Montevideo: el destino ideal para todo el año
Montevideo brilló como propuesta veraniega en la reciente Feria Internacional de Turismo. La Capital de Uruguay, situada en el centro-sur del país, posee los encantos de la modernidad y el progreso, como asimismo de la bohemia y la historia que pueden respirarse a lo largo de sus calles. Con un clima moderado templado, sin fríos ni calores intensos, ostenta profusas opciones de paseos, lugares de entretenimientos y espectáculos para todos los gustos y expectativas.
Ubicada a tan solo 577 km. de Buenos Aires y 623 de Paraná, como a menos de una hora en vuelo aéreo o en tan solo 3 horas de navegación, Montevideo se erige en una tentador destino para los argentinos, en especial para los viajantes de la Región Centro-Litoral y turistas porteños/bonaerenses.
El gran amor de la ciudad es su río, que de acuerdo a como sople el viento se disfraza de león, de mar o de océano. Y son los locales quienes siempre se hacen un rato para “matear” (termo y mate en mano) junto a su particular belleza desde su malecón o costanera.
Dentro de la ciudad de Montevideo, puede visitarse el barrio Parque Rodó, que posee veinticinco hectáreas de jardines, los cuales le aportan colorido y oxígeno a esta gran urbe. No muy lejos de allí se encuentra el Parque Batlle, donde es posible recorrer el Estadio de Fútbol Centenario que fue el lugar donde se llevó a cabo el Primer Mundial de Fútbol de la historia en 1930, el cual ganó el dueño de casa, Uruguay.
Uno de los paseos más bonitos para realizar -tanto de día como de noche- tiene como destino la Ciudad Vieja. Allí se conserva la Puerta de la Ciudadela, que hasta 1829 funcionaba para proteger el lugar de posibles invasiones. Dentro de este casco histórico se encuentran las construcciones coloniales más bellas y pintorescas: la Catedral Metropolitana, el Cabildo, el Teatro Solís y el Museo Torres García, entre tantos otros atractivos.
Carrasco y Pocitos, en los alrededores de la metrópoli, son dignos de ser visitados por su hermosura y extravagancia. En estos fastuosos barrios residen las clases más pudientes de Montevideo. Pocitos, además de con glamour, cuenta con una extensa playa que por momentos nos traslada imaginariamente a la carioca Río de Janeiro.
Uno de los acontecimientos más relevantes resulta el Carnaval de Montevideo que se lleva a cabo durante el mes de febrero. Fiesta popular por excelencia, se desarrolla sobre la avenida 18 de Julio, la principal de la ciudad de Montevideo, y reúne no sólo al público de todo el país, sino también a viajeros de todo el mundo.
Hace pocos días quedó reinaugurado el Mirador Panorámico de la Intendencia de Montevideo. Ubicado a casi 80 metros de altura, revela desde su Piso 22 una de las vistas más completas y emblemáticas de la capital. Este escenario funcionó por primera vez en 1979. Su restaurante y cafetería fueron espacios de diferentes acontecimientos sociales.
Hacia el sur se puede observar todos los edificios del Centro y Ciudad Vieja, incluido el Palacio Salvo, al oeste se logra percibir una vista hermosa del Cerro de Montevideo, al este se consigue apreciar la rambla y gran parte del Parque Rodó, mientras que al norte puede verse con elocuenci la gran extensión de la ciudad que se pierde en el horizonte.
Recorrer las calles de una ciudad como Montevideo es divertido, interesante y muy enriquecedor.
Y así como hablamos del Mirador Panorámico, hay varios puntos altos en la ciudad que permitirán ver desde los cielos la extensión y belleza total de la misma.
Un poco más alto, en el piso 26 de la Torre de las Telecomunicaciones o Torre de Antel se encuentra otro mirador panorámico de Montevideo. Erguido sobre la rambla portuaria la vista que proporciona este punto es muy peculiar ya que prestar atención con lujo de detalle a todos los movimientos del puerto así como tener una vista privilegiada del Cerro de Montevideo.
En su punta opuesta se puede observar no solo el Centro y la Ciudad Vieja sino también toda la zona de la Aguada y el sinfín de barrios que se extienden hacia el final de la ciudad.
Al carecer la Capital uruguaya de grandes elevaciones, el Cerro de Montevideo con 132 metros de altura de por sí oficia como un gran mirador de la ciudad. Para llegar a él lo mejor es hacerlo en coche pero existe transporte público para acceder a él también.
