Bongiovanni no arriesgó más
|Tras llegar a un común acuerdo con los dirigentes, el director técnico Horacio Bongiovani se desvinculó del Club Belgrano y a partir de este miércoles su lugar será ocupado por quien era su ayudante, Néstor Giacinti.
Los pobres resultados alcanzados hasta el momento (dos empates y dos derrotas, ambas de local) fueron decisivos para que el DT resuelva dar un paso al costado y así Giacinti -quien originalmente tenía las acreencias suficientes para ser el técnico y no se le concedió la chance oportuna- pasa a ser un piloto de tormentas.
Es que el Ruso termina asumiendo culpas ajenas y debe buscar junto a sus jugadores consolidar el milagro de ganar lo que queda y contemplar como queda el tablero respecto a los que están arriba.
Obvio que NADIE tendrá derecho a alguno a objetarle algo pues una vez más demuestra su elogiable conducta poniéndose el equipo “Mondonguero” al hombro, tratando esencialmente plasmar un revulsivo anímico con un plantel que con lo que tenía y exhibió en aquellas finales liguistas pudo llegar más lejos y vaya uno a saber que ocurrió a la hora de armarse para el Torneo del Interior.
Ya fue… Lo hecho, hecho está… No es momento de reclamos o reproche alguno. Habrá tiempo en dos semanas para concretar un balance más profundo. Hoy, el presente “Albiceleste” dice que aún nada está perdido. Es una misión dificilísima, pero no imposible y tal vez ahora de la mano de un entrenador joven y autóctono, muy bien visto por sus dirigidos, el clima interno mejore y se juegue acorde al nivel de competencia.
Tanto es el enchufe del plantel que aceptó trabajar en doble turno a las 8.30 y 15, hasta deponiendo intereses laborales particulares. Hay como un renacer y no está mal ilusionarse.
Dicen que el tiempo perdido, no se recupera jamás. Quizás esta experiencia ayude a todos los clubes a autoconvencerse que no hay nada mejor que creer en lo LOCAL.