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Los Súper Chinos le exigen a la presidenta “mayor compromiso”

“Resaltamos el pedido de la presidenta pero le exigimos un mayor compromiso”. Lo afirmó Miguel Calvete, director Ejecutivo y vocero de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas en la República Argentina en relación a la recomendación de Cristina Fernández de Kirchner para que los consumidores les hagan “el vacío” a aquellas empresas que aumentan los precios de sus productos.

 

Para el directivo, “está bien que se llame al boicot de determinados productos en los que no hay razones válidas para que aumenten y como ejemplo cabe recordar el “vacío” a la compra y consumo del tomate, impulsado por los autoservicios chinos en octubre del 2007, en donde el kg estaba en Argentina más caro que en Paris y Tokio, pero el Gobierno Nacional no debe eludir sus compromisos para regular los puntos más oscuros en la formación de precios”.

 

“No se puede dejar de mencionar que existen oligopolios de comercialización de alimentos, con cuatro cadenas que manejan más del 60% de las ventas a nivel Nacional”, dijo Calvete, y agregó algo todavía más grave diciendo que “hay una concentración en donde 28 empresas multinacionales producen el 80 % de todo lo que consumimos o utilizamos para limpieza del hogar o higiene personal y el otro 20% se divide en 30000 pequeñas y medianas empresas”.

 

“Es un círculo vicioso en donde sólo ganan los grandes grupos influyendo en el precio de los productos que se consumen y controlando también los márgenes de ganancia de los productores”.

 

La gravedad radica en que Argentina es además productora de las materias primas para esos alimentos, no siendo un país importador en esa materia, y es, a la vez, un gran manufacturador del sector.

 

Por esto, desde la Federación que agrupa a los autoservicios propiedad residentes chinos en nuestro país su representante reiteró el pedido para que el Gobierno Nacional intervenga para equiparar los derechos tanto de los pequeños productores (evitando su desaparición) como de los consumidores (garantizándoles precios acordes, libre acceso y elección de los productos).

 

“Es necesario exigir una inmediata regulación del Estado a través de los organismos que corresponda” expresó Calvete y afirmó “así como se busca controlar la concentración mediante leyes, en algunos sectores como Medios, Energía, etc. , creo que es momento de avanzar específicamente en el rubro de la alimentación, que es mucho más sensible y palpable en el día a día para el ciudadano común porque esa cartelización o concentración provoca la formación de precios, o mejor dicho la deformación, que conduce a una inflación anual estimada de un 25%” .

 

El directivo explica claramente que contra algunos grupos económicos, la ciudadanía consumidora, tiene la potestad de comprar uno u otro combustible; puede adquirir o no un periódico o cambiar un canal de televisión; pero en el caso de un derecho humano, como el salario y los alimentos para su familia, indica que “no hay opciones”.

 

“La única alternativa, es fortalecer a ese 20% de pymes (dan el 67% de los empleos del sector), para que genere nuevas opciones, segundas marcas, con créditos blandos para incorporar mayor tecnología, etc.” concluyó Calvete.

 

Finalmente, desde la Federación de Supermercados y Asociaciones chinas, conjuntamente con muchas organizaciones que representan a pymes del sector, piden a la presidenta el control sobre el accionar de estos grupos; y solicitan a los Legisladores leyes tendientes a generar herramientas efectivas contra la inflación y los formadores de precios.