Una Municipalidad de Paraná inmutable
Peatonal y Andrés Pazos. Una empresa de venta de electrodomésticos y demás productos de alta tecnología despliega toda una logística ilícita para que camiones de transporte de mercadería estacionen -quebrantando normas- para cargar y/o descargar mercancías que allí se ofrecen, causando perjuicio de toda índole en el área. La Municipalidad de Paraná, NADA. Hasta conos se colocan, estableciendo una especie de perímetro y los camiones suben a la vereda delante de una inspectora. El descontrol e indefensión es notable.
La Municipalidad de Paraná ha ingresado a un período en el cual se permite todo a nivel tránsito vehicular. Sobran cuestionamientos, pero en este caso vamos a la médula de una problemática que hace rato venimos observando: el estacionamiento ilícito de camiones de transporte de toda clase de artículos, en especial en zona del macro y microcentro de esta Capital.
Empresas y comercios imponen la Ley de la Jungla y no interesa cuánto daño se genere. Son varias, de todos los rubros. El desparpajo con que actúan camioneros y empleados es execrable, pero… tienen la “aprobación” de una Comuna que no actúa con el rigor imprescindible.
La Gestión Varisco, como si hubiese algún hipotético acuerdo espurio, no procede y permite este atropello. No hay atenuantes. La indolencia comunal es condenable.
Lo paradójico es que seguimos reafirmando: hay horrores que no contempla el intendente, pero no solo ahora, envuelto en una causa judicial gravísima, sino desde su propia asunción.
Es como que Varisco delegó y confió ciegamente. Así estamos… Así está… ¿No será hora que reaccione?
Toda clase de camiones se suben a veredas y las destrozan como impiden el paso de peatones mientras el ciudadano común contempla azorado este abuso sin penas, sin castigos.