Independiente le ganó a la “Lepra” 2 – 0
|La justicia es un concepto que el fútbol no conoce. Independiente Rivadavia fue más dentro de lo que poco que se hizo en un típico partido de pretemporada que Independiente de Avellaneda. El resultado no condice con lo exhibido por el equipo de Trotta pero sirve de antesala para la carrera de casi cuarenta fechas.
La justicia es un concepto que el fútbol no conoce. Independiente Rivadavia fue más dentro de lo que poco que se hizo en un típico partido de pretemporada que Independiente de Avellaneda. Pero el Rojo pegó en los momentos justos y se terminó llevando demasiado premio.
El primer tiempo fue dentro de todo parejo, Fileppi se asoció con los delanteros del equipo de Trotta y pudo crear alguna clase de peligro, incluso con disparos desde afuera del área que erigieron a Hilario Navarro, el arquero del Rojo como la figura de la cancha.
El equipo de Garnero, desganado y desordenado poco pudo arrimar al arco de Ayala que estuvo firme casi hasta el final del partido. En el arranque del segundo, la cosa se empezó a inclinar a favor del Azul gracias a la buena tarea primero de Peralta y luego de García que se sumaron a Velázquez y a Ferradas, el más peligroso pero que anduvo sin puntería, en el ataque de los mendocinos.
En la línea defensiva el partido fue óptimo para los de Azul. Moroso de superlativa actuación, se adueñó del andarivel derecho y tuvo criterio para salir jugando. Menghi y Méndez acertaron en la mayoría de las acciones y mostraron casi las mismas ganas que el Colorado, Mainguyague, otro de correcto partido.
Las sociedades parecieron estar claras y permiten imaginar un equipo tan combativo como creativo, todo supeditado claro al actuar en un torneo que no será facil y donde los rivales de fuste llegarán uno a uno.
Cerca del final, después de que la Lepra se floreará con pelota dominada y varias acciones claras, llegó el desenlace del encuentro. Pellerano probó a Ayala que respondió mandando al corner con una gran atajada. Pero cuando cayó el centro el arquero falló y Velazquez, de cabeza, puso el 1 a 0. Poquitos minutos después Mancuello marcó en un contragolpe cuando la Lepra estaba jugada en busca del empate.
La Lepra desde el campo coloreó de Azul una nueva ilusión para sus hinchas. El resultado no condice con lo exhibido por el equipo de Trotta pero sirve de antesala para la carrera de casi cuarenta fechas que estos once intentarán terminar con su bandera en lo más alto.