Extraordinario nivel de la Clínica ESCO-CODITEP
Un FENOMENAL, sí, sí… con mayúsculas. nivel de oradores, jerarquizada presencia y respetuosa atención del auditorio tuvo la Clínica ESCO-CODITEP. La categoría de los expositores, la didáctica y carisma de cada uno de ellos, la impecable organización, como algunos ingredientes extras, le dieron un sabor especial. Postales de una harto emotiva clausura.
Desde el vamos, el kinesiólogo Lic. José Ossemani maravilló con su exposición sobre lesiones, prevención y tratamiento en el alto rendimiento, y Marcelo Nogueira dejó algunos conceptos interesantes en cuanto a la relación “Prensa-Entrenadores”.
A partir de la tarde del viernes y hasta mediodía del domingo se sucedieron módulos atrapantes a cargo del español Joan Plaza, el bahiense Néstor “Ché” García y el estadounidense Dave Hopla, en tanto que, el sábado por la noche se concretó una disertación del español José María “Chema” Fernández, en lo relativo a Liderazgo en el Deporte, la cual tuvo algunas aristas muy provechosas.
Plaza se destacó por la simpleza y claridad conceptual en sus ejercicios; García por su indudable cambio en cuanto a la expresión, se lo ve muchísimo más maduro, centrado, con un acervo muy enriquecido aunque con la chispa de siempre; y Hopla maravilló por su actitud, eficacia y poder de comunicación en eso de enseñar ilustrando, todo ello facilitado por una pulcra traducción de Facundo Petracci, más la conducción de Marianito Latorre, está claro que hablamos de un altísimo nivel de Clínic.
Si le sumamos que en pleno desarrollo se conmemoró el aniversario del nacimiento de un inolvidable coach como León Najnudel, el aniversario de la CODITEP y el anuncio del retiro como presidente de ésta entidad por parte del mítico Luis Martínez, se reafirma de modo claro la carga emotiva que tuvo ésta Clínica Internacional.
Se podrán elegir a futuro mejores expositores, pero de algo no tenemos duda y es que difícilmente se logre equiparar tanta vibración positiva como la disfrutada durante éste fin de semana en la capital entrerriana, donde se reunieron, salvo los técnicos de selecciones Confederativas, los mejores entrenadores del Continente Sudamericano no solo para revalidar títulos sino que especialmente para seguir aprendiendo.
