Llega el subcampeón de la LNB y Echagüe no puede acostumbrarse a perder

Desde las 21, Echagüe (3-6 y 8°) busca en el “Luis Butta” salir de la mufa. Arrastra seis fechas amargas al hilo y recibe a La Unión (3-5 y 7° en la tabla) que en Formosa le ganó por 90 a 81. Impartirán justicia Juan Fernández y Mario Aluz. Jornada íntegra por la Región Norte. Argentino le birló el invicto a Bahía.

 

El 5 de octubre, San Martín de Corrientes quebró el invicto del “Negro” entrerriano (77-95). Tres días atrás, Echagüe consumaba su tercer triunfo consecutivo ante Instituto de Córdoba (89-87). Por lo cual, hace poco más de veinte días que el plantel de Daniel Maffei no sonríe, soportando de modo sucesivo 6 frustraciones, tres en su casa y tres en la ruta.

La Liga es larga, sí, pero el participar con un presupuesto austero en extremo impide, tal cual lo pronosticado, readaptar el proceso con cambios inaplazables.

 

A diferencia de sus rivales actuales y los por venir, DT y dirigencia han pospuesto transformaciones en la estructura, pero a la vez no se denota la más ínfima evolución en el desempeño colectivo.

Peor aún… hay individualidades en un rendimiento muy inferior al que se espera de ellos, sin embargo cuentan con el aval de su coach aún en la desdicha.

 

No vamos a seguir machacando porque puede ser cansador para el lector pero… está claro que la falta de una línea estratégica-táctica ha implicado un desgaste notorio del tributo singular. El scouting de los rivales fue progresando sensiblemente mientras que nada varió en el funcionamiento de Echagüe como EQUIPO.

O sea… Tras la tercera sorpresa ante “La Gloria”, Sebastián González, Gaby Picatto, Guille Narvarte y Fernando Duró captaron que controlar y dañar a los de Paraná era más fácil de lo pensado.

 

Por su parte, Maffei no introdujo ninguna alternativa, o más peculiar… recuperó a su formación completa tras la mufa de tantas lesiones/enfermedad, la performance de la mayoría de sus fichas “de confianza” se cayó a pique en vez de evolucionar y el entrenador resolvió dar respaldo total a quienes por allí precisarían un “recreo” en tanto otros necesitan inobjetablemente un voto de confianza, una nota de crédito.

 

Echagüe ha perdido no solo 6 partidos encadenados. En algún lugar quedó perdido el carácter, la personalidad, el temple, la consistencia, la solidaridad, el diálogo, la sagacidad, la picardía, el atrevimiento lucido frente a Libertad, Atenas e Instituto.

Y ojo… tampoco, como ya lo dijimos, en esa sucesión de satisfacciones, no todo fue color de rosa. En realidad, nunca jugó espléndido COMO EQUIPO, pero sí hubo inspiraciones originales y con eso alcanzó ante adversarios superiores respecto a personal aunque atrapados, cazados en las redes tendidas por el humilde retornado a Primera.

 

Después, dejó de ser una rareza, lo estudiaron convenientemente, y se terminó la euforia. O más delicado… germinó la intolerancia sobre todo del coach, brotó la impaciencia, y empezaron a verse posturas porfiadas muy negativas.

Anárquicas dentro del rectángulo, tercas desde la banca.

 

Hoy, Echagüe provoca la sensación de estar partido al medio. Lo que es más, trascendidos MUY CONFIABLES hablan de una remarcada división entre los “preferidos” del técnico y otros que quieren jugar más (y merecen…) pero Maffei les ha quitado protagonismos.

Del mismo modo, se indica que al menos UNO de los tres extranjeros tiene las horas contadas. Pero a su vez, en el seno íntimo de la dirigencia habría marcada disidencia por la metodología de trabajo del contador/entrenador nicoleño en la semana y los frutos a la hora del partido.

 

Es que los directivos admiten haber armado una formación con lo que se podía económicamente y no sobra virtuosismo, por lo que -AHORA- se reconoce lo adelantado por este medio en lo vinculado a la falta de variabilidad en los sistemas, en el modo de atacar el aro ajeno y el de defender el propio.

Como si justamente faltara TRABAJO, calidad, cualidad, cantidad. Y esto es un suicidio partiendo de la base que si no se puede plasmar desniveles mediante el talento por piezas, es imprescindible, insoslayable armar una organización, una disposición, un orden colectivo RIGUROSO y mutable de acuerdo al rival de turno.

 

Por lo tanto, la imagen que se trasluce es de una indolencia inapropiada para la Categoría. Y sabemos que puede doler, o hasta puede ser aprovechado el artículo para colgarlo en un vestuario y pugnar por conmover la esencia motivacional. Pero es inexcusable decirlo… Tanta precariedad hace parecer a Echagüe como un elenco del TNA.

 

Por eso reafirmamos… No hay nombres rutilantes ni jugadores desequilibrantes. Entonces, más que nunca se necesita un coach, líder, constructivo, y poseedor de un playbook diverso, heterogéneo para robustecer la mecánica INTEGRAL.

Maffei, con un currículum que NO SE DISCUTE no le está dando a Echagüe lo que necesita. O de lo contrario, sus dirigidos NO LE OBEDECEN. ¿Quién tiene la razón?

