La comunidad judía inicia la conmemoración del Rosh Hashaná
|Cuando llegue el atardecer y se ponga el sol, la primera estrella en salir marcará el inicio del año nuevo judío dando la bienvenida al 5779 para la colectividad. Las tradiciones de esta fecha marcan el acervo socio-cultural y la unión familiar que identifica a los judíos. Rosh Hashaná significa en hebreo “cabeza del año”, el primer día del calendario hebraico. La fecha fue establecida según el judaísmo rabínico para conmemorar la creación del universo.
En este período cada integrante de la comunidad realiza una introspección para reflexionar cuánto han mejorado como personas durante el año que culminó y cuánto les queda por mejorar.
Este día los judíos se saludan diciendo “Shana Tová”, lo que significa “Buen año” y expresan a sus pares el deseo de un “Año nuevo dulce”.
En las sinagogas los cultos comienzan por la mañana con el sonido del shofar, un cuerno que funciona como instrumento de aire. A este momento lo denominan “Iom Truá”, “el día de toque del shofar”.
El cuerno de carnero se toca durante la plegaria matutina llamando al hombre a una reflexión en tres escalas espirituales: teshuvá (retorno) con uno mismo, mediante la tefilá (plegaria) en comunicación con Elohim, el Creador, y con el prójimo a través de la tzedaká (justicia con el semejante).
Las familias comparten comidas típicas, como la manzana untada con miel para “tener un año dulce”, o un pan redondo que representa el ciclo de la vida. Rosh Hashaná da inicio a diez días de arrepentimiento que culminan con Iom Kipur. El Día del Perdón se celebra desde la tarde del martes 18 de septiembre, donde se ayuna.
También se lo conoce como el Día del Juicio, el día que Elohim juzga a los hombres abriendo tres libros: el primero con los malos que quedan inscriptos en el libro de la muerte, el segundo con los buenos que quedan en el libro de la vida, y el tercero, para los que serán juzgados en Iom Kipur.