Paraná y otro rival a punto de caer
|Complicado por el terreno de juego, ríspido, borrascoso por las características del adversario. Así fue el duro cruce inicial ante Camba Cuá de Santa Elena, el cual Atlético Paraná supo sortear con oficio. Otra instancia de arranque auspiciosa para el Decano que vuelve a la capital con un 3-0 favorable pensando en el fin de semana próximo cuando pueda resolver sin angustias en su feudo.
Leonardo Acosta, 31’ del primer tiempo; Martín Galli y Joaquín Cabral, a los 16’ y 38’ del complemento, respectivamente, marcaron los goles del Rojiblanco. En tanto Diego Casals, a los 43’, se perdió el descuento para el anfitrión al marrar un tiro penal.
Los últimos 15’ del encuentro se jugaron bajo una lluvia torrencial, que en dos minutos prácticamente inundó el campo de juego y conspiró aún más con un trámite de por sí desprovisto de un buen nivel técnico.
Fue Camba Cuá quien se paró mejor en el arranque, seguramente aprovechando el conocer un terreno de juego de estrechas dimensiones, y mediante el triunvirato Lescano-Luque-Romero dominó el transcurso ante un adversario que no tuvo un afortunado comienzo de parte de Lencioni-Acosta-Barrientos por lo cual no extrañó que el cuidapalos Rojiblanco sufriera trastornos en no menos de tres ocasiones a lo largo de la primera media hora vía Romero y Casals en dos ocasiones.
En la respuesta ofensiva forastera, fue Todoro el más incisivo, no obstante Tony adoleció de un compinche que le permita otorgar fluidez a los avances capitalinos del equipo orientado por Daniel Veronesse.
Y la injusticia se hizo presente segundos después de pasar dos sofocones casi simultáneos.
Iban 31 cuando se proyectó Avila por derecha, metió centro al área y Cabral le bajó la pelota con la cabeza a Acosta, quien fabricó una media tijera y sometió a Núñez congelando a los santaelenenses dentro y fuera del rectángulo.
El gol conmocionó a Camba Cuá y Atlético Paraná se sintió más cómodo. El local era puro nervio, la visita manejaba esa ansiedad más allá de perder a Todoro por lesión poco después de casi estirar las cifras con un misil que se fue lamiendo el palo izquierdo.
Antes de expirar el primer capítulo, en otro tiro libre ejecutado por Romero estuvo la ocasión de igualar, pero el arquero Decano sacó al corner el balón que parecía ingresar indefectiblemente a la valla Albirroja.
El descanso sirvió para que Lencioni y Acosta recuperen el fuego sagrado, y junto a las avanzadas de Ávila como a las estocadas que con sus pases producía Alzugaray, Lazaneo y Cabral produzcan un desequilibrio superior ante el área del CC.
Y era previsible el incremento en los haberes foráneos; así Galli capitalizó un centro de Alzugaray al segundo palo y con perfil interno de pie derecho mandó la redonda a seducir la red. 2 a 0 y delirio para el grupo de simpatizantes paranaenses como desazón para los dueños de casa.
Camba Cuá no declinó, y más allá de ser poco claro, provocó inquietud con un par de disparos desde fuera del área, uno con pelota detenida, mediante Simón y Zavalla.
La lluvia llegó y empeoró el nivel técnico de por sí discreto, pero la tensión local pagó caro precio y Paraná amplió la brecha con otro centro de Alzugaray que ésta vez halló la cabeza de Cabral para liquidar el pleito.
Sobre llovido, mojado para Camba Cuá. El árbitro Sandoval sancionó para el dueño de casa la pena máxima por un foul y Casals desperdició la ocasión de reducir el margen. Con este desenlace se fue el cotejo y los dirigidos por Daniel Veronesse volvieron a Barrio San Martín con la fe agigantada.