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El comercio de Paraná en jaque (¿mate?)

ESPECIAL (Por Francisco Pancho Calderón).- Recorrer el microcentro paranaense deprime. A los manteros que intenta sacar la Municipalidad sin éxito, se suman obras (incómodas pero que ya se verá su saldo…), un estado deplorable de la Peatonal, en especial entre calles Urquiza y España/25 de Mayo, y la imagen que dan incontables locales cerrados en alquiler o comercios vacíos.

Lo mismo ocurre casi a diario en el Shopping La Paz o ni que hablar en galerías donde para colmo en vez de buscar que funcionen a pleno durante todo el día se respeta un horario que el comerciante paranaense deberá replantear urgente, amén de la casi nula utilización de las herramientas de marketing.

 

Ayer por la tarde caminamos por el área céntrica de esta Capital y si bien en todas las calles surgen locales vacíos en renta, fue sorprendente el paseo por la cuadra del Teatro 3 de Febrero (en ambas veredas).

La sensación es que se pusieron de acuerdo varios locatarios y huyeron despavoridos. Postales lamentables por cierto.

La recesión toca el hueso. Mientras el presidente Mauricio Macri sigue mintiendo, engañando estafando la fe de millones de argentinos que apostaron al “Cambio”, la realidad es incontrastable, la depresión económica-financiera hace estragos.

Es enorme la cantidad de pymes que están cerrando, mientras muchas otras se trasladaron a la economía informal, generando un esquema de precarización productiva que va a tener consecuencias muy graves a futuro.

Se suma a esta situación otro dato dramático la capacidad instalada de la industria mantiene su línea decreciente y refleja un registro que es peor incluso que entre el 2001 y el 2002, cuando Argentina soportó la peor crisis de su historia.

 

Para colmo, Macri, Peña, Frigerio, Dujovne, Sica y Cia. no solo no están ofreciendo ningún tipo de contención, sino que están anulando las históricas herramientas que utilizaba el sector como el financiamiento a tasas blandas del Banco Nación.

Sin hesitar que Cambiemos ha destruido el mercado interno. Está a la vista.

Los comerciantes no pueden hacer frente a los aumentos de tarifas en los servicios públicos y de los precios de los alquileres. Sumado a un aumento en el costo de las mercaderías y la constante caída de demanda que se siente en el mercado interno.

 

El comercio, en líneas generales, apunta contra los elevados y dolarizados costos energéticos, la inestabilidad del dólar y sus consecuencias, la ausencia de financiamiento, los embargos de la AFIP y una ausencia de control en las importaciones de productos con sustitución nacional; el incremento de los impuestos, las tasas de interés bancarias anti empresariales que imposibilitan la actividad productiva de las empresas, en especial mantener el staff o personal en condiciones laborales adecuadas.

No es necesario subjetivizar estas líneas… Basta con caminar por las veredas paranaenses. La coyuntura es angustiante. ¿Se reflejará oportunamente en las urnas?