Micheli fue reelecto en la CTA opositora
|“Vamos a consolidar esta identidad autónoma de la central para crecer cuantitativa y cualitativamente, vamos por una CTA de tres millones de afiliados y fundamentalmente vamos a seguir construyendo la unidad de acción con las CGT”, dijo.
Pablo Micheli se proclamó reelecto por un nuevo periodo al frente de la CTA opositora con el 87 por ciento de los votos, a pesar de la inhabilitación del Ministerio de Trabajo, y llamó a profundizar la “unidad de acción” con las CGT de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo.
“Vamos a consolidar esta identidad autónoma de la central para crecer cuantitativa y cualitativamente, vamos por una CTA de tres millones de afiliados y fundamentalmente vamos a seguir construyendo la unidad de acción con las CGT en pos de conseguir reivindicaciones pendientes para los trabajadores”, señaló Micheli a NA en la sede de Lima, donde manifestantes celebraban los resultados de las elecciones.
Según informó, la lista de Micheli se impuso con el 87 por ciento de los votos, con una participación de “entre 30 y 32 por ciento” del padrón 1,1 millones afiliados en todo el país, en tanto que la lista 3 del Partido Obrero obtuvo el 11 por ciento y Nuevo Más el 1 por ciento.
Desde la puerta de la sede de Lima, Micheli sostuvo que “fue una votación muy buena porque tuvo un nivel de participación sorprendente más allá de todas las trabas que pusieron” y mencionó no sólo la resolución del Ministerio de Trabajo, que desconoció la convocatoria, sino que también denunció que la CTA de Hugo Yasky, cercana al Gobierno, “lanzó una alerta en todos los distritos del país para que los directores de escuela prohíban entrar las urnas”.
“La actitud de los dirigentes del otro sector nos ha llevado a un punto sin retorno, no sólo por su relación con el Gobierno sino por esta actitud de no dejar votar, que es una actitud más patronal que otra cosa”, apuntó Micheli en diálogo con NA, tras su consagración para un nuevo mandato de cuatro años.
En este marco, el dirigente se mostró confiado en aceitar los lazos con las CGT de Moyano y Barrionuevo para convocar a un nuevo paro nacional “después del Mundial de Fútbol”, más allá de la movilización conjunta prevista para los primeros días de junio al Anses para pedir por las jubilaciones.
Los comicios se realizaron en todos el país pese a una resolución del Ministerio de Trabajo de la Nación, dictada el martes pasado a instancias de la CTA oficialista, liderada por Yasky, que declaró la invalidez de la votación.
Por este motivo, una delegación de la central sindical, encabezada por su secretario adjunto, José Rigane, viajó a Ginebra a la 103º Conferencia Internacional de la OIT, donde denunció este jueves “la injerencia del Gobierno en las elecciones” y la “falta de libertad y democracia sindical” en la Argentina.
El Director General de la OIT, Guy Ryder, tras reunirse con la delegación de la CTA, manifestó su “preocupación por lo que está sucediendo en Argentina” en materia sindical, indicó un comunicado de la central obrera.
“El Gobierno Nacional no puede desconocer unas elecciones donde participan más de 1,1 millones de trabajadores. Se olvida que la CTA es una central autónoma de los patrones, de los partidos políticos y de los gobiernos”, aseveró Rigane.
La abogada de la CTA, María de las Mercedes González, señaló por su parte que la elección se desarrolló en forma “normal”, salvo por un inconveniente en Formosa, donde para continuar con los comicios se decidió “trasladar las mesas de votación a la plaza central” de la capital de la provincia litoraleña, gobernada por el peronista Gildo Insfrán, aliado de la Casa Rosada.