APB: ¿mala expresión-interpretación o extorsión?
ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- Con lógica preocupación se abordó días atrás, en el seno de la Asociación Paranaense de Basquetbol, un tema candente: la presencia -durante el 2012- en estadios de personas suspendidas por la APB, quienes aducen desconocer medidas. En medio del debate surgió una pregunta: “¿qué pasaría si se recurriese a la Justicia Ordinaria? La respuesta dejó entrever una sensación de coerción.
Desde la misma presidencia surgió la inquietud acerca de ésta problemática y por ello se escuchó con atención los conceptos vertidos por el Dr. Alejandro Grandoli, presidente del Tribunal de Penas APB.
Blanc admitió la preocupación que genera el desconocimiento o la pretensión de inculpados que aspiran a anular fallos argumentando desconocer las imputaciones o que no han sido notificados. “Si siguen adelante no sé dónde terminaremos con este problema” reconoció Blanc.
El delegado del Club Ciclista consultó: “¿qué pasa si esto continúa en la Justicia?”, a lo cual Grandoli respondió: “en principio deben agotarse todas las instancias administrativas”.
Sin conformarse con dicha contestación, el dirigente de la entidad de calle Santiago del Estero, consignó a modo de interrogante: “ignorar que se leen las resoluciones en las reuniones, ¿puede tener un peso en la Justicia?
Sin dar una respuesta consistente y desviándose el dialogo con una acotación de otro dirigente, Grandoli consideró “se está poniendo en tela de juicio y en serio riesgo la institucionalidad de sistema de procedimiento que la APB viene ejecutando desde hace 30 o 40 años. No es obligación notificarlo en forma personal al simpatizante, sino que se notifica al club por intermedio de su delegado, el Club, es el que debe notificar al simpatizante”.
Pese a no obtener un esclarecedor concepto a su requisitoria, el delegado del CCP fue drástico al expresar: “todos los que estamos acá respaldamos lo actuado por la Asociación. Y el procedimiento que venimos teniendo desde hace 40 años. Pero estemos atentos a que pueden llegar con este tipo de acciones”.
Hete aquí que Grandoli esgrimió una posición que de ser basada en Ley o norma alguna, exige una pronta revisión: “el tema es que la eventual sanción de llevar estas cuestiones a la Justicia Ordinaria, por un simpatizante, implicaría para esa persona una expulsión de por vida. Incluso puede ser extensivo al club”.
Bomba de alto poder devastador. ¿Figura ello en el Reglamento CABB/FEBER/APB? Confesamos no tener la más mínima idea, pero creemos que, ajustándonos meramente a un Derecho Civil, a un Derecho Constitucional, la potestad por recurrir a un estamento que permita rever una situación injusta de cualquier índole no debe implicar o representar una rebeldía por la cual se expulse a alguien de por vida de tal o cual ámbito sin revisarse los procedimientos y/o las causas de una sanción.
Mucho menos se debería potencialmente sentirse amenazada una institución porque se diversifiquen los canales legales/judiciales para llegar a la VERDAD y a una elucidación de una circunstancia mínimamente confusa.
Ahora bien, si se da anuencia a que el sistema normativo arrastra tres o cuatro décadas de vigencia y en los últimos tiempos se le han descubierto eventuales fisuras para que se registren “avivadas”, ¿por qué antes de hablar de expulsiones de por vida no se pone énfasis en propender a un cambio?
Luego de distintos intercambios de pareceres, Blanc dio por cerrado el debate concluyendo: “pongo a consideración de todos los delegados la postura de la Mesa Directiva, ésta es avalar todo lo actuado en estos años y mantener el sistema de notificación vigente el cual se ajusta al Estatuto, al Reglamento General y de Torneos de nuestra Asociación. Esto es aceptado por unanimidad avalándose todo lo actuado por los distintos Tribunales de Penas y seguirá el sistema de notificación vigente”.
De esto NADIE habló en el básquet de Paraná. El manifiesto de Grandoli pasó desapercibido. Como en sí toda la problemática de éste deporte en la capital entrerriana habitualmente pasa INADVERTIDO. ¿Costará pensar? ¿Costará reflexionar? ¿O simplemente A NADIE LE INTERESA?