Maran Suites & Towers

Minibasquetbol: ¿quieren “matar” al mensajero?

ESPECIAL (por Francisco “Pancho” Calderón).- “A vos te van a matar en el clú…” me advirtió una reconocida y queridísima maestra del básquet, ingresando al estadio de Sionista donde presenciamos una -por fin- agradable jornada de Premini y Mini. Es obvio que no lo dijo con tono amenazante, sino con su rostro pícaro ya añejo, a lo cual agregó: “dijiste demasiadas verdades juntas que duelen”. Y bueno…Es sello, impronta que está a punto de cumplir 25 años. A muchos gusta, a muchos enfada.

Días atrás hablamos sobre el estado de varias, por no decir “casi todas” las canchas del básquet de Paraná, y en especial pusimos un firme alerta en cuanto a los riesgos que se asumían desarrollándose juegos de Mini en condiciones de escasas garantías con respecto a diferentes inseguridades y hasta peligros de distinta índole.

Fuimos muy concretos en Nota de la Redacción de cierre, con letritas negras, en cuanto a que las notas gráficas no implicaban que los escenarios donde se registraron las mismas eran objeto preciso de cuestionamiento. Sin embargo, y sin haber citado club determinado, hubo dirigentes -aparentemente- ofuscados por el contenido del Editorial reciente.

Si bien sabemos quien es quien PERFECTAMENTE dentro del básquet APB, y en especial conocemos en profundidad las problemáticas de algunas instituciones muy amigas por historia y por presente, nos cae feo, muy feo, que en vez de haber autocrítica haya algún trasnochado irritado porque se le diga verdades inocultables y/o incontrastables.

Pareciera que a las carencias de estructura le agregan ausencia de sentido común, de coherencia, de equilibrio.

Es increíble y hasta absurdo que en vez de haber dignidad en la autoevaluación, se gesten presuntas actitudes de represalia.

Lo que es más… No es tan desatinado pensar que algo de verdad había en la “advertencia” de nuestra amiga entrañable pues en la semana se notaron algunas conductas aisladas que algo intentaban desentrañar sobre cierta aversión hacia nuestro último punto de vista esgrimido.

Y bueno… Lamentamos que haya directivos, colaboradores o padres-dirigentes que esperasen bocas y ojos cerrados de nuestra parte.

Peor aún, que sean aquellos que tanto critican infraestructuras ajenas cuando van a tal o cual gimnasio, o hasta “denuncian” procederes hipotéticamente irregulares en otros clubes.

De necios está lleno el mundo, pero a veces nos quedamos desconcertados con que tan cerca nuestro haya gente tan contradictoria como mediocre, que con sus actos desnudan incapacidad imperecedera en sus funciones, por más filantrópicas que sean.

Nos quedamos con los varios mails y llamados, o los encuentros ocasionales que tuvimos con gente de espíritu constructivo, edificante, los cuales nos han pedido consejos diversos aprovechando nuestras casi cuatro décadas junto al baloncesto.

Y bien vale detenerse que los mensajes en positivo surgieron de instituciones no solo de Paraná. O sea, hay capacidad de reflexión en muchos y sandez en unos pocos. Una lástima, sinceramente. Aunque… ¿no será que quienes se enojan tienen el traste demasiado sucio como para recapacitar y modificar el rumbo con un férreo autoanálisis?… o por qué no, ¿no será que algunos se detienen en invertir en frivolidades y no quieren ir al fondo de las cuestiones, obviando cubrir las necesidades evidentes diarias como lo son las carencias, déficit, o estado de vulnerabilidad en lo edilicio y/o en lo concomitante a equipamiento e indumentaria?…

Claro que por ahí nuestra querida y admirable contribuyente constante del básquet capitalino interpretó erróneamente una apreciación y consideró que un arrebato particular representaba una cólera institucional.

O hasta nosotros mismos quizás tomamos como conducta de apariencia hostil el comportamiento de un grupo “selecto”, y solo es que el mismo está reservado para una “élite” que arma y desarma planificaciones de modo muy particular y no quiere entrometidos que les hagan ver yerros de diferentes características.

