La presidenta de la Asociación de la Magistratura expresó que frente a Castrillón el STJ actuó “como Poncio Pilatos”
|Gabriela López Arango, presidenta de la Asociación de la Magistratura y la función judicial, afirmó que los integrantes del Superior Tribunal de Justicia (STJ) actuaron “como Poncio Pilatos” y “se lavaron las manos” al tener que resolver la presentación de la entidad en contra del vocal Emilio Castrillón. Equiparó al Alto Cuerpo con una monarquía donde “los reyes son intocables”.
Con respecto a la decisión del Superior Tribunal, que decidió no intervenir en la presentación que la Asociación hizo en contra de Castrillón, López Arango afirmó: “Nos llama mucho la atención la decisión del Alto Cuerpo, que viene bien para la época que acabamos de pasar de Semana Santa porque parece lo de Poncio Pilatos. No se hacen cargo y se lavaron las manos”, opinó en declaraciones al programa “Aire de Todos” (FM Costa Paraná).
“Todos integramos el Poder Judicial y nos debemos normas de conducta. Pareciera que estamos en un reinado donde los reyes son intocables”, añadió. Al respecto, recalcó: “La lectura que hacemos es que cualquier vocal del Superior puede hacer lo que quiera porque, total, entre ellos nunca se van a juzgar las conductas”, pero reconoció que estas acciones no son causal del inicio de un proceso de destitución.
López Arango había especificado: “Nosotros lo que reprobamos (a través de un comunicado emitido el lunes) es lo que todos vimos en las redes, donde observamos una actitud indecorosa de un magistrado en la puerta de su domicilio con insultos y frases discriminatorias. No hablamos de los hechos que habrían ocurrido dentro del kiosco, por supuesto que eso está en etapa de investigación”.
“A raíz de este comunicado, dos mujeres integrantes de la Comisión Directiva recibimos mensajes de Whatsapp del teléfono del Dr. Castrillón. En mi caso fueron irónicos, (referidos a) todo el odio que le tenía la comisión. No odio y no está (Castrillón) en la lista de los que podría llegar a odiar”, puntulizó.
La presentación que realizó la entidad ante el Superior buscaba que se investigue el accionar del vocal Castrillón al haber enviado esos mensajes (considerados intimidantes) a los teléfonos particulares de los integrantes de la Asociación.