes de los 900 operarios, quienes cobrarían un subsidio de unos 2 mil pesos y tendrían que cursar una capacitación de trabajo, en tanto que otros 360 trabajadores ingresarían en una primera etapa a prestar servicios.
También, el pago de las quincenas atrasadas tendrán un aporte del gobierno nacional, y los trabajadores que decidieran no continuar la relación laboral cobrarían una indemnización en efectivo del 100 por ciento.