Tal vez es sensibilidad pura, susceptibilidad por la mera razón que nos hemos convertido en la ÚNICA tribuna en reflejar éste tipo de coyunturas.

Por ahí, algunos estaban mal acostumbrados en que NADIE “destapaba la olla” y ahora ese “alguien” para colmo sabe y mucho de lo que se “cocina” en los clubes cuando hay buena leche o cuando hay intereses espurios.

Y lo peor es que crean que estamos solos. En cada club tenemos nuestro contacto que nos hace ver tal o cual situación anómala y hasta en la propia APB, sin haber pisado jamás dicho ente y sin tener una relación estrecha con al menos uno de su Mesa Directiva, se nos provee de buena data, acicate elemental para alimentar nuestra creatividad subjetiva. Es que, lo crean o no, hay gente que se resiste a los manejos despóticos, a los dirigentes inoperantes o a los miembros de subcomisiones que “pelean” solo por el hecho de beneficiar a sus hijos y hasta para lograr réditos varios.

De “Amigos” y algo más…

No podíamos dejar de contarles con orgullo que ha sido masiva la positiva receptividad de nuestros análisis en cuanto a los “Amigos” (árbitros de Mini), sea en lo concerniente a crítica como a considerandos varios respecto a lo que creemos conveniente por hacer.

Y un buen síntoma es haber estado en Sionista y no oír ni siquiera un reclamo hacia la tarea de los jóvenes jueces. En el estadio de Liga A se vivió una jornada muy agradable, con padres entusiasmados por ver a sus “peques” pero sin esa ambición desmedida y aborrecible de ver ganar sea como sea a los chicos.

Y estuvo muy bueno el chisme que nos llegó a nuestros oídos, sorprendente por cierto: “hay jugadores de Pre y Mini que se cambian la camiseta para ‘licuar’ foules”… Sí!!!… alguien se los enseñó, no hay dudas. Ahora bien,  qué loco!!!…Hasta donde llegará la codicia de ganar???… Pero saben que es peor???…Que haya padres que ven esa artimaña y lo festejen!!!…Quien nos contó estaba tan indignado que nos contagió a nosotros aunque, sinceramente, a nosotros no nos enojó. Nos dio asco. Así de lapidario.

Otra… Semanas atrás se dio una paliza de un equipo de Premini a otro. El Monitor del conjunto apabullado pidió a su colega que sus chicos aflojen con la defensa y los dejen jugar un rato, pero si bien el entrenador “ganador” aceptó en parte el pedido, sus dirigidos no tuvieron piedad y así fue una paliza catastrófica que al final del encuentro motivó un enojo inconmensurable del técnico sometido.

Y traemos a colación esto para recordar que desde hace muchos años, en escritos publicados en LT 14 Digital, o en éste mismo Portal, venimos recomendando que cuando se da una diferencia notable, lo ideal es hacer un mix, intercambiar camisetas y concretar un juego parejo en el cual se diviertan todos. O sea…Van 40 a 6 en el segundo cuarto o arranque del tercero y a partir de ahí hacer una mezcla.

Claro que, no sean hechos aislados. Que la APB lo aconseje, no Cuestión Entrerriana.  Así se van a terminar en especial las frustraciones, las decepciones, las potenciales renuncias a seguir jugando básquet y, como ocurrió, evitar discusiones entre Monitores.

Una más (y no jodemos más…por hoy): varios padres nos han pedido que insistamos en concientizar a los entrenadores respecto a lo vinculado a estimular a todos, y en especial a aquellos chicos más limitados por altura, peso, psicomotricidad, o sin la destreza de otros compañeros.

Sobre todo, respetar una rotación equitativa y no que prevalezca la cantidad de minutos de aquellos cuyos talentos han explotado prematuramente solo con la meta de ganar aún en desmedro de varios chiquitos que se quedan tristes por haber jugado muy poco.

Otra… Al parecer, hay “Profes” que se les está yendo la mano con la “Operación Triunfo” y ponen énfasis especial en que algunos de sus jugadores participen en tres cuartos con rotaciones bastante peculiares. Vamos a seguir resistiendo esa actitud. Que no les quepa duda.

