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Por obra y arte de Macri… Más despidos, más cierres, más desempleo

Tras una importante asamblea realizada en la planta de Cerro Negro y Losa para definir los pasos a seguir luego de conocerse el despido de 40 trabajadores de la empresa, desde la delegación del Ministerio de Trabajo de la Provincia dictaron la conciliación obligatoria. El mapa argentino de conflictos laborales en pleno cierre de semana.

 

“Esperamos que se pueda destrabar el conflicto” dijo Pedro Garay, y señaló que además plantearán varias inquietudes vinculadas a la falta de trabajadores en algunos puestos estratégicos y otros reclamos del sector, además de insistir con la reincorporación definitiva de los 40 empleados.

 

*Industria del pescado

 

Fileteros respaldados por dirigentes del SOIP bloquearon el acceso del Frigorífico Sur Trade reclamando que la empresa abone la indemnización por el despido de un grupo de trabajadores que no aceptaron el retiro voluntario.

El reclamo se llevó a cabo en la sede de Sur Trade. En dichas instalaciones procesa materia prima la cooperativa Cabo Corrientes. De acuerdo con lo informado desde el propio sindicato, Sur Trade habría desvinculado a 17 fileteros en el marco de una reducción de personal y reestructuración de las líneas de producción.

 

Según relató la revista Puerto, con otros 14 trabajadores la empresa de Carlos Mata habría llegado a un acuerdo, cuyos detalles no trascendieron.

Los otros, con casi 20 años de antigüedad, no estuvieron de acuerdo y solicitaron ser indemnizados como marca la legislación. Ante la negativa de la empresa, procedieron a bloquear el acceso y encender algunas cubiertas.

 

Sur Trade está procesando merluza luego de la temporada de langostino y ahora se desconoce quién se encargará de dicha tarea.

Dentro del establecimiento quedó pescado ya procesado para enviar a Brasil y del lado de afuera había un par de camiones con cajones para procesar, que debieron ser redireccionados a otros establecimientos.

 

*Siguen en riesgo los 110 empleos de Food Arts

Trabajadores de Food Arts y dirigentes del Sindicato de Alimentación se movilizaron a la Municipalidad de Puerto Madryn. Buscan destrabar el conflicto en la empresa, que tiene en vilo 110 a empleados.

La movilización fue recibida por funcionarios del municipio. ante la ausencia del Intendente, para analizar el fallo de la Cámara de Apelaciones que cierra los caminos a una posible solución para la planta.

 

Los jueces resolvieron no innovar ante el pedido de uno de los socios de reabrir la planta, que no pudo trabajar durante la temporada de aguas nacionales por la disputa entre los dueños. La sentencia pone en serio riesgo la continuidad de las fuentes laborales.

El gremio de Alimentación pidió una reunión con el Gobierno nacional para que intervenga y siente a las partes; el gremio dejó abierta la posibilidad de llevar al caso al Consejo Federal de Pesca.

 

Luis Núñez, secretario general del STIA Puerto Madryn, comentó al diario local Jornada que en la resolución los jueces “no hicieron lugar al recurso presentado por la empresa Food Arts contra Ipesur; a partir de esto será imposible que la Municipalidad otorgue la habilitación correspondiente, así como desde el Senasa”.

Según los fundamentos de los jueces, al momento de presentarse el pedido de no innovar, la planta ya tenía caídas las habilitaciones para trabajar y el pedido fue a destiempo.

 

Están pidiendo que no se innove sobre algo que ya no estaba habilitado”, dijo el gremialista, quien calificó el revés judicial como “lamentable porque tendrá derivaciones con los trabajadores que no tienen nada que ver en la cuestión entre los privados”.

El gremio pedirá a la Secretaría de Trabajo que intervenga más activamente. “Se pidieron reuniones a los representantes involucrados en el conflicto, pero se presenta uno y el otro falta”.

 

El inconveniente central es una disputa de los socios que derivó en la caducidad de la habilitación comercial. La empresa no pudo trabajar toda la temporada de langostino en aguas nacionales y despediría a 50 efectivos y 60 temporarios. “Si al tema tengo que llevarlo al Consejo para que revise los permisos de estas empresas lo haremos porque queremos la continuidad laboral. Esto independientemente de las peleas intestinas de los empresarios

 

*Una fábrica sanjuanina de más de 50 años presentó preventivo de crisis

 

Argumentando baja producción y escasa comercialización, la tradicional fábrica de tomate en conserva Almar presentó procedimiento de crisis ante la subsecretaría de Trabajo de la provincia de San Juan.