De frente a la fortaleza del cerro se consigue mirar la bahía y el puerto así como también el Centro y la Ciudad Vieja, grandes postales de la ciudad pueden ser capturadas desde este punto de vista.
Una curiosidad extra es que en el lado opuesto de la fortaleza se puede observar las grandes praderas de la ciudad y el gran verde que cubre todo el territorio uruguayo. El Cerro de Montevideo es un gran punto turístico para visitar en horas del atardecer.
El Mercado del Puerto, es un lugar que está dentro del casco histórico de la Ciudad lo que se denomina como “Ciudad Vieja” ahí además de conocer parte de la historia montevideana, el ilustre visitante podrá degustar de las mejores carnes uruguayas a precios muy variados.
Enseguida que culmina este barrio a las pocas cuadras es el turno de encontrarse con el Teatro Solís, punto de visitas guiadas para todo quien lo desee.
Pocitos y Punta Carretas son dos Barrios ubicados al este de Montevideo que cuentan con playas certificadas para que la gente pueda disfrutar de ellas sin problema alguno.
Y a la hora de las compras está el Shopping de Punta Carretas que tiene una innumerable cantidad de tiendas y una gran plaza de comidas.
Montevideo también tributa una sensual vida nocturna y para ello está junto a Ciudad Vieja, la zona del Word trace Center donde los visitantes encuentran una gran oferta de pubs y lugares donde poder ir en familia a cenar.
Si hablamos de ferias. Tenemos que decir que los días Domingos está durante gran parte del día Tristán Narvaja, una feria de antigüedades que es visitada por cientos de turistas durante su desarrollo.
Como precitamos, Barrio Sur y Palermo es el lugar donde nace el desfile de Carnaval Montevideano año a año, con una gran cantidad de grupos desfilando por la calle y es presenciado por miles de personas.
A la tradicional llegada de visitantes que buscaba disfrutar de las playas a lo largo y ancho de la costa atlántica uruguaya, se ha sumado hoy, un turismo ávido por la histois capitalina historia, las costumbres y la cultura, en sus múltiples expresiones.
El ordenamiento del tránsito, las calles peatonales, la seguridad, el rescate de edificios históricos, sumado el esfuerzo mancomunado de Estado y privados, ha dado nueva vida a la Ciudad Vieja y Centro de tan bella Capital, transformada en una verdadera sede de las “Naciones Unidas” con la presencia de brasileros, argentinos, españoles, italianos, canadienses, chilenos, estadounidenses, neozelandeses, franceses y colombianos, entre tantos que no sólo quedan cautivados por la belleza de Montevideo, sino por la amabilidad y calidez de su gente.
En Montevideo se palpitan casi 300 años desde las historias coloniales a la ciudad del siglo XXI. Sus recuerdos, música, aromas, arquitectura, expresiones culturales y tradición cosmopolita se reflejan en un cielo de colores que dialoga con el agua que
baña su costa y su bahía.
Es una ciudad que se construyó con viajeros y visitantes, por eso late en los montevideanos la alegría de recibir visitas.
Montevideo no tiene una estación del año predilecta, se redescubre en cada una: verano, otoño, invierno y primavera.
Montevideo, una ciudad que respira poesía y música, es un gran museo a cielo abierto que se integra con museos que abordan diferentes temáticas.
Es una ciudad con espíritu joven, en la que durante todo el año hay estrenos de teatro de calidad, tiene obras del arte escultórico, mural, arquitectónico en las más de mil plazas y plazoletas que hacen del espacio público el lugar privilegiado de intercambio de los montevideanos, de sus diferentes expresiones pero también del vínculo de la ciudad con la naturaleza.
Las autoridades que han elaborado una agenda turística 2017/2018 de excepción, esperan un aluvión de paseantes que si se animan a descubrir Montevideo, pronto confirmarán que desafía todos los sentidos, a través del tango, la murga, el candombe, el buen vino, rutas y rincones gastronómicos que les dejarán el deseo de volver.
Montevideo también es campo y hay que conocerlo. Una aventura cargada de historias, tradición de hospitalidad y calidez que hacen que los visitantes siempre quieran volver.
¡Montevideo te está esperando! ¿Te animás a sorprenderte?
Fuente: Gentileza Néstor Molina.-