Felizmente, notamos que hay muy buenos ejemplos, de quienes prefieren la formación, el desarrollo evolutivo paulatino de todos y no ganar sin importar que en el banco quedó un gurí con el corazón hecho pedazos por las ganas de seguir jugando un rato más y ve como otros compañeros sí lo hacen sin siquiera una palabra de aliento de su entrenador, o peor aún, con miradas que a cualquier padre irritan.

Estos jóvenes entrenadores, la enorme mayoría muy buenos pibes fuera del rol para el que tal vez no estén lo suficientemente preparados en materia pedagógica y hasta psicológica, no interpretan que un padre laburó toda la semana, llevó a su hijo a las prácticas, en vez de descansar un sábado está junto al pequeño en la cancha y hasta pagando 10 mangos que a veces faltan, para luego ver que el nene juega menos de 10 minutos por no ser “talentoso”.

Sí, sí…Es lógico lo que nos transmiten algunos papás, pues hemos sentido el mismo gusto amargo, sobre las ganas que les dan de pedir la cabeza de ese Monitor que evidentemente incurre en “0” autocrítica ya que ese tipo de miradas no la tiene con los “cracks” del equipo que sí están listos cuarto a cuarto para salir sin que siquiera los elija previamente. No… Ellos ya tienen su lugar pues son las “figuritas” amparadas, al indiscutiblemente ser considerados por el propio Monitor como los “mejores” del plantel…

Para concluir…Una apostilla más…Nos llegó un dato a confirmar pronto…Hay Monitores que usan canchitas en sus charlas con los niños. No rebatimos su metodología. Simplemente nos provoca una dosis extra de asombro. Nada más lindo que sentarse o ponerse en cuclillas con los chicos a charlar mirándolos, uno por uno…Se nos hace algo extraño dar instrucciones mediante un “tabloncillo” (como le dicen en el Caribe) a un pibito en pleno juego. Está bueno como para fijar puntos de referencia, pero nada mas pues nos da miedo que a ésta altura del aprendizaje se intente transmitir directivas por medio de ese instrumento. Ojo…No es una crítica…Es un punto de vista… Solo eso.

Por hoy, nada más… Los invitamos a seguir escribiendo a hola@cuestionentrerriana.com.ar. Nos encanta leer sus opiniones y les pedimos autorización para publicar sus consideraciones siempre que se eleven con respeto y dejando nombre, apellido y DNI claros. Desde ya que no daremos a conocer insultos, calumnias, difamaciones o comentarios destructivos. Pero columnas editoriales que contribuyan a que todo mejore, no lo duden que serán publicadas, y si pueden mandar una foto carné de quien refrenda esa nota, mejor.

Y a los detractores, no se olviden que la piel está curtida… Hemos llegado a perder anunciantes en el ámbito deportivo PROFESIONAL por no claudicar en nuestros principios. Por ende, menos aún nos van a callar en éste nivel.

Pagamos la cuota del club, abonamos nuestras entradas en cada estadio, local o visitante aún teniendo la credencial que nos exime de ello, solemos firmar como responsables, nos ponemos a limpiar si es necesario, o como la última vez, a sacar vidrios de la cancha, sacamos fotos GRATUITAMENTE, le damos un considerable espacio al Mini. Todo, sin siquiera un auspiciante. Nadie nos regala nada y hasta hemos llevado planilla, reloj, vendido boletos, hecho tortas fritas, preparado kioscos con snacks, hasta a veces a pérdida propia.

Pura pasión. Puro amor por el Minibásquet. Mirá si nos van a hacer callar… Solo un imbécil puede siquiera pensarlo… Y no le pongan el cascabel al gato que se pone más arisco. Más bien, todo lo contrario. Reflexionen y cambien rumbos equivocados. Así, tendrán mayor apoyo aún de nuestra parte. Hasta cualquier momento y vaya nuestra promesa de hablar muy pronto sobre lo que nos han solicitado en mails diversos en torno a armado de subcomisiones, potestades, atributos, deberes, obligaciones y búsqueda de utilidades o provechos por parte de algunos hábiles papis que -sugestivamente-, siempre están a cargo de las mismas.