Anticipan que el desempleo se agudizará en los dos dígitos antes de las PASO
La desocupación a fin de 2018 fue de 9,1%, en un escenario de devaluación, aceleración inflacionaria, y caída de la economía de 2,5%, pero el panorama del mercado laboral es más desalentador este año. El nivel de desempleo en 2019 superará esa cifra, será el más alto de la era Macri, y registrará un pico de dos dígitos en la primera mitad del año, previo a las elecciones primarias, según el diagnóstico de analistas.
La desocupación promedio anual rondará 9,4%, estimó Guido Lorenzo, de LCG, en tanto Matías Rajnerman de Ecolatina calculó 9,7%, y la previsión del equipo de Research del BBVA es 9,9%. Todos coinciden en que aun cuando la actividad económica mostraría una recuperación a partir del segundo trimestre impulsada por el agro debido a una mayor cosecha frente a la sequía de 2018, el empleo no mejorará en la comparación interanual. Explican que ese rubro “no es un gran generador de fuentes laborales”. En cambio, prevén que las ramas intensivas en la contratación de mano de obra como la industria y el comercio “seguirán en rojo porque el salario real estará en niveles bajos”.
El dirigente de la UIA, José Urtubey, consultado por los colegas de Perfil, indicó que “en el sector industrial, desde 2015 se perdieron más de 120 mil puestos laborales”, y evaluó que “hay que incentivar el empleo a partir de otorgar beneficios fiscales a quienes empiecen a generarlo, fortalecer el frente productivo bajando impuestos, trabajando en líneas de crédito”. Rajnerman planteó que “una de las herramientas para asegurar el empleo es estimular el consumo interno, porque los sectores que son mercadointernistas, como la industria y comercio, son los que demandan más rápidamente trabajadores”.
Lorenzo acordó que “el sector servicios es uno de los que más contrata, y si hay escaso dinamismo en el mercado doméstico, no habrá crecimiento de empleo”. Según un relevamiento de ManpowerGroup sobre expectativas netas de empleo para el segundo trimestre de 2019, el rubro comercio es el que muestra la peor intención con -5% en relación con los tres meses previos, y una caída de 10 puntos en la comparación interanual, mientras que en el sector manufacturas esos guarismos son de -1%, y -8%, respectivamente.
Pico
Para el BBVA el pico de desempleo será de 11% y se evidenciará en junio, en plena campaña electoral antes de las PASO. Las cifras de desempleo de los cuatro los trimestres de este año serán peor respecto de igual período de 2018: 10%, 9,8%, 9,5% y 9,7%, según Ecolatina. El coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA, Luis Campos, estimó que “en el primer y segundo trimestre la desocupación superará el 10%”, auguró un año de mucha conflictividad laboral”, y advirtió que “crecerá la precarización ocupacional y el empleo informal”. Según los datos del Indec, el trabajo informal a fines de 2018 se ubicó en 35,3%.
El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, reconoció días atrás que el nivel de informalidad “hace difícil que se puede perforar el piso de pobreza de 30%”, y abogó por “modernizar el sistema de relación laboral” al afirmar que “hay mucha grasa para cortar” en los convenios laborales. El Gobierno se abocó a la contención. El Programa de Recuperación Productiva (Repro), que otorga una suma fija mensual remunerativa que integra el sueldo por 6 meses (para las empresas con menos de cien empleados es de $ 4 mil, y con más de cien trabajadores es de $ 3.500). En 2018 hubo 56.867 trabajadores cubiertos, y en 2017 había alcanzado a 80.844. Esa diferencia se debe a que “se transparentó el proceso de otorgamiento porque en la gestión anterior existía una sobreutilización del mismo”.
La UOM, con 20 mil suspensiones
La industria perdió más de 120 mil puestos de trabajo desde el cambio de gobierno y los gremios metelúrgicos sintieron el impacto. El secretario general de la UOM, Antonio Caló, señaló que “desde 2014 la UOM perdió 50 mil puestos de trabajo y ahora hay 20 mil suspensiones” en los establecimientos metalúrgicos. “Todas las semanas tenemos cierres”, dijo. En las últimas semanas, hubo acuerdos con empresas del sector para reducir la jornada laboral a 6 horas a cambio de evitar cesantías, según relató en declaraciones a AM 750.
El gremio tiene previsto pedir un aumento salarial de “al menos” el 44% de modo tal de “empatar la canasta básica” al llevar el mínimo del rubro de 18 mil a 26 mil pesos. Sobre la discusión de las mesas sectoriales que promueve el Gobierno, Caló consideró que “no se quiere hablar de productividad sino de ausentismo o de que hay muchos delegados” y advirtió que no participará más si esos siguen siendo los temas de discusión.
Para los gremios, la crisis agrava la falta de aportes a las obras sociales y señaló que los empresarios le deben $ 1.000 millones. En ese marco, anticipó que llevará a los deudores a la Justicia. Sobre la marcha del próximo 4 de abril convocada por la CGT y el sindicalismo opositor y dijo que es “a favor del trabajo”.