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Cortas vacaciones para el básquet APB

El basquetbol de la Asociación Paranaense tuvo un corto descanso y los padres tuvieron que renovar vestuarios (en especial zapatillas) como empezar a desembolsar prematuramente costos de aranceles, carnets, y otras obligaciones. Con varias familias aun de vacaciones, o chicos que llegaron sobre el debut, arrancó este sábado la competencia de Pre-Liguilla FeBER. Galería de fotos exclusivas.

 

En varias canchas paranaenses hubo juegos de U13, U15, U17 y U19. Algunas contiendas fueron parejas pero también se registraron castigos innecesarios que solo deparan la inquietud acerca de si algunas instituciones no arriesgan desanimo en sus Menores habida cuenta de las diferencias abismales con otros equipos.

 

Lamentamos exhibirlo como ejemplo pero es imprescindible un pronto replanteo, pensando en lo que puede ocurrir con el sucesivo desarrollo de otras jornadas.

En U15, Talleres apabulló a Recreativo con 58 de margen y “haciéndole precio”, Ciclista aplastó a Estudiantes por 48 y Sionista castigó duramente a Rowing por 47 de distancia, regulando los técnicos ganadores las formaciones en los últimos cuartos de cada cruce.

 

A su vez, en U17, Quique hundió a Atlético Diamantino por 88 puntos. ¿Suman o restan estas palizas?

 

¿Es necesario seguir con esta “Nivelación” o “Preclasificación”? ¿Qué será de los próximos duelos en U15 de chicos como los del Bochas, el CAE y el PRC cuando deban cruzarse con los “Decanos”, los “Rojos”, los “Verdes”, el “Negro”, los “Azulgranas” o los del CJS???

 

¿Más goleadas? ¿Aprendizaje o tortura? ¿Diversión o impotencia y frustración?

 

¿No se tuvo en cuenta? ¿No hay diálogos fecundos entre los entrenadores jefe de cada club? ¿O es que a algunos les da placer ganar por azote?

 

Pero sin ir más lejos… Un club que viene recogiendo los frutos de su trabajo en el “Semillero” como Quique, amén de lo que tenía, se reforzó con la llegada de pibes de otras entidades.

Sionista ya lo hizo el año pasado y Ciclista sumó entre la pasada temporada y esta algunos gurises que renuevan la cantera.

 

Recreativo parece que vivirá un año tranquilo en U13 y U17, como promete una temporada altamente competitiva en U19, pero en U15 daría la impresión que sufrirá severas tristezas y será complicado el evitar acostumbrarse a perder o hasta mantener una formación estable que tolere palizas sucesivas.

 

Similar marco, en esta categoría para Estudiantes y Rowing, como por ahora no sabemos qué ocurrirá con otras instituciones el caso de Patronato, San Martín, San Agustín, etc, etc…

 

Está muy claro que en U15 Quique tendrá una especie de Dream Team, más allá que Talleres, Ciclista, Sionista, Echagüe y Olimpia tengan pretensiones de hacerle frente con suma dignidad. ¿El resto??? Salvo que haya “tapados”, todo indica que el Oficial 2014 será una especie de suplicio para varios conjuntos y surge de modo inequívoco la pregunta: ¿cuántos de estos pibitos seguirán jugando el año que viene?

 

O, por qué no… ¿Y si los éxodos se renuevan? ¿A qué se aspira? ¿A que 3 o 4 clubes peleen por el título y los restantes sean vapuleados jornada tras jornada??? ¿Divierte ello a quienes pierden así, con rasgos de humillación?

 

Lo peor de todo sería que los técnicos de esos clubes con formaciones endebles o carentes del talento y/o talla de las entidades “fuertes”, se queden de brazos cruzados y crean ya desde el vamos que es un año perdido y por ello no le dediquen el tiempo imprescindible en pos de ENSEÑARLES A JUGAR a sus dirigidos.

 

Creemos fervientemente que en estas entidades es donde más se debe profundizar lo inherente a fundamentos, y así robustecer el trabajo de base con suma dedicación, con inmenso esmero.

 

Por ello es que la dirigencia de las mismas debe PROTEGER a estos chicos poniendo a cargo de los mismos a entrenadores capacitados que sepan ENSEÑARLES en cada sesión de adiestramiento como en las competencias.

 

Solo así se podrán seguir evitando decepciones, frustraciones. Podrán los clubes más “frágiles” estar en desigualdad en cuanto a talento o mayor desarrollo psicofísico de los candidatos a pelear el título, pero sabiendo picar, sabiendo pasar la bola, sabiendo lanzar desde la posición y en el momento más adecuado, como hasta sabiendo imponer oposición defensiva sin otorgar ventajas en algunos casos por ingenuidad, es muy probable que se liman diferencias y en poco tiempo ya no haya castigos tan elocuentes.

 

Hoy, en U15, seguir jugando con semejantes distancias entre uno y otro suena a absurdo. Es muy evidente que Quique irá por repetir y aun mejorar lo generado dos años atrás con la U13 campeona Nacional, Talleres buscará revalidar el por qué tuvo tantos lauros en el 2013, y las plazas restantes para la Liguilla saldrán de Ciclista, Sionista, Olimpia y Echagüe.

 

Ya está… No hay más que seguir experimentando, flagelando el orgullo de los gurises o más grave aún, como ya dijimos y percibimos, continuar apreciando a basquetbolistas Menores que naturalicen eso de perder por tan amplios márgenes y se entreguen ante sus rivales para ser golpeados en sus fibras íntimas sin conmoverse.

 

Consideramos coherente el pensamiento inherente a que “hay camadas y camadas…”. Avalamos ese criterio. A lo que NO damos anuencia es a descuidar a una categoría o grupo por sus escasas chances de debatir posiciones de vanguardia y/o hasta por contar con jugadores casi sin la más básica aptitud técnica para jugar básquet.

 

No señores… Aquí es donde el club debe poner acento en designar al mejor entrenador de las Menores para que incremente la calidad de la capacitación, de la formación, y no solo se cumpla con driles primarios y hasta tediosos, como “marcando tarjeta” en una profesión tan sublime como lo es la de ENSEÑAR.

 

El sábado vimos chicos que solo pueden jugar adentro de la zona, otros que no tienen idea siquiera de picar, y mucho correr sin sentido, tal cual un pequeño basquetbolista al que ni siquiera le profundizaron la visión en cuanto a qué se trata este deporte. Y esto es serio, delicado. Ojalá sea solo una sensación y estemos profundamente equivocados. Es nuestro más sincero anhelo. El tiempo dirá…