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Operativo de Prefectura para capturar un barco chino que pescaba ilegalmente

Con disparos de ametralladoras y un cañón, un guardacostas de la Prefectura Naval Argentina intentó detener a un pesquero chino que se encontraba realizando tareas de pesca en forma ilegal pero no lo consiguió: con la ayuda de un barco de la misma empresa que obstaculizó la acción del guardacostas logró escapar.

 

El barco fue divisado por un avión de la Prefectura Naval Argentina durante la madrugada del miércoles pescando ilegalmente en aguas nacionales.

 

Se le dio aviso a los guardacostas y el “Mantilla” se trasladó a la zona, a la altura del paralelo 47°, frente al extremo sur del Golfo San Jorge. Luego de dar la voz de alto el buque no se detuvo y se procedió a disparar con una ametralladora y luego con un cañón contra el pesquero.

 

La embarcación infractora fue identificada como “Jing Yuan 626” de bandera china, la cual omitió los distintos pedidos de la fuerza para que detuviera su marcha y pudiera ser abordada para verificar su carga.

 

Comenzó allí una persecución, que se vio obstaculizada por otros buques de la misma empresa china, que intentaron obstruir el despliegue de la fuerza argentina.

 

Desde el guardacostas llegaron a efectuar varios disparos sobre la línea de flotación del barco chino, que sin embargo lograron huir. Concretamente, se refugió en la zona de exclusión dispuesta en torno a Malvinas.

 

“Fuego libre, un disparo a la proa sobre la línea de flotación, a la altura del ancla o del nombre”, se escucha en un video que captó parte del operativo. La secuencia se repite en condiciones de navegación complejas debido al bajo nivel de visibilidad.

 

Los disparos fueron realizados con una ametralladora y un cañón. El armamento es el permitido para este tipo de procedimientos ya que buscan más la intimidación que ocasionar algún daño severo sobre el casco.

 

Desde el aire un avión de Prefectura dio su apoyo. En la comunicación entre ambas unidades queda en evidencia que al menos uno de los poteros chinos intentó colisionar al guardacostas y que se debieron implementar maniobras para evitarlo.

 

Según los informes, nadie resultó herido y los pescadores chinos no fueron detenidos. La operación fue cancelada por orden del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina después de que el buque fue perseguido durante casi ocho horas.