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La APB y un Nivelación con saldo nefasto

Siguen las goleadas, continúan los castigos innecesarios y ahora se suman actitudes para nada constructivas en el Oficial U15 de la Asociación Paranaense de Basquetbol. En el “Antonio Zorzet”, la ficha de mayor peso físico de Recreativo (1m90), Casiano Calderón Bourband, sufrió un artero codazo por parte de un jugador de Neuquén en el último cuarto de un partido en el cual los “Rojiverdes” ganaban sin sobresaltos y hasta jugando bastante mal en relación a lo que habían rendido con Quique B la semana pasada. Galería de fotos.

 

Al cabo de los primeros 10 minutos ganaba 31-4 el dueño de casa, con la explosiva tarea en la base de Ramiro Grippo, la potencia ofensiva de Federico Saucedo y la talla de Casiano Calderón Bourband aprovechada para el gol interno como externo.

La brecha era de 27 y con precio…

 

Ya con esa diferencia, los siguientes cuartos fueron de inteligente manejo por parte de Hugo Camisasca y Jorge Cura quienes apostaron a mover el banco con permanente rotación, posibilitando que todos sumen proporcionadamente minutos y no se profundice la paliza. Un buen gesto del Cuerpo Técnico anfitrión en todo sentido. Muy distinto al de otros colegas que quieren siempre despedazar a sus rivales.

 

Sin embargo, el cierre no fue feliz para este partido. Cuarto capítulo… Fueron a disputar un balón casi junto a la línea final de la cancha, bajo el aro que da a calle Italia, el n° 14 visitante y el 15 del Bochas, al lado de nuestra posición de fotografía, y el basquetbolista “Aurirrojo” le tiró un codazo absolutamente innecesario a Casiano Calderón Bourband cayendo al piso con la boca ensangrentada el ex campeón con Quique y la selección APB U13, gritando de dolor.

 

Lejos de asistirlo, el chico de Neuquén dejó tirado a su oponente y se fue hacia el banco a hablar con su técnico, mientras un compañero lo vendía: “le pegó un codazo”. Tras segundos de cabildeos del árbitro seguidor de la acción (que no pudo ver claramente la situación como nosotros) y estando tendido el jugador agredido con la boca sangrante, llegó la asistencia desde el cuerpo técnico de Recreativo y fue llevado Calderón al vestuario donde se constató un corte interno y otro externo en el labio del hasta hace pocos días preseleccionado APB U15.

 

Hecha la limpieza de la zona y frenando el abundante manar de sangre se le aplicó una gasa y hielo, como se llamó al Servicio de Emergencias Medical que, felizmente, posee la entidad.

 

 

En todo ese lapso se completó el encuentro, felizmente sin consecuencias, y fue loable la conducta de CASI todos los chicos de la visita que al cabo de despedirse de sus rivales, fueron al banco de Recreativo para saludar a Casiano Calderón con gestos de lamento por lo ocurrido.

 

Sin embargo, el 14, el agresor, no se acercó. Tampoco lo hicieron el técnico ni dirigentes o padres de dicha institución para transmitir como mínimo su adhesión al dolor del pibe herido. Una pena. Hay gente de muy buena savia en esa querida entidad del sur paranaense. Gente de enorme educación y de excelsos valores humanos que conocemos y apreciamos. Gente y dirigente que han hecho de ese pequeño club una entidad de reconocida popularidad y prestigio en esa zona de la capital.

 

Por lo visto, los que anduvieron por el “Zorzet” minimizaron el hecho o simplemente cuando ocurrió estaban dedicados a otra cosa. Claro está… Si el propio DT de su equipo no se inquietó en pasar por el banco del adversario unos segundos, quizás considere que ese obrar vehemente, agresivo, sea normal.

 

Hay técnicos, en casos especiales, ex jugadores, que ven normal que un jugador de sus equipos abra sus codos peligrosamente. Lo hacían comúnmente cuando jugaban. Era su sello, el jugar fuerte, imponiendo respeto.

 

Por eso es que hay entrenadores que transmiten formas de jugar poco convenientes y hasta modos de proceder con árbitros y rivales. Instructores que suelen imponer vehemencia por sobre el talento, y que no dudan en tomar ventaja de lo que sea.

 

No tenemos idea siquiera de cuál es el apellido del DT de Neuquén. No conocemos su historia basquetbolística, pero es triste pensar, imaginar. que debe integrar ese lote. Habrá que hurgar en los Archivos APB para constatar si estamos equivocados.

 

Pero para ser JUSTOS, estamos convencidos, no obstante, que él debe haberle dicho a sus chicos “vayan y saluden al jugador que su compañero lastimó.”. Salvo que los 11 pibitos que se arrimaron al banco del Recrea sean tan pero tan bien formados humanamente que ELLOS SOLOS tomaron esa decisión. Sería HERMOSO, lógicamente.

 

Lástima, una pena, que el DT de Neuquén no haya sido más enfático con el pibe que llevó la casaca 14 quien, a poco más de 2 metros de nuestra ubicación y en línea recta (o sea imposible de no apreciarlo), le tiró un codazo ascendente nefasto al adversario circunstancial, hasta ese momento la vía más clara ofensiva del Bochas.

 

Es obvio que no conocemos la intimidad de lo sucedido y tal vez la amonestación haya sido en el seno del grupo, pero hubiese sido un buen gesto ir a darle la mano al pibe lastimado, reconociendo la desgraciada responsabilidad, pidiendo disculpas y punto final, NO ESTARÍAMOS HACIENDO ÉSTA CRÓNICA TRISTÍSIMA.

