Duro informe de juez federal de Salta sobre el narcotráfico: “No podemos más”
|El juez federal de Salta Miguel Medina alertó hoy que la situación en el norte del país para la lucha contra el narcotráfico “no” da para “más” porque las “estructuras son muy escasas, y sostuvo que “es una leyenda urbana” cuando se dice que Argentina es un país de tránsito de droga, ya que “hay cada vez más consumidores”.
De esta manera, Medina se refirió a la resolución de la Corte Suprema de Justicia que ayer le pidió al Gobierno nacional y al Consejo de la Magistratura que “arbitren de modo urgente” las sugerencias realizadas por jueces federales para luchar contra el narcotráfico.
“Lo de la Corte lo recibo positivamente como un aporte muy importante para que entre todos podamos encontrar soluciones a este gravísimo problema que tenemos en el norte”, respecto al tráfico de drogas, destacó el magistrado.
En diálogo con radio La Red, Medina detalló: “Acá en el norte estamos en el mínimo de las posibilidades, de 0 a 10, estaríamos en 4,5 o 5 puntos como máximo. No podemos más, porque nuestras capacidades son muy escasas y nuestra capacidad de detenidos es peor todavía”.
Al respecto, Medina comentó que el caso más grave se da en el juzgado federal de la ciudad salteña de Orán, ubicada en la zona fronteriza. “Está absolutamente desbordado, tiene una incapacidad de personal crónico, dificultades edilicias y logísticas para trabajar dignamente y también existe el problema de alojamiento de detenidos”, remarcó Medina respecto al juzgado de Orán.
Al ser consultado si Argentina es un lugar de tránsito de la droga, el magistrado respondió: “Eso es una leyenda urbana, porque cada vez más tenemos consumidores en distintos grados”.
“La pasta base se la importa vía Bolivia y la marihuana desde Paraguay, y si bien acá no se produce la droga, va aumentando el consumo”, añadió Medina.
En su resolución, menciona la “extrema gravedad de las circunstancias denunciadas”, vinculadas al aumento del tráfico de drogas en esas provincias. Esta determinación surgió luego de que la Iglesia difundiera un duro documento en el que advirtió sobre el avance del narcotráfico en el país y expresara preocupación “por la desprotección de las fronteras por la demora en dotar de adecuados sistemas de radar a las zonas más vulnerables”.