 

Hoy, después de publicarse esta nota, seguro veremos al técnico más cordial que nunca, y hasta quizás Ruiz Moreno, Buemo, Barroso y Stucky ganen más minutos, teniendo la duda de si Eugenio Zustovich estará o no entre los 12 porque se retiró lesionado en el choque con Regatas sin informar siquiera un renglón la médica del conjunto.

Y es muy probable que si Narvarte falla en su “scouteo” o si sus orientados se duermen, Echagüe reconquiste la expresión de bienestar.

 

Ahora… ¿cuánto podría durar? Por eso, lo ideal es que prime la humildad, el bajo perfil. No vaya a ser que empiecen los gestos demagógicos-tribuneros con los cuales no se disfrazan carencias, insuficiencias, imperfecciones. Solo es un maquillaje que pocos “compran” (generalmente los que menos o nada de básquet saben…, incluida prensa exitista).

 

Pero… ¿Y si sale todo mal otra vez? ¿Y si Maffei persiste en su intransigente posición? En las últimas noches hubo descontento de ciertas minorías. ¿Se incrementará ese rechazo que tiene por blanco principal al DT?

 

Y se habla mucho de lo defensivo… siendo el equipo que más puntos permite, con 90,8 por partido y la cifra ha subido a 94,1 durante la reciente seguidilla de caídas.

Pero no se habla que el ataque produce respuestas opuestas implacables.

 

Narvarte rinde un examen crucial: La Unión salió cinco veces fuera de su colosal estadio y perdió las cinco. Caer en Paraná puede ser muy perjudicial pensando en la sumatoria con miras a la Segunda Fase.

En sus cinco encuentros como forastero, La Unión promedia apenas 65,4 puntos y nunca anotó más de 67.

 

Sus máximas figuras en la ofensiva son el venezolano José Vargas y Diego García, ambos con 10,2 unidades. El podio lo completa Facundo Piñero con 9,9.

Hablando del partido “de ida” García fue el máximo estandarte con 25 puntos, Piñero aportó 15 y otros valores destacables resultaron Alejandro Konsztadt, Torin Francis y desde el banco Tavorice Prowell, quedando en deuda precisamente el precitado Vargas, Eduardo Gamboa, Pablo Orlietti y el ex Sionista, Jeremías Sandrini.

 

Echagüe le ganó a Libertad, a Atenas y a Instituto con ENORME actitud, con INMENSA intensidad, con ARROLLADORA vehemencia (que tuvo por cómplices a jueces visiblemente localistas…) y con un curioso y eficaz poder de repentización que embarulló al contrario.

 

Todo eso, con el TRABAJO apropiado de los cuerpos técnicos rivales de turno, se fue perdiendo pero -enfatizamos- Echagüe NO PROGRESÓ… INVOLUCIONÓ y quedaron al desnudo carencias,  limitaciones, penurias, inseguridades de un grupo que necesita irremediablemente un cambio de aire URGENTE para recobrar la confianza, la convicción, la competitividad.

 

Lo demás es solo del Norte

 

También desde las 21 se miden en “El Gigante Verde” Estudiantes (Concordia) (5-4, 5° Norte) vs Regatas (Corrientes) (4-4, 6° Norte) siendo jueces Daniel Rodrigo y Rodrigo Castillo.

 

A la misma hora arranca en “El Hogar de los Tigres” Libertad (Sunchales) (1-4, 10° Norte) vs San Martín (Corrientes) (6-2, 1° Norte) con arbitraje de Pablo Estévez y Diego Rougier.

 

Por último, desde las 22, en el “Vicente Rosales” se enfrentarán Olímpico (La Banda) (5-3, 3° Norte) vs Atenas (Córdoba) (2-6, 9° Norte), dirigiendo Fabricio Vito y Julio Dinamarca.

 

Se acabaron los invictos

Argentino -como local en Junín- dejó a la Liga Nacional sin invictos al vencer a Bahía Basket por un contundente 75 a 54. El resultado pese a todo no produjo cambios en las posiciones de la Conferencia Sur dado que el equipo bahiense continúa liderando la misma.

Más de la mitad de los puntos de Argentino pasaron por tres jugadores (Novar Gadson, Chaz Crawford y Mateo Bolívar), quienes sumaron 14 puntos cada uno y combinaron la mitad de los tiros (16/32). En Bahía Basket 35 pasaron por Anthony Johnson (19+7) y Juan Vaulet (16).

 

La síntesis

 

ARGENTINO (Junín) (3-5) 75-BAHIA BASKET (Bahía Blanca) (7-1) 54

Argentino (75): Cristian Cortés 0 Juan Cangelosi 11 Emiliano Basabe 8 Novar Gadson 14 Chaz Crawford 14 (fi); Mateo Bolívar 14 Joaquín Gamazo 5 Facundo Zárate 2 Gastón García 7 Martín Delgado 0, Genaro Lorio 0. DT: Eduardo Jápez.

Bahía Basket (54): Gastón Whelan 8 Lucio Redivo 9 Juan Vaulet 16 Jamaal Levy 0 Anthony Johnson 19 (fi); Hernán Jasen 0 Facundo Corvalán 0 Martín Fernández 0 Francisco Filippa 0 Ariel Ramos 2 Rodrigo Gerhardt 0 Fermín Thygesen 0. DT: Sebastián Ginóbili.

Árbitros: Arbitros: Oscar Martinetto y Alejandro Chiti. Parciales: 17-12, 42-27 y 61-50. Estadio: Argentino.