 

No… quedó todo como que fue adrede, a propósito. Y reiteramos… Pudo ser una jugada común, de saldo negativo, pero sin la MENOR INTENCIÓN. Cuando ello sucede, quien golpea asiste al herido, quién lastima se aproxima para brindar su pesar y peticionar las disculpas más allá que el golpe haya sido ocasionado sin la más mínima intención y solo se diera en el fragor de una contienda, en este caso TOTALMENTE EVITABLE.

 

Es la LEY DEL DEPORTE jugado con Fair Play. Golpeás sin quererlo, pedís disculpas…

 

Casiano fue atendido inicialmente por enfermero y facultativo de Medical quienes derivaron de inmediato al jugador del Recrea a la Clínica Modelo donde el Dr. Joaquín Meresman (con una atención que deseamos destacar por su humanidad no exenta de relevante profesionalismo), colocó dos puntos en el labio externo dejando en observación la herida interna para evitar mayor dolor.

 

Vale agradecer la preocupación inicial de toda la Familia “Rojiverde” que se preocupó por el lungo del club de calle Italia como de los jueces del partido, más allá de inicialmente no interpretar uno de ellos nuestro desvelo al ver cuánta sangre brotaba de la boca de Casiano.

 

Ambos árbitros, de impecable tarea administrando justicia, se quedaron varios minutos después del cotejo para ver el estado de Casiano Calderón exhibiendo notable humanidad.

 

¿No lo echaron al 14?

 

Nos han preguntado durante toda la noche de ayer si el jugador de Neuquén fue expulsado. No tenemos la menor idea. Creemos que no pues el árbitro que seguía la acción evidentemente no pudo ver el codazo pues estaba, bien ubicado, pero sobre el margen inferior izquierdo bajo el cesto y la jugada fue en diagonal a su visión, casi frente al banco de los sureños.

 

Sinceramente, lo que menos pensamos en ese momento fue protestar. Solo nos embargó la preocupación por ver el rostro ensangrentado de Casiano, y DIGNAMENTE, reconocemos que si el árbitro no pudo ver, MENOS podían contemplar agudamente la imagen los simpatizantes, por consiguiente NO PODÍAN SURGIR PROTESTAS. Para nosotros FUE MÁS CLARO porque la posición de los chicos era bien derechito a nuestra ubicación y, reiteramos, a tan solo 2 metros y centímetros.

 

Todo quedó, Y LO CREEMOS LAMENTABLEMENTE LÓGICO, como una desafortunada acción. Por eso da más bronca la conducta del chico de Neuquén. Pudo hacer que todo quedara en ello. Pero no… Se fue junto a su técnico en silencio, sin saludar a quien agrediera, tal vez sin mala intención, aunque, se llevó a previa la materia HUMANIDAD.

 

Es para repensar  la impactante muestra de poco corazón que exhibieran él y su DT, como personal Mayor que estaba junto al banco neuquino (dos personas) en distintos momentos de la contienda.

Aclaramos… Esperamos hasta el mediodía de hoy un llamado, un mensaje vía face de cualquiera de ellos, pero no… Por ende, inevitable pensar que el golpe NO FUE CASUAL. Mientras, Casiano,  sufrió no cenar, solo beber, y pasar la noche con hielo y analgésico para levantarse hoy con la boca como un repollo más todo lo que ello acarreará en la semana, recomendándosele no participar de acciones deportivas con oposición por el lapso de 7 a 10 días.

 

HUMANIDAD… SENSIBILIDAD… PIEDAD… Nada de ello surgió desde la mente del agresor y de sus responsables al menos hasta hoy al mediodía. Cuánta tristeza por nuestro gurí, por el futuro de ese chico que agredió y lució imperturbable, por ese DT que no se inquietó por el estado de salud del chico agredido como por que todo quede como lo que debía parecer: o sea, una acción desgraciada. Nada más que eso.

 

Cuánta amargura por el aprecio y valoración que siempre tuvimos por la familia neuquina. Cuánto dolor innecesario.

 

Una competencia desigual

 

Vale la pena dedicar unos renglones más a un Torneo absurdo que la APB sigue desarrollando. ¿Para qué estos partidos? Si Recreativo se lo proponía y algunos jugadores lucían más enchufados, como si el propio DT confiaba en sus 5 equipistas más diestros, el Bochas ganaba por paliza.

 

Está claro que Quique, Talleres, Echagüe, Ciclista, Sionista, Olimpia, son los mejores equipos del básquet U15 de Paraná.

 

Luego vienen, en un grupo muy parejo, Recreativo, Estudiantes, Rowing, Paracao y Quique B. Hasta lo que hemos visto.

 

¿Por qué no reunirse todos los técnicos y decidir que hasta la conclusión de esta Nivelación, no habrá más goleadas patéticas, y los mejores equipos REGULARÁN sus rendimientos, otorgándose a los que menos minutos habitualmente juegan mayor participación, y de este modo tampoco surge la impotencia de los elencos vapuleados???

 

Solo así seguiremos apostando al desarrollo de nuestras Formativas. De lo contrario, proseguiremos viendo deserciones, abandonos de pibes frustrados, o cada vez más chicos heridos por esa sensación de impotencia que suele invadir a quienes son maltratados competitivamente por adversarios de mayor poderío, exteriorizando gestos agresivos infecundos.