“Hubo audiencia con el sindicato de alimentación donde la empresa de Albaladejo propuso suspensiones y pagar una suma no remunerativa ante la magra comercialización de sus productos”, dijo Roberto Correa Esbry, titular de Trabajo al diario Tiempo de San Juan.

 

“Proponen suspender unos meses 20 empleados de planta permanente y 30 de temporada, pero lo importante es que no hay despidos”, añadió.

El proceso de audiencia pasó a cuarto intermedio para la semana próxima luego de que los empleados y su sindicato realicen una asamblea para debatir la propuesta de la empresa, después de lo cual definirán si aceptan el procedimiento de crisis o hay alguna contrapropuesta.

 

Con más de 50 años produciendo desde Pocito, la firma fundada por la familia Albaladejo es una de las más importantes en el rubro, con relaciones muy estrechas con los productores de tomate a los que compra su materia prima.

 

*Cierra otra textil en La Rioja y despide 32 operarios

 

La ex planta Galileo confirmó que cerrará sus puertas definitivamente antes de fin de año. Sus últimos 32 operarios se quedarán sin trabajo. La firma aduce baja rentabilidad y dice que la decisión es “irreversible”.

Así lo aseguró la titular de la Secretaría de Trabajo de La Rioja, Miriam Espinoza en declaraciones a los medios locales. “Hemos estado reunidos, vinieron directivos desde México, desde Colombia y nacionales, lamentablemente la empresa anuncia el cierre”, especificó.

 

“Son 32 personas, ya hablaron con la gente en el día de hoy, mañana hablarán de la cuantía de la indemnización, no existe posibilidad de marcha atrás. A fines de diciembre cierra la empresa, va a venir un equipo para darles talleres para capacitar a las 32 personas”, afirmó Espinoza.

La funcionaria provincial agregó que entre las razones que motivan el cierre de la fábrica, la empresa -dedicada a la fabricación de medidores- argumenta la deslocalización de la planta.

 

“Ellos tienen varios argumentos, el tema de la deslocalización, estamos a mil kilómetros del puerto y ellos buscan rentabilidad”, argumentó.

Espinoza recordó que la ex Galileo forma parte de una multinacional con sede en Estado Unidos. “En Argentina tienen dos plantas una en Buenos Aires y otra en La Rioja”, completó.

 

*Peligran 500 empleos en el departamento Caseros, Santa Fe

 

La UOM de Casilda advirtió sobre la grave crisis que atraviesan las empresas del departamento Caseros. Hay 500 trabajadores que ven amenazados sus puestos laborales sobre un total de 1.200. Casi la mitad de los empleados sufre suspensiones y reducciones de las jornadas laborales.

 

Casilda es la principal localidad afectada debido a que la empresa Gherardi, la mayor de la zona y que se dedica al rubro máquinas agrícolas y herramientas manuales, redujo la producción a tres días por semana y tiene a 300 empleados en vilo. La compañía terceriza varios servicios, lo que complica a otras pymes.

 

“El gobierno nacional no pone la mira en las tarifazos. Además, la falta de crédito competitivo y los elevados costos y la falta de ventas en el mercado interno desembocan en esta situación”, explicó Juan Storlini, de la UOM Casilda, al portal El Ciudadano.

 

Casilda no es la única localidad complicada en el departamento de Caseros. Plantas de silos, una fábrica de engranaje en Los Molinos, plataforma de cosechadoras en Arequito y de caños de escape en San José de la Esquina redujeron su actividad por los mismos motivos y con ello pusieron en entredicho la continuidad laboral de otros 200 empleados.

 

“Esto es similar a la crisis de 2001, pero cuando hablamos con los empresarios lo pintan peor porque dicen que están acorralados y sin salida. Además, es imposible competir con las exportaciones”, sostuvo el dirigente de la UOM.

 

La crisis también produce daños colaterales porque el gremio cuenta con un hospital propio en Casilda que deben mantener a diario pese a las bajas en los aportes. “Muchas veces los empresarios que están atravesando la crisis lo primero que dejan de pagar es la cuota sindical, y eso repercute en nuestras instalaciones”, apuntó Storlini.