Cristina en Cadena con Scioli: “Hemos hecho más de lo que hemos dicho”
|La presidenta destacó que “recorriendo la historia reciente y no tan reciente de los argentinos, no sé cuántos gobiernos pueden decir que han hecho más de lo que han dicho”. Lo dijo durante la inauguración del Banco Nacional de Materiales Controlados del Registro Nacional de Armas.
La presidenta Cristina Kirchner destacó ayer que la Argentina haya vuelto a “acceder al mercado de capitales, a tasas razonables” al referirse a la emisión del Bonar 2024 por más de 1.400 millones de dólares, y en alusión a quienes recomendaban acordar con los fondos buitre sostuvo que “para hacer funcionar un país no hace falta arrastrarse, se necesita dignidad”.
La mandataria resaltó además que desde el gobierno nacional se ha hecho más de lo que se ha dicho y advirtió que “recorriendo la historia reciente y no tan reciente de los argentinos, no sé cuántos gobiernos pueden decir que han hecho más de lo que han dicho”.
Desde San Martín, al dejar inaugurado el edificio del Banco Nacional de Materiales Controlados del Registro Nacional de Armas (Banmac), la Ppesidenta expresó que “ha sido al revés: han dicho más de lo que han hecho” y afirmó que “uno de los desafíos de la democracia argentina y de la gestión del Estado es bajar de los discursos a los hechos y las realidades”.
En ese marco resaltó que el Bancam es “el único” en todo el país y “el más grande de toda América”, y señaló que “para lograr políticas de desarme se requiere la decisión de hacerlo, los recursos y la realización en sí”.
Asimismo, remarcó que “este gobierno ha destruido más armas que ningún otro gobierno en ninguna otra etapa” y anunció que en los próximos meses se llegará a la destrucción de 300.000 armas. Durante el discurso transmitido por cadena nacional, la mandataria subrayó la inversión que destina el gobierno nacional en la lucha contra el narcotráfico y exhortó al Poder Judicial a que dote de mayor cantidad de empleados y recursos a los juzgados para que puedan hacerlo “eficazmente”.
“En lugar de dar tantos discursos contra el narcotráfico, los máximos responsables del Poder Judicial deberían dotar a los juzgados federales y limítrofes de mayor cantidad de empleados, recursos y elementos para que puedan hacerlo eficazmente”, dijo la presidenta.
Por otra parte, celebró que la Argentina haya vuelto a “acceder al mercado de capitales, a tasas razonables” por haber “honrado la deuda” en vez de “honrar la usura y la estafa internacional”, representada por los fondos buitre.
De esta manera, Cristina hizo referencia a la emisión del Bonar 2024 por 1.416 millones de dólares, en una licitación donde se recibieron ofertas cuatro veces por encima de la cifra buscada y se aceptó el triple de lo anunciado.
En este sentido, reafirmó que “nadie” la va a “extorsionar”, que no tiene “ninguna cuenta” para que le descubran, y, dirigiéndose a aquellos que vaticinaron debacles para la Argentina por no haber acordado con los fondos buitre, sostuvo que “a esos papeles se los llevó el viento y, también, la realidad”.
“La realidad es que hace pocos días Argentina volvió a acceder al mercado de capitales, a tasas razonables”, expresó desde esa localidad bonaerense y sostuvo que “para hacer funcionar un país, una economía, y para que la gente tenga trabajo para que pueda consumir, no hace falta arrastrarse, se necesita dignidad”.
Acompañada por los ministros de Seguridad y de Justicia, María Cecilia Rodríguez y Julio Alak; el secretario de Justicia, Julián Álvarez; el gobernador bonaerense Daniel Scioli, intendentes de la provincia, y otros funcionarios nacionales, la presidenta dijo también que “el espacio político” que conduce “tiene historia y los hombres y mujeres que van a continuar profundizando y mejorando” las políticas iniciadas en 2003.
Antes de su discurso, la presidenta inauguró, a través de videoconferencias, el nuevo Laboratorio de Investigación Forense en Santiago de Estero; la ampliación de la línea de producción de fiambres y embutidos de la firma brasileña BR Foods en la ciudad bonaerense de Baradero, y dos hornos pirolíticos en San Miguel, provincia de Buenos Aires, destinados a la eliminación de drogas secuestradas por las fuerzas de seguridad federales.